Tip:
Highlight text to annotate it
X
Hola,
mi nombre es Klaus Stoll.
He colaborado mucho tiempo con la Orquesta Filarmónica de Berlín.
En total, he pasado 43 años, y la considero mi hogar musical.
Este sentimiento de apego
está ligado a muchas interpretaciones de la Sinfonía n.º 5 de Ludwig van Beethoven.
Esta sinfonía es especialmente destacada a la hora de tocar el contrabajo.
Hay dos pasajes importantes que suponen un reto para la técnica del contrabajo
y que experimentaron un gran desarrollo en la época de Beethoven.
El primer tema es el scherzo. 0:01:01.120,0:01:04.4400:01:04.440,0:01:20.320 ♪ (tocando)
Suena muy moderado,
muy bajo;
sin embargo, Beethoven había escrito pianissimo.
En un segundo,
y esa es la parte difícil del pasaje,
en un segundo,
tengo que tocar legato en cuatro cuerdas diferentes
y tengo que hacerlo en pianissimo. Esto es muy complicado,
especialmente por el arco de contrabajo y porque las cuerdas son muy gruesas.
♪ (tocando)
Ahora, voy a pasar al compás 27.
♪ (tocando)
Con estos sonidos bruscos,
♪ (tocando)
solo estoy apoyando la parte del tema de los instrumentos de viento.
Esto significa que tengo que ser muy flexible al tocar aquí
♪ (tocando)
porque estoy acompañando la parte del tema,
pero debe sonar misterioso,
muy, muy tenebroso.
Esta fue una de las facetas reales
en el ámbito emocional que Beethoven produjo con su música.
Voy a repetirlo desde el principio.
♪ (tocando)
Aquí surge una pregunta:
Muchos contrabajistas intentan tocar este pasaje arco arriba,
porque es fácil tocar pianissimo en esta parte.
♪ (tocando)
No obstante, no están en lo cierto.
Hay que subir con el brazo entero y hacer palanca.
Esto significa que, desde el punto de vista de la física, es mucho mejor
si puedo sencillamente girar el arco,
vertical u horizontalmente,
simplemente completar un giro.
Es muy importante contar también durante la audición * pam pam pam pam pam *.
El tempo debe ser correcto;
♪ (tocando)
a continuación, sigo contando.
♪ (tocando)
Es lo que se podría decir sobre el scherzo con respecto a lo que se debe conseguir.
Tengo que girar el arco hacia un lado
para que solo algunas de las cerdas del arco toquen la cuerda
y se produzca así un sonido suave y bajo.
Tiene que ser como una sombra;
una sombra en do menor.
Va seguido del trío en do mayor.
Esto significa que el trío representa un importante reto para los contrabajistas
al tocar una danza, el tema de una danza.
En nuestro mundo,
el del contrabajo, no es frecuente interpretar pasajes temáticos.
No obstante, este es un ejemplo significativo
de que estamos tocando un tema en do mayor,
que se supone que debe representar una gran danza circular.
♪ (tocando)
¿Qué ocurre aquí?
He disminuido la intensidad hasta el piano y hasta el pianissimo.
Tengo que expresar algo musicalmente
que, en términos visuales, significa
que el grupo de bailarines se va.
Cuando los bailarines se van, no bailan más despacio.
Solo están saliendo de esta imagen musical,
la salida es lo que tengo que probar
y representar como una imagen a través de una gran variación dinámica.
♪ (tocando)
Aquí he tenido que reflejar
a un grupo de bailarines saliendo de la escena.
¿Qué debo hacer?
Tengo que ser sofisticado en cuanto al tratamiento del arco.
Puesto que estoy tocando aquí,
dado el diseño del arco,
el golpe es muy intenso.
♪ (tocando)
Se ejerce mucha fuerza en las cuerdas
y la presión que resulta es muy intensa.
Si quiero reducir esa intensidad
para conseguir una dinámica menor,
debo utilizar menos arco,
y por la forma cóncava del arco se puede saber
exactamente dónde está el centro para poder controlarlo lo mejor posible.
Si quiero tocar más suave ahora,
debo girar el arco hacia un lado.
Ahora, ya no estoy tocando con 140 cerdas sino quizás con 10 ó 20.
Esto significa que no estoy tocando este sonido,
sino que estoy girando el arco
hacia un punto más ligero.
♪ (tocando)
Puedo mantener el tempo,
mientras que todo lo demás, la dinámica y la articulación están cambiando.
Esto es lo que Beethoven tenía en mente:
♪ (tocando)
y, a continuación,
♪ (tocando)
el arco está danzando suavemente.
Creo que esta es la fórmula que debemos emplear y, si la utilizamos,
no solo con Beethoven,
haremos un gran descubrimiento en cuanto a posibilidades físicas,
que incrementarán nuestras posibilidades musicales significativamente.
Junto con mi despedida
y también mi enhorabuena por tu participación en la audición, me gustaría
decirte una frase acuñada por Ray Brown:
"No dejes de practicar
hasta que suene mejor". 0:09:34.760,0:09:36.8000:09:36.800,0:09:38.000 ¡Muchas gracias!