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Nueva York se encuentra en el noreste de Estados Unidos.
Más de ocho millones de personas viven en la Gran Manzana,
y la ciudad acoge hasta cincuenta millones de visitantes al año.
Desde la llegada de los colonos en 1624,
Nueva York se ha ido adaptando a las olas de inmigrantes atraídos
por la promesa de esperanza y libertad.
Cada recién llegado traía consigo un bagaje cultural que ha contribuido a crear los sonidos,
sabores y texturas de Nueva York.
Pero han sido sus sueños lo que ha ayudado a construir la ciudad. ¡Una ciudad única!
Nueva York no solo toca el cielo con su emblemático horizonte,
su influencia se expande por todos los rincones del mundo.
Cada esquina resulta familiar por todos los documentales, películas y canciones de la ciudad.
Gracias al sencillo plano urbano ortogonal de Nueva York, es fácil recorrerla
a pie, en taxi o en metro, que, al igual que la ciudad, ¡nunca duerme!
En el Midtown de Manhattan encontrarás muchos de los monumentos más emblemáticos de la Gran Manzana.
El Empire State Building, de estilo art decó, es uno de los rascacielos
más impresionantes y bonitos que se han construido.
Aunque la ciudad haya crecido a su alrededor, la vista desde la 102º planta
sigue siendo tan espectacular como cuando abrió sus puertas en 1931.
Nueva York siempre ha sido un lugar en el que saben salir adelante cuando las cosas se complican.
El Rockefeller Center, el centro visionario de la ciudad,
creció durante el período más oscuro de la Gran Depresión.
Hoy en día sigue siendo un lugar de creatividad e inspiración
con unas vistas aún más impresionantes de la ciudad.
Más cerca del suelo se encuentra la Grand Central Terminal.
Entra en el vestíbulo principal y siente las lágrimas de cada despedida
y la alegría de cada reencuentro producido a lo largo de la historia de la estación.
Nueva York siempre ha sido la puerta de entrada a la Tierra de la libertad,
pero también es la ciudad de las compras compulsivas.
Es un auténtico paraíso para los adictos a las tiendas,
y la Quinta Avenida, con sus asombrosos escaparates,
es el gran templo de las compras.
Times Square, una de las atracciones turísticas más visitadas de todo el planeta.
Párate aquí, en la esquina entre Broadway y la Séptima Avenida,
y estarás en el cruce de los caminos del mundo.
También es el sitio perfecto para conseguir una entrada de Broadway a mitad de precio.
Nueva York cuenta con amplios espacios públicos.
Pero no hay mejor lugar para relajarse en la Gran Manzana que Central Park,
un bonito conjunto de prados y lagos de más de 340 hectáreas.
Los neoyorquinos vienen aquí a descansar, a enamorarse y a expresar sus opiniones.
Durante décadas, muchos neoyorquinos triunfaron,
y gran parte de sus riquezas se reinvirtieron en coleccionar
algunas de las mejores obras de arte del planeta.
Hoy en día es posible admirar gran parte de este arte.
Un paseo por el Museo Metropolitano de Arte
es un paseo a través de 5000 años de los mejores momentos de creación de la humanidad.
El Guggenheim, diseñado por Frank Lloyd Wright, es un paseo distinto,
uno que sube en espiral a través de una vertiginosa colección
de obras maestras de los siglos XX y XXI.
Durante la primera visita a Nueva York pasarás mucho tiempo mirando hacia arriba,
pero desde los ataques del 2001 al World Trade Center,
hay una nueva atracción que ofrece a los visitantes la oportunidad de detenerse y agachar la cabeza.
El museo conmemorativo Reflecting Absence rinde homenaje a las 3000 personas
que perdieron la vida en el día más oscuro de septiembre.
En Nueva York se escuchan más de 800 idiomas distintos,
y no hay nada que refleje esta diversidad como sus diferentes barrios.
Little Italy recoge todos los colores y sabores de Italia en un par de calles,
mientras que el Soho atrae a modernos y bohemios pudientes de todo el mundo.
Unas manzanas más allá, el Greenwich Village conserva los bares y cafeterías
donde dieron sus primeros pasos artistas como Bob Dylan antes de convertirse en símbolos americanos.
Y después están los distritos.
Cruza el puente de Brooklyn para llegar a esta zona multicultural.
Con sus propios barrios, museos, espacios al aire libre,
¡y la inolvidable Coney Island!
Bienvenido a Nueva York, la Gran Manzana.
Y esto es solo una pequeña muestra de lo que esta increíble ciudad ofrece.
Pero si eres de los que quieren disfrutar de lo mejor de la vida,
este es el destino ideal para ti,
¡aquí hay entretenimiento suficiente para toda una vida!