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No tienes pinta de alemán.
Lo soy.
Ni de autostopista.
Para mí, este viaje era
una búsqueda.
Había acabado mis estudios de matemáticas.
Quería vivir.
Quemar todos los puentes, las fórmulas.
Tanto peor si yo me quemaba también.
Quería el calor, el sol,
y me fui a su búsqueda.
- Ya es suficiente. - ¿Ya?
Me falta un poco.
No te preocupes.
Si eso es todo lo que tienes...
Bastará.
¿ No tienes suelto?
¿De dónde sale esta pasta?
Juegas fatal, y ni tienes dónde caerte muerto.
Pero, ¿por qué?
Así me darás buena suerte.
Venga, hombre, no seas chorra.
¿ Cómo te llamas?
Charlie. ¿ Qué tomas?
Yo pago
-Parece que vienes de lejos. - De Lübeck.
¿Y adónde vas?
Puede que a Fez.
Por los matemáticos árabes.
Estuve en Marruecos con un amigo.
Los polis nos perseguían... No verdaderos polis...
Hay que encontrarte un pesebre.
Una habitación.
¿ Cómo hiciste para devolverme la pasta?
Secreto profesional.
Tienes los dedos hábiles.
Sí, pero nunca para quitar.
¿Te sientes bien?
¿Cómo ha ido?
Ni una pareja en una hora...
Después saqué un full,
Pero el otro tenía escalera de color.
¿ Cómo encontrar pasta?
¿ Trabajando?
¿En qué?
Podemos vender postales, o planos del metro...
No lo veo claro.
¿ Y las chicas?
Es como las cartas. Hace falta capital.
¿Eres honrado?
¿ Más o menos, y tú?
Como tú, más o menos.
No te inquietes.
¿Tienes dinero?
Solamente 200 marcos.
Tengo 550. Faltan todavía 100.
¿De quién es la casa?
Un americano rico que se toma por hippy.
Allí le tienes
¿ Tomamos algo?
¿ Quiénes son esos?
Siempre los mismos. No los conozco a todos.
¿ Y ese tipo que pasa el cigarrillo?
No lo sé. Se le ve por todas partes.
Me enamoré de inmediato.
Yo soy así.
¿ Y la chica rubia...?
En el rincón.
Estaba celoso del tipo al que hablaba.
¿Qué pasa? ¿Porqué me miras así?
Se llama Estelle. Vive en Nueva York.
La veía en Pussycat.
Mantente alejado.
¿ No soy lo bastante bueno?
Claro que no. Pero no podría explicártelo.
Venga, tómate otra copa.
Preferiría una cerveza.
Ve a la cocina.
No encuentro cerveza.
¿ Te preparo algo?
¿Qué te apetece?
¿ Una Margarita?
Lo que tú quieras.
¿Cómo te llamas?
¿ Qué hace aquí Charlie?
Nada.
¿Y tú?
Nada.
¿Y tú?
¿ No bebes? ¿ No te gusta?
Estoy un poco borracho.
Yo también.
Le pregunté a Charlie quién eras.
¿ Qué dijo?
No, qué más dá.
¡Dímelo, joder!
Yo te ví...
y Charlie me dijo...
Nos vamos.
- ¿ Qué pasa? - Rápido, salgamos.
¿ Dónde puedo llamarte?
Tengo el resto de la pasta.
¿ Cómo?
Tu chica dejó de lado su bolso.
Gracias por tenerla ocupada.
¡ Cabrón!
Es justo lo que nos faltaba.
Voy a devolvérselo.
Después de que demos un palo,
podrás hacer de galán.
Olvídate de Estelle...
Mierda, sólo hay ropa.
Podrías haber llamado antes de venir.
Te traje un regalo.
Qué paquete tan bonito.
Los 200 francos que te robé.
¡ Interesante!
Entra.
Se han vuelto 400.
Los intereses.
He hecho negocio gracias a tí.
Bravo.
Si tengo un dinero para invertir pensaré en tí.
Es también un pretexto para volver a verse.
No tienes que pagar por eso.
Quería decirte algo...
No sé cómo hacerlo.
Inténtalo.
Vale.
Comprendo.
No te vayas.
Me encanta escucharte.
Voy con retraso.
¿Qué es?
Prueba esto.
Dentro de 5 años, será legal.
No siento nada.
Ya llegará.
Una cicatriz.
Cuando estaba en Nueva York, me drogaba,
la aguja estaba sucia.
¿ Cuándo?
Hace un año.
¿No has empezado de nuevo?
Mejor, si no quieres vértelas conmigo.
Esto comienza bien.
Perdí mi avión.
Voy a lbiza.
Iré mañana.
- ¿ Quieres venir? - ¡ Por supuesto!
Pero no en seguida.
Tengo un asunto que arreglar.
Estaré allá dentro de una semana.
Cuando llegues, pregunta por Ernesto Wolf.
¿ Qué es?
Léelo.
El cerebro, como el Africa de 1850,
Está todavía inexplorado.
Estas zonas sombrías
son el asiento del raciocinio y de la creatividad.
¿Conoce la dirección del Dr Wolf?
Disculpe, ¿está aquí el Dr Wolf?
¿Está seguro? Me dijeron...
Es dueño de un hotel pero vive en su villa.
No le gusta ser molestado.
¿ Estelle Miller está allí?
¿ Pero vive aquí?
Ha salido.
¿ Cuándo va a volver?
No ha vuelto desde hace dos días.
¿Podría dejarme su llave? Ella me espera.
