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Estamos aquí afuera sólo para mostraros la reactividad de esta bonita cosa de aquí,
oxígeno líquido. Podéis ver, el maravilloso oxígeno líquido, tiene un bonito color azul.
Encima de la mesa, tenemos una bandeja de estaño que usaremos para contener el
experimento que os mostraré a continuación. Así que tenemos nuestro oxígeno liquido favorito allí,
muy oxidante, muy reactivo, y aquí tengo lana de algodón. Esto es lo mismo que usamos
para quitarnos el maquillaje o quizás nuestras parejas, novias o esposas, y es el mismo
que usamos para limpiar el trasero de los bebés. -El oxígeno es un elemento interesante,
porque existe en dos formas. La forma que acabamos de ver que es la que respiramos todo el tiempo
que es el O2, 2 átomos de oxígeno unidos. Y hay otra forma llamada Ozono
que son 3 átomos de oxígeno ordenados en forma de V, o la letra V, así hacia arriba.
-El oxígeno tiene electrones desapareados en la orbita molecular atómica, que está alrededor
de la estructura, y estos electrones desapareados le dan color, que es azul.
El azul es a menudo percibido como el color de los electrones solvatados o despareados.
Y podéis ver aquí el bello color azul. Muchos químicos se asustan cuando ven
el oxígeno liquido azul, porque el oxígeno liquido es muy reactivo.
Generalmente sólo haces oxígeno liquido por error. No como hoy que lo haremos a propósito
Y si lo hicisteis sin querer, de forma no controlada, en un sitio donde puede haber moléculas orgánicas,
quizás compuestos químicos orgánicos simples como hidrocarburos, grasa o quizás conjuntos
altamente elaborados, tienden a detonar y tienden a causar experimentos de mucha energía.
Bueno aquí está, es muy suave, no muy reactivo, no se quema realmente, se chamusca, arde sin llama,
aquí vamos. Vamos a ponerlo en la bandeja, y vamos a rellenar los espacios vacíos,
todo el espacio entre las partículas de algodón con oxígeno. Así que mejor os alejáis un poco
Brady, allá vamos. Aquí esta nuestro oxígeno líquido.
¿Quieres acercarte y hacer un zoom para verme? -Lo tengo con buen zoom.
-OK. Aquí pueden ver el lindo oxígeno liquido azul, siendo absorbido por las partículas del algodón.
Aquí tenemos un fósforo en un palo. Y creo que probablemente veais su luz.
Tenemos fuego, tenemos oxígeno y tenemos combustible
y veamos que pasa si los ponemos juntos. ¿Listos? ¿OK?
-Guau… ¡Y ahí arde!
-Y el Ozono es mucho más reactivo que el oxígeno. Cerca de la superficie de la tierra,
donde vosotros y yo estamos en este momento, el ozono es muy peligroso, porque si lo respiráis
puede comenzar a reaccionar con cualquier tipo de molécula que tenga un enlace de carbono
Pero en la atmósfera superior, el ozono es muy importante porque absorbe la luz ultravioleta
que viene del sol, e impide que la luz ultravioleta ataque las moléculas de las especies biológicas
de la superficie. Si no fuera por el ozono en la atmósfera superior, todos estaríamos,
si no muertos, ciertamente bastante menos cómodos de lo que estamos ahora.
Neil está conectando una pieza de ese tubo al cilindro de oxígeno y va a llenar este frasco
de gas con oxígeno y haremos un experimento realmente clásico. El que todos aprendemos
en el colegio. Una prueba para el oxígeno que es reencender una astilla
Tenemos un frasco tradicional de gas lleno de oxígeno. Aquí podéis ver la astilla ardiendo.
Esta es la madera quemándose en exceso de oxígeno a nuestro alrededor. ¿OK? Lo que haremos ahora
es apagar la astilla, veis que está brillando, si soplo sobre la astilla podéis ver que brilla.
Ahora intentaremos reencenderla poniéndola en una atmósfera rica en oxígeno.
Nos movemos al frasco, y ponemos la astilla. Y podéis ver que la llama revive.
la llama vuelve a la vida. Esta es la prueba que todos aprendemos sobre un ambiente rico en oxígeno.
-¿Qué paso? ¿Por qué ocurre eso? -Bueno, el incremento, la concentración
de oxígeno en el interior, reencendió y reinicio la oxidación de la madera o del quemado de la
madera. Lo haré de nuevo. Allí vamos. Llamas de nuevo. –Genial.