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GRITOS Y SUSURROS
"Hoy es lunes por la mañana...
y estoy muy dolorida.
Mis hermanas...
y Anna...
se han turnado sin cesar para cuidarme.
Buenos días.
- ¿Como se encuentra hoy? - Ha pasado la noche tranquila.
- Gracias. - Me he quedado dormida.
Anna, ¿quiere hacer el favor de cuidarse del fuego?.
Gracias, Señor, por haberme permitido pasar...
una noche tranquila y haberme despertado...
sana y salva, bajo tu amparo...
También te suplico que hoy y todos los días...
ordenes a tus ángeles que cuiden y protejan a mi pequeña...
a la que por tu Divina Providencia llevaste contigo al cielo.
Amen.
Tengo a mamá en mis pensamientos todos los días...
...aunque hace ya 20 años que murió.
Recuerdo aquellas apacibles mañanas...
...en las que buscando la soledad paseaba por el jardín.
Recuerdo como la observaba..
...espiándola...
...porque la amaba hasta la locura.
La amaba por su dulzura...
...por su belleza y vitalidad.
Su presencia lo llenaba todo.
Pero también podía ser fría e intransigente...
y a veces, hasta un poco cruel.
No podía dejar de compadecerla.
Ya en su vejez llegue a comprenderla mucho mejor.
Como me gustaría verla...
...para decirla que ahora...
...entiendo su sufrimiento, su fragilidad...
...su melancolía y su soledad.
Entonces la bruja comprendió...
...que la pequeña Greta le había engañado...
...y su nariz empezó a crecer y crecer.
La víspera de Navidad mamá nos hacia una fiesta...
...y siempre venia una tía nuestra a contarnos...
...los mismos cuentos y fábulas.
Yo me sentía ausente y asustada.
Mamá procuraba tranquilizarme..
..con su habitual delicadeza.
Sin embargo mamá y María parecían tener tanto que cuchichear.
¡Eran tan parecidas!
No paraban de reír y eso hacía que me sintiera celosa...
...y mas sola que nunca,..
...pues no me dejaban participar de su alegría.
Recuerdo otra ocasión, en Otoño...
...en la que estuve observando...
...escondida detrás de unas cortinas.
Ella estaba sentada en el salón rojo,...
...con su vestido blanco, inmóvil, ...
...con las manos reposadas sobre la mesa.
De repente, me descubrió...
...y me llamó con una débil voz.
- ¡Ven!
Me dirigí a ella con miedo pues pensé que me iba a regañar.
Me miró con expresión triste...
...que casi me hizo llorar y me acarició.
Entonces, levanté la mano y le toqué la mejilla.
Por primera vez en mi vida me sentí completamente unida a ella.
Alguien anda ahí fuera.
¿Anna?
Alguien anda ahí fuera.
Buenos días, Agnes.
Buenos días, doctor.
Esta muy fatigada. Creo que se nos irá muy pronto.
Gracias. Conozco el camino.
¡David!
Amor mío.
¡Te echo tanto de menos!
¡No!
Unos años antes...
...estando María y su esposo Joakin...
...viviendo en la hacienda, y Agnes en Italia por razones de salud.
La niña de Anna se puso muy enferma una tarde...
...y María llamo al medico...
...que vivía en el pueblo vecino.
- Di "ah." - Ah.
- Otra vez. - Ah.
Ya veo que te duele un poco.
Eso es buena chica.
Ahora a la cama y a dormir.
Te sentirás mejor después de una noche de sueño.
- Gracias. - Si al doctor le apetece algo...
...la mesa esta dispuesta.
Buena idea, me sentara bien comer algo, gracias.
Agnes y Karin siguen en Italia. Recibí una carta suya...
...la semana pasada.
Agnes esta mucho mejor, ya no tose.
Se ha puesto otra vez a dibujar.
El esposo de Karin irá a visitarlas en Pascua.
Les esta haciendo un tiempo espléndido.
Casi de verano.
Y su marido, ¿esta bien?
Joakin, esta de negocios en la ciudad...
...y regresa mañana.
Me dijo que te pidiera que vinieras...
...a ver a la pequeña de Anna.
- Y te manda saludos. - Gracias.
Te he preparado la cama.
Hace mal tiempo.
¿No crees que debieras pasar aquí la noche?.
- ¡Como has cambiado!. - ¡Ah!, si.
¿Es que hay otra?
Siempre hay otra
Y además, no creo que sea de tu incumbencia.
