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En la temporada uno de The Story of Stuff miramos un sistema que crea demasiadas cosas
y muy poco de aquello que realmente deseamos.
Ahora comenzaremos a ver las historias detrás de la historia de las cosas.
De este modo, comenzaremos a encontrar formas de dar vuelta esta situación.
Vienvenidos a la segunda temporada.
Desde que aprendí de dónde vienen en realidad nuestras cosas -- y cómo este sistema
está destrozando a la gente y al planeta -- Estuve intentando imaginar cómo podemos.
cambiarlo. He leído muchísimo sobre esto: 100
Maneras de Salvar el Planeta sin Dejar tu Casa,
50 Cosas Simples que Puedes Hacer para Salvar la Tierra,
El Librito Verde para Hacer las Compras. Pensé que podrían tener las
respuestas, pero todos sus consejos comenzaban
por comprar cosas mejores,
y terminaban -- por reciclar todas esas cosas cuando hubiera terminado con ellas.
Pero cuando se trata de hacer un cambio, este cuento de "hacerce verde" -- incluso cuando
lo vemos en todas partes -
tiene algunas serias deficiencias.
Dice que si me vuelvo un comprador más inteligente,
y le digo a mis amigos que hagan lo mismo,
he cumplido con mi parte.
Y si no compro todas estas cosas verdes,
entonces es mi culpa que el planeta esté siendo destruído.
Esperen un momento. ¿Mi culpa?
Yo no elegí poner productos tóxicos en las estanterías ni permitir el trabajo esclavo en
fábricas a lo largo del mundo.
No elegí llenar las tiendas con electrónicos que no pueden ser reparados
y deben ser desechados. ¡Yo no elegí un mundo en el que algunas personas pueden
afrontar el « vivir verde », dejando al resto de nosotros como irresponsables destructores
del planeta! Claro que cuando compramos deberíamos elegir los productos menos tóxicos y más
justos que podamos,
pero aquí no son los malos compradores la fuente del problema, lo son
las malas políticas y las malas prácticas comerciales.
Y es por ello que las soluciones que realmente necesitamos no están a la venta en el supermercado.
Si en realidad queremos cambiar el mundo,
no podemos hablar de consumidores votando con nuestros dólares.
El cambio real ocurre cuando los ciudadanos se juntan para reclamar normas que funcionen.
Mira, es importante intentar « vivir verde ».
Como dijo Gandhi, "sé el cambio".
Vivir nuestros valores en pequeña escala nos muestra a nosotros y a los demás que nos importa.
De modo que es un muy buen punto para comenzar.
Pero es un muy mal lugar para detenerse. Después de todo, ¿sabríamos quién fue Gandhi
si él sólo hubiera tejido sus ropas y se hubiera quedado sentado esperando que los británicos
abandonaran la India?
¿Entonces cómo hacemos un gran cambio?
Para responder a esta pregunta,
fui hacia atrás y observé a Gandhi,
el movimiento anti-apartheid en Sudáfrica, el movimiento norteamericano por los derechos civiles,
y los triunfos medioambientales, aquí, en los 70´.
No sólo insistieron a la gente para que mejoraran sus decisiones cotidianas.
Ellos cambiaron las reglas del juego.
Resulta que hay tres cosas que encontramos cuando la gente se junta
y realmente cambia el mundo.
Primero, comparten una gran idea sobre cómo las cosas podrían ser mejor.
No sólo un poco mejor para unas pocas personas,
sino mucho mejor para todos.
Y no se quedan experimentando con superficialidades;
van directo al corazón del problema, incluso cuando significa cambiar
sistemas que no quieren ser cambiados.
¡Y esto puede dar escalofríos!
Hey, millones de nosotros ya compartimos una gran idea sobre cómo las cosas pueden ser mejores.
En lugar de esta economía dinosaurio que se centra sólo en las ganancias corporativas -
queremos una nueva economía que ponga productos seguros,
gente feliz, y un planeta sano en primer lugar.
Bah, ¿No es para ello que debería ser la economía?
Intentar vivir en forma perfectamente ecológica en el sistema actual, es como intentar nadar contra la corriente,
cuando la corriente nos está empujando a todos en el sentido opuesto.
Pero cambiando lo que nuestra economía prioriza,
podemos cambiar la corriente, de modo que lo correcto se convierta en
lo más fácil de hacer.
Segundo, los millones de personas ordinarias que hicieron estos cambios extraordinarios
no intentaron hacerlo solos.
No sólo dijeron, "seré más responsable." Ellos dijeron, "vamos a trabajar
juntos hasta que el problema esté resuelto."
Hoy es más fácil que nunca trabajar en conjunto.
¿Puedes imaginar lo difícil que era hacer que un mensaje cruzara la India en 1930?
Ahora podemos hacerlo en menos de un segundo.
Y finalmente, estos movimientos lograron generar el cambio porque tomaron
su gran idea,
y su compromiso de actuar juntos,
y después pasaron a la acción!
¿Sabías que cuando Martin Luther King junior organizó su manifestación en
Washington,
lo seguían menos de un cuarto de los estadounidenses?
Pero eso bastó para generar cambio - porque aquellos seguidores pasaron a la acción-
hicieron cosas.
Hoy 74% de los estadounidenses apoyan leyes más duras contra los químicos tóxicos.
83% quieren leyes de energía limpia. 85% piensan que las corporaciones deberían tener
menos influencia en el gobierno.
Tenemos la gran idea y el compromiso. Sólo que aún no lo
hemos transformado en acción masiva.
Y esto es lo único que nos falta.
Así que hagámoslo.
Provocar un cambio real necesita de toda clase de ciudadanos -
no solo manifestantes.
Cuando te das cuenta de en qué eres bueno y qué te gusta hacer,
encajar no parece tan difícil.
Sea lo que sea que tengas para ofrecer, un futuro mejor lo necesita.
Así que pregúntate,
"¿Qué tipo de agente de cambio soy?"
Necesitamos investigadores,
comunicadores,
constructores,
resistentes,
educadores,
y organizadores.
En StoryofStuff.org,
puedes explorar estos tipos de agente de cambio y encontrar tu primer,
o tu próximo, paso para entrar en acción.
Ser un ciudadano comprometido empieza por votar.
Esa es una de las cosas básicas que cada uno debe hacer.
Pero se pone mucho más exitante -- y divertido - cuando ponemos nuestras habilidades únicas
e intereses a trabajar junto a miles de otros.
Sé que cambiar un sistema económico entero es un desafío gigantesco.
No es fácil ver con claridad el camino desde donde estamos hoy hasta donde debemos
llegar.
¡Y no hay diez cosas simples que podamos hacer sin dejar nuestros sofás!
Pero al comienzo el camino tampoco era claro para todos estos otros hombres.
El doctor King dijo, "La Fe
está subiendo el primer escalón, aunque tú no veas la escalera entera."
De modo que, trabajaron duro para estar organizados,
realizaron pequeños actos que formaron sus músculos ciudadanos
y se mantuvieron centrados en su gran idea -
y cuando llegó el momento justo, estaban preparados.
Es el momento para que nos preparemos también -
prepararnos para realizar el cambio y escribir el próximo capítulo
en la historia de las cosas.