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En la zona rural de China, las disputas por las tierras son una de las fuentes de conflicto más frecuentes.
Este pueblo del municipio de Haorao, en la región autónoma de Mongolia interior, no es una excepción.
Desde que el Gobierno central canceló las antiguas tasas agrícolas,
este pueblo de 8.000 habitantes ha gozado de una nueva prosperidad.
Pero algunos de los agricultores más pobres se sienten abandonados a causa de viejas disputas por sus tierras.
Me llamo Xu Shuhai y tengo 41 años.
Este es mi terreno.
En 1994 y 1995 la sequía destruyó mi cosecha. No pude pagar las tasas anuales de mi terreno.
En 1997 el Gobierno local me confiscó las tierras.
Tras la sequía, el comité del Partido Comunista del pueblo reclamó algunas tierras.
Pero los agricultores con contactos en el Gobierno o con dinero, lograron mantener sus tierras.
Gran parte de nuestro terreno estaba controlado por el entonces líder del pueblo.
No tenía tierras, así que tuve que arreglármelas con trabajos temporales.
En aquel entonces el colegio no era gratis.
No podía pagar las cuotas, así que mi hijo dejó el colegio durante dos años.
Me enteré de la nueva regulación de los derechos sobre las tierras cuando estaba en una boda.
No sé leer, así que le pedí a alguien que lo leyera por mí.
Artículo cuatro en la página cuatro, está clarísimo. Los agricultores pueden recuperar sus tierras.
No se puede confiscar las tierras a un agricultor por causas de impago de las tasas.
El Gobierno local no nos informó sobre esto para nada.
Lo mantuvieron en secreto. Tuvimos que enterarnos de esto por otros.
Juzgado
Doce familias presentaron una demanda.
Nueve familias que tenían contactos, dinero o influencia recuperaron sus tierras.
Solo apelaron los casos presentados por las tres familias sin dinero que quedábamos.
Nosotros somos tres familias en desventaja económica.
Juez
Incluso aunque la ley esté de mi lado, no puedo ganar porque no tengo dinero.
Todo lo que tengo es esta casa en ruinas.
No puedo permitirme hacer un pozo.
Dependemos del vecino para tener agua.
Mi sueño para el futuro es construir una casa como esta.
Si no hubiese perdido mis tierras durante ocho años, estaría en las mismas condiciones que ellos.
El juicio de Xu Shuhai se ha recurrido cuatro veces. Todavía no ha recuperado sus tierras.