No, no lo es.
¿Me miras por encima de las gafas?
- ¿Estas cómodo? - No estoy mal.
¿Eres tan orgulloso?
¿Ya te has olvidado de lo que hubo entre nosotros?
¡Ven aquí!
Ven.
¿Ves tu imagen en el espejo?.
Eres bella.
Tal vez mas bella que hace unos años.
Pero algo ha cambiado...
...y quiero que lo veas.
De tus ojos se desprende una mirada calculadora.
Antes mirabas abierta y directamente.
Sin disimulo.
En tu boca se percibe una mueca de desagrado...
Antes tu sonrisa era dulce.
Tu piel ahora es más pálida, por eso te maquillas.
Ahora, cuatro pliegues...
...atraviesan tu hermosa y despejada frente,...
...que no puedes distinguir, con esta luz...
...pero que se manifiestan claramente a la luz del día.
¿Conoces el origen de esos pliegues?
- No. - Los provoca tu indiferencia, Marie.
Y la línea perfecta de tu mandíbula...
...ya no esta tan dibujada...
...por tu abulia y tu dejadez.
¿Y sabes a que se debe?
A que no ríes con tanta frecuencia.
¿lo ves?
¿Te das cuenta, Marie?
Debajo de tus ojos,...
...esas arrugas finas e imperceptibles...
...de sufrimiento y desengaño.
¿De verdad ves todas esas cosas en mi cara?
Si, lo veo de cerca cuando me besas.
Creí que eras tú el que me besaba a mi.
Y se muy bien lo que ves en mí.
- ¿El que? - Te ves a ti mismo.
Somos tan parecidos tu y yo.
¿Es decir,...
...orgullosos, fríos, con un fuerte sentimiento de culpabilidad?
Siempre me han aburrido tus interminables análisis.
¿Y no podríamos compartir también otras cualidades mas positivas?
Me basta con lo que hay.
Buenos días, señor.
Buenos días.
Gracias.
Buenos días, Joakin.
- Bienvenido a casa. - Buenos días, María.
La hija de Anna está enferma.
Y ayer estuvo aquí el doctor.
Te manda saludos.
Le gustaría volver a verte para jugar contigo al ajedrez.
Se quedo aquí a pasar la noche, hacía un tiempo tan malo.
Se fue temprano, antes de que nadie se hubiera despertado.
¿Te lo pasaste bien en la ciudad o tuviste mucho trabajo?
¿Sabias que los Egermans...
...nos han invitado a pasar el día de Pascua en su casa?
Creo que es divertido...
...aunque solo sea por cambiar de aires.
A ti, ¿qué te parece?
Ya veremos.
Ve a jugar al jardín.
¿Joakin?
¿Joakin?
Ayúdame.
Ayúdame.
No.
¡Anna!
¿Oyes?
No, solo oigo el viento y el tic-tac del reloj.
No, es otra cosa.
Yo no oigo nada.
Tengo frío.
Buenas noches.
Anna.
Ven aquí.
Anna.
Ven conmigo.
¡Que lejos estás!
Acércate.
¡Abrázame!
¿Huelo mal?
- Me duele tanto, Anna. - Lo sé, Agnes.
Estaré a tu lado.
- Ya veras como se te pasa. - ¡Me duele tanto!
No debes temer nada mientras yo este aquí.
¡Tengo tanto calor!
Te daré la vuelta.
Ven. Verás.
¿Puedes levantarte un poco?
Échate un poco hacia atrás.
¿Estás mejor así?
¿Así estás bien?
Eres tan buena conmigo.
¿Qué pasa?
Agnes esta muy mala.
Creo que ha perdido el conocimiento.
Respira de forma rara.
Enseguida voy.
¡Karin!
- ¡Karin! - ¿Que pasa?
- Agnes esta muy mal. - ¡Ya voy!
- Deprisa, el doctor. - ¿Te acompaño?
¡Anna! ¡Anna! ¡Anna!
- ¿Cuando viene el doctor? - No estaba en casa.
Ve a vestirte, Anna.
Yo me quedo con ella.
¡Anna!
Parece que estoy mucho mejor.
¿Quieres que te lavemos un poco?
- ¿Te ponemos un camisón limpio? - Si, por favor.
- Tengo sed. - Si, claro.
- ¿Quieres que te lea un poco? - Si me encantaría.
"Capítulo 34, en el que el Sr. Pickwick decide que seria...
más sensato regresar y pagar los gastos del pleito.
