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El Gobierno presentaba el pasado mes de diciembre el anteproyecto de Ley de Dependencia, con
el que se pretende atender a todas aquellas personas que no pueden valerse por sí mismas,
pero ¿quiénes van a poder acogerse a esta futura ley?, ¿deberán pagar los usuarios
una parte de los servicios que reciban?, ¿en qué consiste la figura del cuidador familiar?
Comienza "Enfoque". (Música)
En la actualidad muchas familias asumen el cuidado de las personas dependientes, sobre todo las mujeres. "Yoduermo, que no me pesa y lo haré toda mi
vida, en una cama de 80 a los pies de ellos, y me levanto 3 ó 4 veces, cuando lo necesitan".
El Ministro de Trabajo y Asuntos Sociales acaba de anunciar el compromiso económico
del Ejecutivo: "El Gobierno aportará más de 12.638 millones de euros para poner en
marcha el Sistema Nacional de Atención a la Dependencia entre los años 2007 y 2015".
Personas mayores, enfermos con alzhéimer, paralíticos... esperaban hace mucho tiempo
la futura ley. "Esto yo creo que se tiene que hacer cargo el Estado, que nos tiene que
dar a nosotros los medios para contratar gente que lo haga y para poder, pues, tener una
vida como la de cualquier otra persona normal". Muy buenas noches, bienvenidos a "Enfoque".
Una persona dependiente es aquélla que no puede vivir de manera autónoma, aquélla
que necesita continuamente ayuda para poder levantarse de la cama, lavarse, vestirse o
comer. En España hay más de un millón de personas que necesitan cada día que alguien
les eche una o muchas manos para realizar cualquier actividad cotidiana. Hace unos días
el Gobierno presentaba el anteproyecto de Ley de Promoción de la Autonomía Personal
y atención a personas en situación de dependencia, una ley más conocida como "Ley de Dependencia",
que garantiza atención y cuidados a las personas dependientes, ancianos y discapacitados, y
también a sus familias. Va a ser a partir del 2007, y en su financiación participarán
el Estado, las autonomías y los propios usuarios. Pues bien, para hablar de este proyecto de
ley nos acompañan esta noche Amparo Valcarce, Secretaria de Estado de Servicios Sociales,
Familia y Discapacidad. Muy buenas noches, bienvenida. - Buenas noches. - También está
con nosotros Ana Botella, Concejala de Empleo y Servicios al Ciudadano del Ayuntamiento
de Madrid. Muy buenas noches. - Muy buenas noches. - Luis Martín Pindado, que es Vicepresidente
del Consejo Estatal de Mayores. Bienvenido. - Gracias, buenas noches. - Javier Romañach,
miembro del Foro de Vida Independiente. Muy buenas noches. - Buenas noches, Pedro. - Isabel
Gemio, periodista y madre de un niño que padece distrofia muscular. Bienvenida, Isabel,
y para todos aquellos que no lo sepan, ¿qué es eso de la distrofia muscular, aunque sea
brevemente? - Es una enfermedad de origen hereditario que transmite la madre, la mayoría
de los casos al hijo varón. Se basa en que es desde la niñez, muy pronto se puede observar.
Se va debilitando... Se van debilitando los músculos y terminan prácticamente sin ninguna
fuerza muscular. - En cualquier caso, vamos a decir que Isabel Gemio no está aquí para
contar exclusivamente su caso, sino porque esa experiencia le ha servido también para
conocer a muchas personas que sufren este tipo de problemas y por eso estás aquí.
- Muchas más de las que imaginamos. - Muchas más. Gracias por estar aquí. Bienvenida.
Y Loles Díaz Aledo, que es periodista también y directora del programa dirigido a los mayores
de Radio Nacional de España "El club de la vida". Muy buenas noches. - Buenas noches.
- Desde que la semana pasada anunciábamos este asunto hemos recibido numerosas llamadas
de asociaciones afectadas pidiendo su asistencia a este programa. Es imposible que todas puedan
estar aquí, en directo, pero esperamos que se sientan representadas por los invitados
que hoy nos acompañan. En cualquier caso, si lo desean, les recuerdo nuestro correo
electrónico (enfoque@rtve.es) para que participen desde sus casas en este debate; en los minutos
finales escucharemos algunas de sus reflexiones o de las preguntas que tengan que hacer. En
cualquier caso, ahora sí que les voy a pedir en primer lugar a nuestros invitados una breve
valoración de este anteproyecto presentado por el Gobierno. Amparo Valcarce, adelante.
