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Trascender todo lo que existe en esta tierra y, hablando materialistamente,
la búsqueda espiritual, el logro espiritual, la iluminación espiritual, el poder espiritual,
se considera una de las cosas más altas y grandes que pueda lograr la humanidad.
Es verdad. La iluminación es lo más alto que se puede alcanzar,
más que ser presidente, más que ser millonario,
más que ser lo que sea, un gran poeta, un gran escritor, lo que sea.
El logro espiritual se contempla como lo más alto de todo,
lo más grande que se pueda comprender, y ser capaz de convertirse en una persona poderosa,
con una personalidad sabia y una sabiduría sabia y demás. Todos lo sabemos y lo reconocemos.
Pero al mismo tiempo nos da muchos problemas.
Así que para presentar de forma adecuada la enseñanza de la espiritualidad
hay que comprender bien la cordura básica.
Y también hay que comprender bien el materialismo básico, espiritualmente.
Hemos acuñado esta expresión: "materialismo espiritual".
Materialismo espiritual. Quizás signifique algo para vosotros.
El materialista espiritual, como si relacionar los términos de espiritualidad y egoísmo
sirviera para convertirse en una persona mejor. En una persona sabia.
Eso resulta muy peligroso y problemático. Y no sólo te destruirá
sino que podría destruir toda la sabiduría de la humanidad. Y de hecho, es satanismo.
Así que debemos reflexionar cuidadosamente sobre esa preocupación concreta.
Hay que debatir esa situación concreta muy clara y abiertamente unos con otros.
E intentar comprender lo que significa.
Así que espero dedicar una parte del curso, la primera etapa,
para que se entienda el significado de materialismo espiritual.
Por supuesto, lo intelectualizamos y lo podríamos identificar también con nosotros mismos.
Pero me da la impresión que, hagamos lo que hagamos, están abiertas las dos posibilidades.
No deberíamos engañarnos
diciendo que aquí sólo podemos salirnos de la senda.
Ahora que estamos embarcado en el avión del Instituto Naropa, vamos a poner en marcha el motor y volar.
Vamos a convertirnos en una línea aérea cósmica trascendental.
Vamos a ser todos pasajeros.
Vamos a volar por el sol, la luna y el universo. Es fácil decirlo.
Fácil decirlo pero no muy difícil de hacer porque todo el mundo está sentado en la tierra,
en el suelo. Nadie puede levantarse un centímetro del suelo,
físisamente y espiritualmente, si preferís. Nada en absoluto.
Quizás uno piense que lo está haciendo psicológicamente. Pero entonces es otro materialismo espiritual.
Lamento ser tan... ordinario y corriente.
Pero creo que este enfoque concreto es absolutamente necesario,
para construir este recorrido concreto que nos despegará de la tierra.
Antes de hacerlo, hay que entender quiénes somos.
Si uno quiere volar en avión, no puede solamente volar. Hay que ganar dinero,
y pensar cuánto cuesta comprar un billete. Y eso no basta.
Luego hay que ir al aeropuerto, hay que comprar el billete,
hay que saber el número del vuelo y en qué línea aérea concreta se va a volar.
Y luego hay que caminar y encontrar la puerta de embarque.
Y luego hay que embarcarse en el avión, apagar el cigarrillo,
hay que caminar, entregar el equipaje.
Y luego hay que saber en qué asiento hay que sentarse.
Y luego hay que ponerse el cinturón, colocar la mesa vertical y enderezar el respaldo del asiento.
Hay que pasar por todo ese proceso.
En caso contrario no se puede realizar bien el viaje, como se dice.
Respecto a la cuestión del materialismo espiritual, esa tarea centrada en uno mismo,
que se dedica a perseguir un yo, un ego, para convertirse en una persona más grande y poderosa.
Y así sse usan los mantras, los cantos, la meditación de todo tipo, pensando que uno se convertirá
en una persona más grande, una personalidad más grande, un individuo más grande que puede recorrer la senda.
Por otro lado, uno puede pasar de todo y sólo recitar hermosamente los mantras.
Ignorarlo todo y no preocuparse del ego ni nada más,
como si uno no hubiera oido hablar de tal cosa.
Se puede hacer pero sigue siendo materialismo espiritual porque uno se está engañando a sí mismo.
Eso es un problema enorme.
Asi que esta noche me gustaría presentar la idea básica
de lo que significa materialismo espiritual
desde el punto de vista relacionado con el ego.
Que uno quiere conseguir cierto resultado concreto, causa y efecto,
porque se consigue lo que se quiere al practicar de cierta forma. Y luego se puede usar.
Como si alguien le diera un rifle automático a un niño de tres años
que entonces pueda realmente juegar a indios y vaqueros
y se pusiera a disparar por todos lados.
Realmente se pueden oir los disparos y se pueden valorar.
"Vaya, es fantástico, realmente puedo disparar.
Ya no tenego que imaginarlo con la televisión, me puedo convertir en vaquero".
Quizás hemos visto demasiada televisión en todo el país
y se nos ocurren estas ideas, como si no supiéramos dónde está la responsabilidad.
O dónde está el juego, de dónde parten las mentiras.
Eso se ha convertido en un problema tremendo. Y podemos sentarnos aquí y decir que, ahora,
si nos sentamos durante tres minutos y decimos cierta palabra concreta,
al decirlo vamos a alcanzar la iluminación.
Eso es una patraña, es irracional,
socava la dignidad humana que poseen los seres humanos. Se supone que poseemos
algún tipo de inteligencia al desarrollar alguna actitud crítica
hacia lo que hacemos. Y se supone que debemos verlo.
Así que ése es el aspecto básico en el que el materialismo espiritual puede cortar,
por la propia ironía auto-existente, la actitud crítica, para cortar ese tipo de mentira.
Y ahí reside la función de la iluminación.
Que uno no se engaña así, uno no puedo enfrentarse a esos retos
ni tragárselo todo y ser cobarde. Así que ahí están las posibilidades
De lo contraio no tendría ningún sentido hablar de iluminación.
Y no deberíamos confiar más en el ordenador porque todo es mecánico.
Pero como todo no es mecánico, todo consiste en experiencias.
Por consiguiente hay una posibilidad grande de luchar contra el materialismo espiritual
que se puede aplicar bien y es un aspecto importante que quería señalar.
Ésa es la clave: que hay una actitud cínica en todos nosotros,
que uno se pregunta : "¿debo entrar en mi actitud cínica
o debo ceder? Quizás tenga que hacerlo todo".
En este momento es absolutamente necesario comprender la espiritualidad básica,
seguir con la actitud cínica, cuestionarlo todo
no de forma necesariamente intelectual, lógica y metafísica sino por la experiencia.
Es extremadamente importante seguir este enfoque concreto.
Así que es el primer paso.
Igual que, aquí, el primer paso de los estudiantes es cómo afilar el intelecto.