'Pero mi querido señor, ' dijo el joven Perker...
...cuando un día después del juicio se encontró con el Sr. Pickwick,..
'Debió tratarse de algo muy grave...
'para que usted rehusara pagar los costes del juicio '
'Ni un penique, ' dijo el Sr. Pickwick, en tono decidido.
'Ni un penique. '
'¿Que criterio sigue el juez para determinar lo que ha de pagar...
'...el demandado?,'...
pregunto el Sr. Weller, al que encontró recogiendo la mesa del desayuno.
Y el Sr. Pickwick le preguntó...
'¿No le parece un asunto espinoso? '
'Ante las recomendaciones del Sr. Weller y por la confianza que le...
..merecía, el Sr. Pickwick decidió dejar el asunto en sus manos.
¡Anna!
¿Nadie puede ayudarme? ¿Es que no pueden ayudarme?
¡Ayúdenme!
¡No puedo más!
Dios, nuestro padre, con sus inescrutables designios...
...te ha llamado a su Seno...
...en al flor de tu juventud.
Pero antes te hizo llevar...
...una pesada cruz, de sufrimientos y calamidades.
Que has sabido llevar con entereza y sin protestar.
A cambio tus pecados te serán perdonados, por obra y gracia...
...de Nuestro Señor Jesucristo que nos redimió en la cruz.
Tu padre hallará consuelo en ti...
...pues el te precedió en el cielo.
Y desea que los ángeles borren de tu espíritu...
...todo el dolor que padeciste en este mundo.
Si es así,...
...que reuniste todo nuestro sufrimiento...
...en tu pobre cuerpo.
Si es así, que te liberaste de el...
...a través de la muerte.
Si es así, que te encuentres...
...con Dios en el mas allá.
...su mirada hacia ti.
Si es así, entonces puedes hablar con El...
... y hacerte entender por Él.
Si es así ruega ....
... a Dios por nosotros.
Si es así que puedes...
...comunicarte con El.
Agnes, querida, pequeña niña,..
...escucha lo que te digo..
...y ruega por los que nos quedamos...
...en este oscuro y sucio mundo,...
...bajo este oscuro y pesado cielo.
Ofrece tu carga de sufrimientos...
...a los pies del Señor,...
...y ruega que nos perdone.
Y nos libere de nuestras penas,...
...de nuestros padecimientos...
...y de nuestras profundas penas.
Pide le por nosotros, para que...
Agnes, tu que has sufrido...
...lo indecible y durante tanto tiempo...
...tienes que servir...
...para transmitir nuestros deseos.
Yo la confirmé de niña.
Tuvimos largas y profundas conversaciones.
Su fe era más grande que la mía.
Karin, ¿mañana vendrá a la sacristía?,...
para las formalidades del entierro.
Gracias.
Unos años antes, Karin acompañó a su marido Frederik...
...en su carrera diplomática.
En una ocasión...
...estuvieron algunos meses en la hacienda.
Anna, por favor, tráigame un poco mas de pescado.
- ¿Tu también quieres más? - No, gracias.
- ¿Por que sonríes? - No sonrío.
¿Quieres que vayamos luego al salón... a tomar café?
No quiero tomar café, gracias.
Es una lástima. Propongo que nos vayamos a dormir.
Mañana todo será distinto. Todo.
¡No me mires!
¡Te he dicho que no me mires de esa manera!
Perdóname.
Perdóname.
Ayúdame a desvestirme.
Puedes retirarte.
Todo está lleno de mentiras.
Todo es mentira.
- ¿Que haces? - Estoy revisando ...
...cartas antiguas y papeles de la hacienda.
Karin, quiero que seamos amigas.
Quiero que hablemos.
Al fin y al cabo somos hermanas.
Tenemos tantos recuerdos en común.
Karin, es triste que no nos toquemos...
...y seamos tan indiferentes.
Karin, ¿por qué no quieres ser mi amiga?
Hemos pasado tanto juntas,...
...que podríamos hablar y reírnos...
...juntas días y noches enteras.
¿Karin?
A veces me siento muy confusa....
...todo lo que me rodea me resulta extraño...
y familiar a la vez, me siento como en un sueño.
Tengo la sensación de que nada de lo que hago es real.
Me estoy comportando como una niña.
Tú has leído mucho mas que yo, has pensado mucho mas que yo...
...y podrías enseñarme tantas cosas.