- Gracias. Efectivamente, el Gobierno se ha comprometido a algo tan importante como a
garantizar un derecho de ciudadanía como es ser atendido en el caso de encontrarse
en situación de dependencia. En este caso se encuentran más de un millón de españoles,
personas mayores, personas con discapacidad. Se garantizan, en el Sistema Nacional de Dependencia,
servicios y prestaciones; servicios tan importantes como residencias, ayuda a domicilio, centro
de día, teleasistencia; y también prestaciones, prestaciones como es el cuidador familiar,
que recibirá una cantidad económica, pero también alta en Seguridad Social; y una prestación
económica tan importante como es el Asistente Personal. - Ana Botella. - Bueno, yo tengo
que disentir con la Sra. Valcarce. Todos estamos de acuerdo en que queríamos una ley de dependencia
y, además, que era absolutamente necesaria y que todos los partidos políticos estaban
de acuerdo. La verdad es que es una ley que se ha hecho sin consenso, que está plagada
de buenas intenciones, pero que no sabemos todavía ni a quiénes se la vamos a aplicar,
ni cuáles son esos servicios básicos que va a garantizar el Estado, ni cómo se va
a financiar, lo cual aún es más importante. No sabemos exactamente qué tanto por ciento
tiene... va a pagar el Estado, qué tanto por ciento van a pagar las Comunidades Autónomas
y qué tanto por ciento va a pagar la persona que recibe esa asistencia. - Temas, en cualquier
caso, para el debate, en el que entraremos enseguida. Señor Martín Pindado. - Vamos
a ver. Desde la representación que ostento de los mayores de este país, puesto que soy
el Vicepresidente del Consejo Estatal, he de constatar que hemos recibido con una gran
satisfacción el advenimiento de esta ley. De hecho, el pasado día 12 hubo un Pleno
Extraordinario del Consejo Estatal y por unanimidad presentamos nosotros nuestra ayuda, nuestro
apoyo, para que esto se consolide, puesto que era una ley que llevábamos mucho tiempo
esperándola y que, bueno, y que por fin parece ser que está ahí. Le queda mucha andadura,
por supuesto. Estamos empezando a ello, pero sí hemos hecho el ofrecimiento, en este caso
al Ministro de Trabajo, al Ministerio de Trabajo, que cuente con nuestra colaboración. - Señor
Romañach, su turno. - Nosotros... O sea, si te fijas, en esta sala la única persona
que vive esto todos los días soy yo, y es lo habitual. Es decir, todo el mundo tiende
a ver la situación de dependencia con un enfoque distinto al que lo vemos los que vivimos
así. Entonces, al enfocarlo completamente distinto (por eso me gusta el título del
programa), lo enfocamos como un tema de igualdad de oportunidades y ciudadanía, tal como se
pone en el título de la ley. El problema es que no basta con poner palabras bonitas,
sino que, además, hay que articular soluciones, y en esta ley digamos no entendemos por qué
nosotros tenemos que hacer copago (luego entraremos en por qué); no entendemos por qué tenemos
que seguir a la cola de Europa, como siempre, con el presupuesto que ha puesto el Estado
encima de la mesa; y no entendemos por qué no se entiende que nosotros no queremos ser
dependientes; lo que queremos son las herramientas para la promoción de nuestra autonomía personal.
Es decir, lo que queremos es ser ciudadanos como los demás y queremos que esta ley nos
ponga en donde empiezan los demás, en el mismo nivel, para poder tomar decisiones sobre
nuestra propia vida. - Isabel. - Yo no conozco todavía bien la ley, la verdad; el anteproyecto,
vamos; no lo he leído. En lo que se refiere a la asociación o la federación que yo represento
(de alguna manera, soy su voz) de enfermedades neuromusculares, hay -parece ser- algunas
carencias en esta ley. La teleasistencia, por ejemplo, en general se piensa o se hace
o se dirige hacia personas mayores; bueno, pues hay jóvenes con distrofias musculares
que están totalmente inválidos, que no pueden valerse, que necesitan de una ayuda externa,
de un... llamémosle como queramos, pónganle el nombre que quieran, ¿no? Hoy, en general,
son las madres las que se ocupan de cuidar a estos niños, a estos adolescentes o a estas
personas adultas; mujeres que no tienen ninguna ayuda de ningún tipo, no ya económica, sino
un alivio de unas horas. Yo creo que todavía..., que esta ley va a tardar demasiado. Ojalá...
Evidentemente, es un paso importante; se tenía que hacer. Bienvenida... Todas las personas
con las que yo he hablado que tienen un problema de dependencia están, pues, esperanzadas
-al menos, esperanzadas- de que alguien se haya fijado ya en ellos, que no está mal,
para empezar, pero me temo que va a tardar mucho en ser realidad, para todas las personas
que al menos yo conozco que necesitan estas ayudas sociales, sanitarias..., en fin, muchísimas.
