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En la temporada 1 de La Historia de las Cosas, vimos un sistema que
crea demasiadas cosas que en realidad no necesitamos.
Ahora empezaremos a conocer las historias detrás de la historia de las cosas.
Así es como encontraremos maneras de cambiar esta situación.
¡Bienvenidos a la temporada 2!
"Malo para ti, malo para Norteamérica!" "El nos hará retomar el camino"
"Tiró a nuestro estado al suelo y ahora quiere ser tu senador." "¡Levántate! ¡Di No!"
"¡Levántate y di No!" "Malo para ti, malo para Norteamérica!" "¡Vota por este tipo!" "¡Vota por este tipo!"
¿No estás cansado de esto
¿Por qué en cada elección se vuelve imposible escuchar los hechos por sobre estos
confusos anuncios?
Y si parece que el problema está empeorando, es porque así es.
Podemos agradecer a la Corte Suprema por aquello.
En el 2010, ellos decidieron que estaría bien
que las corporaciones gastaran tanto dinero como quisieran en decirnos por quién deberíamos votar.
Espera,
¿Por qué están las corporaciones diciéndonos por quién votar?
Aclaremos algo.
Esto es una democracia, tú sabes, regida por la gente
Yo soy una persona, tu eres una persona, ¿y Chevron?
No es una persona.
Entonces, ¿No deberían ser las elecciones nada más sobre lo que la gente quiere
Buenos trabajos, productos seguros, salud, gobierno responsable.
Aire y agua limpios.
Resulta que la gran mayoría de los norteamericanos quiere ver muchos más trabajo realizado en estos temas.
Pero lo que la gente quiere se quedará en el asiento trasero mientras las corporaciones puedan gastar millones
haciendo que se elija a "hacedores de leyes".
Las compañías petroleras han logrado que los políticos bloqueen leyes de protección de nuestro clima.
Los fabricantes han presionado a través de acuerdos de comercio que obvian la seguridad de los productos y ayudan a enviar empleos al extranjero.
Las compañías de seguros han sido las primeras consultadas respecto a reformas en salud y las corporaciones gigantes
han conseguido rescates y subsidios.
Tal vez por eso, gente de todos los sectores, republicanos, demócratas, independientes, están totalmente frustrados
con nuestro gobierno. (multitud molesta gritando)
Es fácil enojarse.
Pero es tiempo de que nos pongamos listos y nos demos cuenta de que el corazón de nuestro problema no es que tengamos malos
"hacedores de leyes". Tenemos una democracia en crisis.
El 85% de los norteamericanos sienten que las corporaciones tienen demasiado poder dentro de nuestra democracia
Y las personas, tienen muy poco.
¡85 por ciento!
Hey, eso es la mayoría. Así que unámonos y quitémosle nuestra democracia a las corporaciones.
Es el primer y más importante paso para lograr un progreso real en todos los asuntos
que le importan más a las personas.
Entonces para comenzar, ¿cómo fue que "nosotros las personas" perdimos el poder en nuestra democracia?
Retrocedamos unos cuantos siglos.
En aquel tiempo, sólo éramos personas.
Algunos tenían negocios. Algunos trabajaban para los negocios.
Aun así, éramos sólo personas. Entonces las personas inventaron algo totalmente nuevo -- La Corporación.
Estas entidades legales existen independientemente de las personas que las poseen.
Si una corporación hace algo que la meta en problemas, los dueños pueden decir, "no me culpen a mí,
culpen a la corporación", "¡yo soy tan solo un accionista!"
Cuando los Estados Unidos comenzaron a existir,
era más fácil fiscalizar a las corporaciones.
En ese entonces,
el gobierno hubiera entregado concesiones para un proyecto específico a corto plazo , como construir
un puente o un ferrocarril.
Una vez cumplido su propósito, se disolvían.
Pero con el tiempo, las leyes cambiaron y las corporaciones no necesitaban ser disueltas una vez que el proyecto
esté completo.
Empezaron a vivir indefinidamente,
Con un propósito mucho más general,
Ganancia.
Y así es como la corporación moderna nació.
Las corporaciones de hoy han evolucionado para tener algo muy peligroso en su programación.
a diferencia de las personas, que están impulsadas por todo tipo de motivaciones --
hacer lo correcto, amor por la familia, su país, el planeta --
las corporaciones que cotizan en bolsa ahora están obligadas, por ley y por los mercados, a seguir una sola
motivación por encima de todas las otras.
Maximizar el valor para los accionistas --
hacer tanto dinero como sea posible.
Así es.
No, en serio, eso es lo que la ley y los mercados exigen.
Imagínate un amigo diciendo: "La única cosa que realmente me importa es el dinero."
No es alguien a quien le confiarías tus niños, o tu democracia con esas motivaciones.
Si, estas corporaciones están manejadas por personas
pero sus motivaciones humanas están en segundo lugar.
Si priorizan cualquier cosa sobre maximizar las ganancias, están afuera.
¿Pueden los líderes de las corporaciones hacer cosas buenas como donar a la caridad o tratar de ser más ecológicos?
