Tip:
Highlight text to annotate it
X
Toma la luna un matiz
cuando te busco a oscuras.
Una serpiente pregunta que dónde guardo mis dudas.
Una gaviota me trae dulces de hojaldre azul
y cada mano o sustancia que toco eres tú.
Luciérnagas indecentes alumbran la playa,
quizá sean pateras o angelitos de la guarda.
Menuda marea que tengo en la espalda,
menuda cabeza, ¿quién me la guarda?.
Menos mal que tengo la luna prisionera
dentro de mi corazón
por si alguna vez me falta o no tengo fuego
poder encenderme con su voz.
Quién eres tú por soñar, espejo de tu niñez,
quién anuda tus deseos, que dice tu piel.
Cuánto fumas por callar, hórreos de imaginación,
cuánto succionas del mundo para poder ser yo.
Las ventanas de tu cara son frutas prohibidas,
quizás el pecado es seguir aún con vida.
Menuda insistencia que tengo en la espalda,
menuda cabeza, ¿quién me la guarda?.
Menos mal que tengo la luna prisionera
dentro de mi corazón
por si alguna vez me falta o no tengo fuego
poder encenderme con su voz.
Seré, quien tira la piedra o enseña la mano,
quien roba canciones para ti.
Seré, quien siempre vive en su bosque lejano,
quien busca el mar aquí en Madrid.
Seré quien te de un beso en la almohada
y luego se vaya a otro jardín.
Seré el dividido sujeto que dijo el maestro
que hay que ser para vivir.