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Francois D'haene es uno de los mejores ultra-trail runners en el mundo.
Él es también enólogo en la región de Beaujolais de Francia.
"El reconocimiento nace del esfuerzo" - Desconocido
Cuando te colocas en la línea de salida de una carrera no lo haces porque te apetezca correr ese día,
sino porque es algo que llevas preparando durante mucho tiempo.
El entrenamiento es un placer gradual,
hay partes que disfrutas más y otras menos.
Con el viñedo pasa lo mismo.
Todavía constituye una parte importante de mi vida,
pero cuando cogimos el viñedo no pensamos en cómo encajaría en nuestra vida,
sino en adaptarlo de la mejor manera posible.
Carline y yo buscábamos algo que pudiéramos hacer juntos.
Queríamos trabajar al aire libre en un proyecto que fuera nuestro.
Queríamos crear algo juntos.
Sabíamos que sería muy duro, pero quizá fuera eso lo que nos motivó.
Era una actividad diferente que tenía muchas posibilidades de fracasar.
Sabíamos que sería difícil montarlo y gestionarlo todo.
Sabíamos que cada día sería distinto, que cada año sería distinto.
Y no teníamos ni idea de si tendríamos éxito o no,
de si funcionaría o no.
Esto es lo que realmente te motiva a continuar.
Te motiva plantearte nuevos logros cada día.
Lo mejor es que todo cambia, no hay nada permanente de un año a otro.
Nunca consigues los mismos resultados, siempre son diferentes,
por mucho que sigas el manual al pie de la letra.
En el colegio se aprende mucho,
pero con la práctica más.
Tienes que cuestionarte a ti mismo año tras año.
En este trabajo aprendes algo cada día, cada año.
Es magnífico.
Tienes que pensar en las decisiones tomadas, como al finalizar una carrera.
Tienes que evolucionar y cuestionarte a ti mismo cada año.
Nos hemos adaptado bien.
El hecho de trabajar al aire libre, de pasar mucho tiempo en las viñas,
significa que he cambiado mi forma de entrenar y, probablemente, mi manera de ver las cosas.
Siempre he necesitado estar conectado con las montañas.
Estar allá arriba. En la nieve, explorando.
Si no voy, no me siento bien. Es así.
Yo creo que estar en las montañas,
ser una persona de montaña,
te permite desarrollar una capacidad increíble para ir más allá de tus límites.
Creo que es algo importante y quizá por eso la gente de montaña suele formar piña.
Te hace fuerte.
Lo mejor es que puedes reproducir estas cualidades en la vida diaria.
Creo que ambos mundos se basan en disfrutar y compartir un placer.
Para mí son la misma cosa
y esto me motiva a ir más allá y a aprender siempre más.