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El mundo es un desastre.
Pobreza. Sida. Hambre.
Guerra.
¿Entonces qué otra novedad hay?
¿Y si hubiera una solución inesperada
que pudiera voltear este barco que se está hundiendo?
¿La reconocería incluso si
ya la hubiera visto?
No es la Internet.
No es la ciencia.
No es el gobierno.
No es el dinero.
Es
(pausa dramática)
una niña.
Imagínese una niña que vive en la pobreza.
No, hágalo.
Realmente, imagínela.
Una niña
Moscas. Un bebé.
Esposo.
Hambre. VIH.
Ahora, imagine que puede arreglar esta foto.
Bien.
Ahora ella tiene una oportunidad.
Pongámosle un uniforme de escuela
y vea como ella obtiene un préstamo para comprar una vaca
y usar las ganancias
de la leche para ayudar a su familia.
Muy pronto, su vaca se convierte
en una manada.
Y ella se convierte en la propietaria del negocio
y que trae agua limpia
al pueblo,
lo que hace que los hombres respeten su sentido común
y la inviten al consejo del pueblo
donde ella convence a todos
que todas las niñas son valiosas.
Pronto, más niñas tienen la posibilidad
y el pueblo prospera
Bebés más saludables. Paz. Menos VIH.
Comida. Educación. Comercio.
Sanidad. Estabilidad.
Lo que significa que la economía
del país entero
mejora y el mundo entero
tendrá mejores circunstancias económicas.
¿Entiende lo que está sucediendo aquí?
Niña. Escuela. Vacas. $
Negocio. Agua pura. Cambio social.
Una economía más fuerte. Un mejor mundo.
Se lo denomina the girl effect.
Multiplique eso por 600 millones de niñas en el mundo en vías de desarrollo,
y comience a cambiar el curso de la historia.
Invierta en una niña y ella hará el resto.
No es gran cosa.
Solo el futuro de la humanidad.