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Cuando veo un accidente, una muerte...
Hace muy poco, hubo un accidente de dos camiones.
Chocaron.
Chocaron de frente.
Se prendieron fuego. Murieron los dos choferes.
Entonces uno va pensando: "Pude haber sido yo.
O tendré ese destino.
O sigo teniendo la prudencia de mis años manejando".
MANUEL MANRIQUE CAMIONERO, CHILE
Te voy a decir cómo es el camino de Los Caracoles.
Vienes en camino recto.
Empiezas a subir...
La primera, la segunda curva... Esta es peligrosa.
Eso lo tengo grabado y conozco todas las curvas
porque desde el año 78 vengo para acá,
y estamos en el 2015, y conozco muy bien el camino.
Aquí comenzamos la curva 0 de Los Caracoles.
¿Cierto?
Comenzamos a subir.
Vamos a subir a 3 200 m de altura.
Hay que tener mucha precaución, mucha prudencia.
Ustedes mismos ven acá.
Eso es imprudencia.
Antes de llegar a una curva los camiones se adelantan.
Así es como ocurren muchos accidentes.
Subes cómodo, el camión tiene mucha fuerza
y sabes que vas cómodo, seguro,
a comparación de otros camiones antiguos.
Yo ando con un tráiler frigorífico.
Cargo fruta, que cargamos en Chile,
o cargamos bananas que vienen de Ecuador,
y los camiones son prácticamente nuestra casa.
Hasta que volvemos a nuestra casa paterna.
Otra imprudencia. Ustedes lo están viendo.
No debe hacer eso.
Ahí viene un camión con problemas.
Humo en los frenos. Frenó mucho y larga humo.
Más despacito.
En esta carretera, todos los años...
mueren personas.
Yo calculo, cada tres o cuatro meses, mueren dos o tres personas.
En el año, mueren siete u ocho personas,
en esta carretera.
Tanto en Los Caracoles como acá.
Se confían mucho de los camiones.
Se confían de sus máquinas nuevas.
Le voy a decir algo que me dijo mi padre:
"La cordillera de los Andes siempre va a existir.
Nunca aspires pasarla por encima...
porque no vas a poder.
La cordillera siempre va a estar en el mismo lugar.
Tú te matas".
Con eso terminó.
Es triste y, bueno, ya está.
Me acordé más por los colegas, por los hermanos que están ahí.
Los camiones los llevo en el corazón porque...
este es el oficio que me enseñó mi padre.
No te puedo decir nada más.