Karin, ¿por que no aprovechamos estos días...
...para conocernos mejor,...
...y así poder estar mas cerca la una de la otra?
No soporto mas esta distancia y este silencio, Karin.
Karin, ¿he dicho algo que te haya podido molestar?
Es fácil decir algo inconveniente, pero no era mi intención. ¡Karin!
¡Karin!
¿Que lees?
- El diario de Agnes. - ¿Que dice?
"Jueves, 30 de Septiembre."
Escribió, "He recibido el mejor regalo...
...que un ser humano puede recibir:...
...amistad, confianza, apoyo,...
...calor humano, cariño, ternura.
Creo que se puede decir que es más que suficiente.
¡No me toques! ¡No te acerques!
Odio toda clase de contacto físico.
No quiero.
No me hagas esto.
No quiero que seas cariñosa conmigo.
¡No puedo! ¡No puedo!
Este continuo acoso es un infierno.
No puedo respirar.
Por lo que más quieras.
¡No!
¡Déjame en paz! ¡Déjame en paz!
No me toques.
No me toques.
No me toques.
No me toques. No me toques.
Estoy preocupada porque esta mañana perdí la compostura.
No comprendo como me pudo pasar.
Debió trastornarme la muerte de Agnes,...
...todo esto nos ha alterado.
Después del entierro, nuestro abogado se ocupará de todo.
¡Sírvanos ya!, por favor.
Lo más oportuno seria vender la hacienda.
Yo dividiría el patrimonio restante. El resto de las tierras...
...las cosas de la casa,...
...los cuadros, la biblioteca, creo que vamos a...
Por favor Anna, ¿le molestaría dejarnos solas?. Gracias.
¿Que crees que debemos hacer con Anna?
Yo le daría un pedazo de tierra...
...y renunciaría a sus servicios.
También darle alguna de las pertenencias de Agnes.
Fue tan abnegada con ella.
Estaban tan unidas.
Era una relación tan íntima que resultaba vergonzosa, creo que....
Es cierto.
Muchas veces...
He intentado quitarme la vida.
Lo se,...
Es repugnante.
Humillante.
Es inconcebible vivir así.
Te aseguro que Hendrick es un abogado excelente.
Mi esposo dice que soy muy torpe.
Tiene razón.
Yo soy así.
Tengo las manos demasiado grandes, ¿Comprendes?.
No me obedecen.
Y tu ahí sentada, leyendo tan calladita...
...como si esta conversación no fuera contigo.
¿Te das cuenta de cuánto odio?
¿Sabes que encuentro ridícula tu mirada enfermiza...
...y tu sonrisa vacía?
Y todo te lo callas, te lo callas...
Yo se quien eres tú
Tú, tus caricias y tus falsedades.
No se como se puede vivir con tanto odio como el que llevo dentro
Sin encontrar perdón, ni alivio, sin apoyo,...
...sin nada.
¿Lo ves? Nada me importa.
¿Te das cuenta?
Así de claro habla Karin.
Y tú ahí, impávida, con tu fría sonrisa.
¿En que estas pensando?
¿Me lo puedes decir?
¿Se puede saber cual es tu opinión?
¡No! Debí imaginármelo.
Prefieres callar.
¡Muy propio de ti, María!
¡María! Perdóname.
Quizá lo haces solo por mi bien.
Para conocerme mejor.
Querida María, perdóname.
¡Hablo demasiado! ¡Me comprendes!
No, tampoco eso es verdad.
María, mírame.
María, mírame.
¿No oyen? Alguien llora.
¿No oyen?
Alguien no para de llorar.
- ¿Me tienes miedo? - No, no me das miedo.
Estoy muerta, te das cuenta.
Pero no puedo dormirme.
No los puedo dejar.
Estoy tan cansada.
¿Es que nadie me puede ayudar?
- Es solo un sueño, Agnes. - No, no es un sueño.
Podrá ser un sueño para vosotras...
...pero no para mí.
Quiero que Karin venga.
Agnes quiere que Karin entre a verla.
Toma mis manos y dame calor.
Hazme un poco de compañía.
Siento un gran vacío a mi alrededor.
Esto esta más allá del entendimiento humano.
Yo estoy viva. No quiero involucrarme en tu muerte.
Quizás, si te amase...
...pero no te amo.
Lo que me pides es repugnante.
Me voy de viaje.
Dentro de unas horas habré partido.
- Anna. - ¿Si?
Quiero que venga María.
Agnes quiere que venga María.
