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Estamos en Sungit, una ciudad malaya situada en el estrecho de Malaca
Aquí los pescadores llevan siglos viendo pasar enormes cargueros frente a sus costas
Pero desde 2008 cientos de estos enormes barcos se han detenido en mitad del océano
Estos gigantes de hierro son víctimas de la crisis internacional y la reducción del comercio global
A pesar de que las principales economías del mundo parecen estar recuperándose
las perspectivas para el sector del transporte marítimo siguen siendo pesimistas
Un pequeño bote pesquero nos conduce hasta la flota fantasma
A nuestro alrededor aparecen cientos de barcos, casi todos vacíos y sin tripulación abordo
En muchos sólo quedan vigilantes armados que protegen los buques de ataques piratas
algo relativamente común en esta zona
El estrecho de Malaca es una de las rutas marítimas más viejas e importantes del mundo
Durante siglos, todo tipo de productos y materias primas han pasado por aquí
de camino entre Europa y Extremo Oriente
El petróleo consumido en Shanghai, las cámaras de fotos japonesas, camisetas hechas en China...
y millones de otros productos han viajado a través de estos 800 kilómetros de canal entre
Singapur, Malasia and Indonesia y rodeados de selva
Hace años, antes de que el Golfo de Adén se convirtiese en el epicentro de la piratería
el Estrecho de Malaca era la ruta que más ataques sufría en todo el mundo
Las medidas tomadas por los países de la zona contribuyó a mejorar la situación
El capitán pide que nos identifiquemos antes de dejarnos subir abordo
Al final accede a explicarnos qué hace su tripulación en mitad del mar de brazos cruzados
Llevamos aquí por lo menos tres o cuatro meses
La crisis empeora día a día. Tengo miedo porque no veo ninguna mejora en el futuro
No estamos haciendo nada. Sólo hacemos trabajo de mantenimiento en la sala de máquinas
La situación está mejorando y algunos países asiáticos han recuperado el volúmen de
exportación que registraban antes de la crisis
Sin embargo, el 90 por ciento del comercio mundial viaja por mar
y las previsiones para el transporte marítimo siguen siendo preocupantes
No hay suficiente comercio como para justificar el número de barcos que tenemos
De modo que como no hay comercio, es más barato para el armador dejar los barcos parados
en lugares como el estrecho de Malaca
Durante los años de auge, todo el mundo quería nuevos barcos: querían más barcos y más dinero
Todo el mundo encargó más y más barcos y ahora no se sabe qué hacer con ellos
Aunque algunos barcos tienen bandera japonesa o surcoreana, la mayoría son europeos
Prefieren quedarse aquí que atracar en sus países de origen porque es mucho más barato
El armador tiene que pagar mucho dinero por estar en el puerto. Por eso estamos aquí
¿Aquí es gratis?
Sí, sí, aquí es gratis
Todos están registrando pérdidas o muchos menos beneficios que en años anteriores
y algunas compañías se han declarado en bancarrota
Creo que este año va a ser muy, muy duro para el sector del transporte marítimo
Al caer la noche, cientos de luces aparecen en las costas de Sungit
La flota fantasma es como una ciudad que ningún mapa refleja
y seguirá allí hasta que el comercio internacional vuelva a crecer nuevamente