Tip:
Highlight text to annotate it
X
El templo en Jerusalén
se había convertido en un centro de comercio
en vez de un lugar de oración.
Palomas, palomas, palomas aquí señores.
nueve, diez, once, doce, trece, catorce, quince...
dieciseis, diecisiete, dieciocho...
Está escrito, Mi casa será casa de oración.
¡y ustedes la han hecho cueva de ladrones!
Va a soltar mis animales.
¡Deténganlo! ¡Deténganlo!
¡Llamen a los guardias! ¡a los guardias!
La oposición entre los líderes políticos y religiosos aumentaba
porque la gente proclamaba a Jesús como su Rey.