- Loles. - Sí. Yo creo que es una buena noticia, simplemente, ya el hecho de que exista como
anteproyecto esta ley. Me parece, como se ha dicho ya, que tiene un largo camino por
delante, lo cual me parece bueno porque es tiempo de criticarla, pero también es tiempo
de aportar y de que se puedan recoger las aportaciones, pues, de diversos colectivos,
¿no? Yo quería señalar solamente un punto, y es que oigo hablar mucho de protección
de la dependencia y muy poco de la primera parte como se llama la ley, ¿no?, que es
la promoción de la autonomía personal, y dentro de la promoción de la autonomía personal
yo creo que hay mucho camino que hacer y que ahí está sobre todo un capítulo fundamental,
que es la prevención de la dependencia, porque todo el mundo nos está diciendo que hoy ya
hay muchos mayores dependientes y mañana habrá muchos más. Bueno... - Y se podrían
evitar, ¿verdad? - Claro. - Si hubiera más información... - Claro, muchos se pueden
evitar... - y más prevención, por ejemplo desde la sanidad pública, por ejemplo, para
que esas enfermedades, que la mayoría son hereditarias, ya al menos dejasen de producirse
en muchos casos en el futuro. - Incluso más que eso. Buena parte de las personas dependientes
son mayores. Atención: buena parte de las personas dependientes son mayores. Todos los
mayores no son personas dependientes, pero... - El fenómeno de la dependencia afecta a
más de 40 millones de europeos. En España el Gobierno calcula que más de 1 millón
de ciudadanos son dependientes y asegura que en el año 2010 serán 3 millones y medio.
Hoy sólo 3 de cada 10 personas dependientes recibe Ayuda a Domicilio y menos del 1% cuenta
con una plaza en un centro de día. - En España hay actualmente más de un millón de personas
dependientes, según el Gobierno. Personas mayores, enfermos de parkinson o alzhéimer,
víctimas de accidentes o enfermos graves que no pueden valerse por sí mismos se podrán
beneficiar del nuevo Sistema Nacional de Dependencia. "El Gobierno aportará más de 12.638 millones
de euros para poner en marcha el Sistema Nacional de Atención a la Dependencia entre los años
2007 y 2015". Se espera que la misma cantidad sea invertida por las Comunidades Autónomas.
Además, los beneficiarios pagarán en función de su renta y patrimonio. Alrededor del 80%
de los dependientes son mayores de 65 años. Actualmente, más de 7 millones de españoles
superan esta edad; dentro de veinte años serán casi 11 millones, y en 2050 España
será, tras ***ón, el país más envejecido del mundo: más de 16 millones de españoles
tendrán más de 65 años. "No tiene por qué ser paralelo el envejecimiento de la población
con la aparición de la dependencia. Puede haber mucho envejecimiento, pero no tiene
por qué haber... No tiene por qué haber un aumento similar de personas dependientes".
Sólo el 9% de la población mayor recibe actualmente alguna ayuda. Las plazas en las
residencias públicas son insuficientes y las privadas cuestan entre 1.000 y 2.400 euros
al mes, mucho más de lo que puede pagar un jubilado con su pensión. Además, tan sólo
una minoría cuenta con ayuda a domicilio, una plaza en un centro de día o servicio
de teleasistencia. "Magdalena, buenas tardes. ¿Qué tal?, ¿me escucha?" "La dependencia
se puede prevenir en una gran cantidad de casos. Se puede hacer una prevención primaria,
que no aparezca una enfermedad; una prevención secundaria, que la enfermedad no progrese;
y una prevención terciaria, en gente muy mayor, que es lo que hacemos en la geriatría,
en el mundo geriátrico, que es que cuando la enfermedad aparece es mucho lo que se puede
hacer para que se revierta todo el proceso". La futura ley contempla ayudas económicas
tanto a las personas dependientes como a sus cuidadores, que podrían percibir un sueldo
y darse de alta en la Seguridad Social. Actualmente sólo el 6% de las familias que cuidan a un
dependiente recibe apoyo de los Servicios Sociales. La atención a estas personas se
realiza fundamentalmente en el ámbito familiar y casi siempre por mujeres. "Yo necesitaría
que viniesen por la mañana a levantar a Carlos y luego por la noche para acostarle y también
para darle..., cada tres horas que tengo que levantarme yo a darle la vuelta para que no
se haga llagas". La implantación en 2015 del sistema podría crear alrededor de 300.000
puestos de trabajo. "Vienen voluntarios de Cruz Roja, que me ayudan pues a tener una
vida social, a salir, a ir al cine... Voluntariamente y altruistamente, pues me dan eso, aunque
no deben ser ellos los que hagan ese servicio. Ni mi madre, ni voluntarios... Esto yo creo
que se tiene que hacer cargo el Estado, que nos tiene que dar a nosotros los medios para
contratar gente que lo haga y para poder, pues, tener una vida como la de cualquier
otra persona normal". Bueno, me quedo con una reflexión que hacía antes el amigo Romañach
en el sentido de que es un problema que nos puede afectar a todos, porque todos nosotros
podemos ser un día dependientes. Amparo Valcarce, ¿cuál es el grado de desarrollo en estos
momentos de esa ley? - En este momento efectivamente partimos de niveles de atención, desde los
Servicios Sociales, a las personas dependientes muy bajos. Por eso ahora el Gobierno toma
una decisión muy importante, que es afrontar