No tengas miedo.
Acércate y tócame.
Háblame.
Toma mis manos y dame calor.
Eres mi hermana y no voy a dejarte sola.
¡Me das tanta pena!.
¿Te acuerdas cuando éramos pequeñas y...
...jugábamos juntas en la bañera?
¿Y que una vez, de repente, nos asustamos...
...y nos abrazamos?
Ahora es igual.
No oigo lo que dices.
Acércate un poco más.
Más cerca.
Toma mis manos.
Te voy a acompañar. Me voy a quedar aquí.
No temas.
Ya no tengan miedo. Yo me ocuparé de ella.
Debo pensar en mi hija.
Hay un hombre que me necesita.
Esto es una provocación, es repugnante; no tiene sentido.
Se estaba pudriendo.
¿Has visto las manchas que tiene en las manos?.
Me quedo con ella.
Al menos ha resultado un entierro tranquilo. Nadie lloró, ni se puso histérico.
Anna, ¿ha preparado ya el equipaje?
Si, está casi terminado.
Dése prisa. Vamos retrasados.
La música era bonita y el sermón fue breve. ¡Gracias a Dios!
Gracias al resfriado del Arzobispo, no tuvimos que asistir a esa comida.
A propósito, ¿que hacemos con Anna?
Perdone, pero no entiendo que quiere decir, Sr. Blom.
A si tenían pensado cederle alguna parcela y...
...en calidad de que se la dejaban.
Ni hablar del asunto.
Es joven y fuerte, y no ha pasado calamidades.
No es responsabilidad nuestra su futuro.
Pero yo le había prometido que se podía llevar algún recuerdo.
- ¿A su elección? - Claro que sí. Creo que tiene derecho.
Detesto esa clase de espontaneidad...
...pero lo dicho, dicho está.
Será mejor hablar con ella ahora mismo.
Se que es un asunto delicado...
...así que si quiere llevarse algún recuerdo de Agnes...
Gracias, no quiero nada.
Ahora está interpretando un papel que no le va para nada.
- Anna, se irá a finales de mes. - Si.
- Bien. - Bueno, ya esta aclarado el asunto.
Pongámonos en marcha antes de que la nieve bloquee el camino.
Adiós, Anna. Gracias.
Gracias.
Gracias por todo este tiempo.
Vamos.
- ¿Puedo decirte algo? - Si, claro.
¿Recuerdas lo que hablamos aquella tarde?,...
...cuando nos sinceramos.
Estaría loca si no lo recordara.
¿Crees que podríamos realizar nuestros deseos?
¿Por que no habría de ser así?
No se.
Ahora todo me parece tan diferente.
A mí me parece que ahora estamos mucho más cerca la una de la otra.
¿Que estás pensando?
Sobre lo que estamos hablando...
- Eso no es cierto.
En realidad estaba pensando en que no puedo pensar libremente,...
...no se como tú me exiges que piense como tú crees que debo pensar.
¿Eso es lo que tu quieres?
- No, no quiero nada. - No.
Pues si no quieres nada,...
...no te molestara que te diga adiós.
Has formado parte de mi vida. ¿Lo recuerdas?
No puedo recordar tantas tonterías...
...y no te lo quiero poner más difícil.
Querida Karin, ante todo cuídate mucho.
Y nos veremos en Fin de Año, como de costumbre.
¡Que lástima!.
Miércoles, 3 de Septiembre.
Hace frío como todos los otoños,...
pero a pesar de todo es delicado y bello
Mis hermanas, Karin y María, han venido a visitarme.
Es estupendo volver a estar las tres juntas...
...como en los viejos tiempos.
Me encuentro mucho mejor y hasta he podido salir de paseo con ellas.
Para mí ha sido maravilloso,...
...pues hacía tiempo que no salía.
Empezamos a reírnos y a correr hacia el balancín...
...como en la niñez.
Y nos sentamos en él como tres niñas buenas.
Anna nos columpiaba lenta y cuidadosamente.
Todos mis pesares enseguida desaparecieron.
Lo que mas quería en el mundo estaba allí.
Hasta podía oír la voz de mamá.
Sentía la proximidad de sus cuerpos...
...y el calor de sus manos.
Quise retener ese momento y pensé:...
...que aquello era la felicidad...
...y que no había nada mejor.
Ahora, por unos minutos...
...percibo una sensación de totalidad, me siento llena.
Y doy gracias a la vida por haberme dado tanto.