Por supuesto. Pero no si interviene con la máxima ganancia.
Y desde sus humildes comienzos, las corporaciones crecieron enormemente.
53 de las 100 economías más grandes de la tierra ahora son corporaciones.
Entonces las corporaciones tienen un motivo de ganancias decidido.
Son enormes. Y sus dueños pueden
esquivar fácilmente la culpa por cualquier daño que causen
Eso hace que sea difícil compartir un país con ellos.
Si queremos que trabajen para nosotros y no al revés, ellos necesitan algunas reglas básicas.
Y ahí es cuando el gobierno entra
estableciendo reglas para mantener las cosas justas y seguras y proteger la sociedad de que
las corporaciones se vuelvan locas.
Ahora si su objetivo principal es el de maximizar las ganancias,
¿Tú crees que las corporaciones están contentas de seguir las reglas que las mantienen controladas?
No, claro que no. Ellas quieren escribir esas reglas.
Pero ¿Quién se supone que escriba las reglas en una democracia?
La gente.
Por eso es que una de las estrategias clave de las corporaciones para escabullirse en nuestra democracia
es reclamar que deberían tener los mismos derechos de la primera enmienda como gente real.
Y así es exactamente como ganaron ese caso de la corte suprema en 2010 conocido como
Los ciudadanos Unidos contra la CEF.
En ese caso, cinco miembros de la Corte Suprema decidieron que es inconstitucional
poner algún límite en cuánto dinero las corporaciones pueden gastar para influir las elecciones.
¿Por qué? Ellos dijeron que esos límites violaban la primera enmienda garantizando la libre expresión.
Obviamente nuestros padres fundadores que escribieron la primera enmienda estaban tratando de proteger
la libre expresión de la gente.
Pero esta decisión se basa en el loco argumento que las corporaciones deben ser tratadas igual que
la gente ¡Y deben recibir los mismos derechos que las personas reales reciben!
Esto significa que las corporaciones pueden gastar tanto como quieran, cuando quieran intimidar
o quebrar a un candidato que compite en una plataforma en contra de sus intereses
y apoyar a candidatos que harán lo que les pidan.
Grandes noticias para las corporaciones que quieren tomar a los que redactan las leyes y su trabajo
Para mantenerlos al margen.
Ahora, ¡Estoy a favor de la libertad de expresión!
Si cada accionista y empleado de Exxon quisiera apoyar personalmente algún grupo de presión del petróleo
Compitiendo por el senado, es su derecho.
Hay millones mas de personas que Apoyarán a un candidato diferente.
¡Esa es la democracia en acción!
Pero ahora Exxon o cualquiera otra corporación, puede Decidir gastar ilimitadamente fondos de sus
Grandes arcas corporativas para influenciar una elección,
Sin incluso preguntarle a sus accionistas.
Este es un gran problema.
Si las mejores 100 corporaciones deciden Tirar solo el 1% de sus ganancias,
Ellas podrían gastar más por cada candidato para presidente que para la cámara y senado combinados.
¡Buena suerte en que tu libre expresión sea oído por sobre eso!
¿La apertura de estos fondos causaron actualmente una inundación?
Por supuesto que sí.
En el 2010,
El tipo de grupos "independientes" que las corporaciones pueden ayudar,
Gastaron $300 millones.
¡Eso es más que la mitad del período de elección desde 1990 juntos!
Por lo que las corporaciones ahogan nuestras voces,
Obteniendo lo que ellas quieren y nuestra democracia está en problemas.
¡Pero podemos salvarla totalmente!
La gente esta indignada por la decisión de la Corte Suprema que una respuesta masiva se está movilizando.
Un problema tan grande requiere una solución enorme
y nosotros tenemos una,
una nueva enmienda de la constitución.
La enmienda es inteligente y clara. Reversa este desastre Para nuestra democracia dejando en claro que
La primera enmienda no pretende ser para las corporaciones con fines de lucro.
Yo se que enmendar la constitución es un objetivo grande y ambicioso.
Pero no es imposible.
Cada vez que se han hecho enormes y positivos cambios En este país
es porque la gente soñó en grande, apuntó alto y fijó objetivos ambiciosos.
Es tiempo de hacer eso ahora
porque la vida de nuestra democracia está en juego.
El financiamiento público de campañas debería ser otro gran paso adelante.
El congreso está trabajando en una cuenta que hará posible para los candidatos
ser elegidos sin fondos corporativos.
Recuerda, 85% de los Americanos piensa que las corporaciones tienen demasiada influencia
en nuestra democracia.
Eso es suficiente para hacer un cambio,
si podemos convertir ese sentimiento en acción.
Mira, las corporaciones no saldrán de nuestra democracia hasta que nosotros, la gente, vuelva a ella.
Por lo tanto mantente peleando por energías renovables, trabajos sustentables, salud, productos seguros y educación pública
de primera categoría.
Pero guarda algo de energía para la batalla de nuestras vidas.
...La batalla que puede abrir la puerta para solucionar todas estas cosas.
Es hora de poner a las corporaciones en su lugar y poner a la gente de vuelta a cargo de nuestra democracia.