Tip:
Highlight text to annotate it
X
Soy un vaquero,
un vaquero profesional.
Voy a rodeos para ganarme la vida.
Yo no tengo un trabajo que digamos, de verdad.
De niño, simplemente me gustaba todo lo que los vaqueros representaban.
El códigos de vaquero, los modales, la ética, simplemente respetan.
Entre mas cemento ponen alrededor de nosotros, y menos pasto, lo mas que ser un
vaquero significa para mí.
No tenía idea de que seria 11 veces campeón del mundo de la Asociación de Vaqueros de Rodeo Profesionales.
Esperan que gane cuando yo participo.
Y hay mucha más presión en mí ahora que he tenido éxito para
ganar, para seguir ganando.
Y yo simplemente no puede perder el contacto con la razón primordial porque lo hago.
Para poder utilizar los talentos que Dios me ha dado para llegar a la gente y dejarles
saber que hay vaqueros que aman al Señor.
Recuerdo cuando comencé en ese entonces
Era difícil.
Yo no estaba seguro si eso era lo que Dios me había llamado hacer.
Sabía que había tenido éxito en las rondas de junior, en las rondas universitarias.
Y cuando me fui a los profesionales, fueron un par de años difíciles.
Había luchado mucho con eso, si esto es realmente lo que debería estar haciendo
Porque tú mismo pagas por todo aquí.
Y se me estaban acabando mis fondos.
Pero las cosas empezaron a tomar su lugar.
Es mucho más fácil para mí, el saber que es Dios porque siento que hay
muchachos que son físicamente más calificados que yo, para a hacer lo que hago.
Donde yo soy débil, Él es fuerte.
Y eso aplica a todas las cosas.
Dios nos ama tanto.
Él solo quiere que tengamos una relación personal con Él.
Él busca eso diariamente, un te amo, y simplemente un corazón agradecido
venir a Él con acción de gracias.
Me he dado cuenta de eso mucho más ahora que tengo un niño de dos años.
Nada me hace más feliz.
Y cuando él viene a mí, y me abraza, y me dice que me ama, creo que
Dios es igual.
Por eso estamos aquí, para su propósito, y para su voluntad, y
para dar gracias en todas las cosas.
Yo no sirvo a Dios por el éxito.
Sirvo a Dios porque Él dio a su Hijo para que yo tuviera vida eterna con
Él en el cielo.
Al final del día, eso es todo lo que importa, el saber que tus amigos
y tu familia, y tu, van ha estar en el cielo porque Jesús
hizo ese sacrificio.
Y todo lo que tenemos que hacer es creer.
la parte difícil ya fue cumplida.
Mi nombre es Trevor Brazile y Yo Soy Segundo.