Lo siento. No me dijo nada.
Déme las señas del Dr Wolf.
¿ Perdón, es usted el Dr. Wolf?
Yo vengo de Lübeck.
¿Quiere hablar conmigo?
Venga a tomar algo.
Se le ve a gusto por aquí.
Me divierto.
Me dejo llevar por la nostalgia.
Los buenos viejos tiempos.
¿Te gusta?
Es mi primera vez...
Llámame Ernesto.
Nada de formalidades.
- ¿Cuándo llegaste? - Esta mañana, en barco.
¿Qué se te ofrece?
Busco a una amiga, Estelle Miller.
Me dio tu nombre.
Es una chica maja.
Vive en mi hotel.
Desapareció hace 2 días.
¿Desapareció? Mucho decir es eso.
Esta isla está llena de gentes que van y que vienen
Y ninguno sabe adónde.
Estelle ha debido encontrar un grupo.
Eso suele terminar por la mañana en la playa.
¿Has ido allí?
Puedo ir.
¿ Puedo sentarme?
¿Le encontraste?
Wolf.
¿ Por qué?
Todo lo que le concierne me interesa.
¿Le conoces bien?
Nadie aquí le conoce bien. ¿ Y tú?
Acabo de verle.
Es una lástima.
¿ Que hace exactamente?
Tiene un montón de amigos.
Toma uno.
Esto te levantará el ánimo.
Pareces fatigado.
¿ Entonces, que hace Wolf?
Montones de cosas.
Tiene restaurantes, Un hotel, un bar...
Pero creo que es una fachada.
Se metió en líos después de la guerra.
Alguna movida nazi con base en el Mediterráneo.
Es lo que se cuenta.
Y su amiga, Estelle Miller,
¿ Qué me dices de ella?
No sé si es su amiga.
Es de su banda.
Un consejo:
Sé prudente con Wolf.
Puede ser malo.
Esta píldora...
Es una anfetamina.
Aquí se consigue sin receta.
¿ Dónde estabas? Te busqué por todas partes.
Estaba por ahí.
¿Ni siquiera me saludas?
Tienes una pinta rara.
¿ Qué tienes?
Nada en absoluto.
¿Tuviste un buen viaje?
¿ Qué pasa contigo?
Quiero saber donde estabas.
No seas vulgar.
Me vuelves loco. ¿Dónde estuviste?
Hice un viajecito.
No tengo ganas de hablar de eso.
Sentémonos allí.
Es bonito esto, ¿verdad?
¿ Cómo te sientes?
¿ En qué piensas?
Dijiste de no hablar.
Es verdad.
Por fin la encontraste.
Ellas van y vienen, amigo mío.
Te harás a ello.
No te hará daño,
comportarte con algo más de seriedad, cariñito.
Una buena ducha,
Un filete y una noche de sueño,
he ahí lo que te hace falta.
Encantador.
Yo me ocupo de Estelle.
¿ Puedo quedarme contigo?
No quedaría bien.
No quiero. Eso es todo.
¿ Pero por qué?
Me pones de los nervios.
Dices cosas desagradables.
¿Qué pretendes?
Ya tengo suficiente, eso es todo.
¿ De mí?
No puedo decirte.
Déjame tranquila.
Todo el mundo me da la vara.
Vale, me voy.
Espera..
Lo siento.
Tiéndete a mi lado.
Haz lo que quieras.
Te prevengo.
No me moveré.
Ni siquiera pensaré en ello.
¿ En qué piensas?
Quiero que te vayas.
No te comprendo.
Lo sé.
¿ Por qué quieres que me vaya?
A veces te quiero y a veces no.
"Ellas van y vienen".
Él dijo que esto pasaría.
No importa.
No.
Repite lo que dijiste:
A veces me quieres...
A veces te quiero.
Por tanto me quieres.
¿Verdad?
Sí... Vete ahora.
Dime primero lo que haces con este hombre.
¿Qué hombre?
Es un amigo de mi padre.
¿ Quieres venir a una fiesta?
¿ Dónde?
Toma el camino de San José.
Tuerces a la derecha.
Habrá un gran fuego.
Te lo suplico, ¡vete!
¡Estoy contenta!
Te lo tomas todo demasiado en serio.
A veces soy mala, eso no quiere decir nada.
Ven a ver a mi amiga.
Stefan... Cathy.
Algo apesta.
Soy yo.
¿Puedo besarte?
- Demasiada barba. - Me gusta.
Como quieras.
No deberías mezclarlo con alcohol.
Métete en tus asuntos.
¿Dónde dormimos?
Aquí, si tú quieres.
- Vamos a dejarte una habitación. - ¿ Y tú?
Yo vivo en casa de Cathy.
¿ Entonces no quieres saber más de mí?
¿Y qué tiene que ver?
Tú no me quieres.
Estás loco, te adoro.
¡ Cabrón!
¿ Quieres un bofetón?
Prueba.
Cabrón.
Te mereces otra, pero estoy reventado.
Tanto mejor, revienta.
Te comportas como una puta.
¿Porque me acuesto contigo?
- Podrían oírnos. - ¿Y qué?
Wolf se enteraría.
Dí en el clavo, ¿eh?.
Admítelo, él te mola.
¿Te gustan los viejos?
Bonita pareja.
- Me largo. - Wolf y ella.
Me das asco.
¿ Dónde está mi habitación?
Eres verdaderamente cruel.
Debo marcharme.
Esta tarde a las cinco en el fuerte.
No hay nada entre Wolf y yo.
Es un amigo de la familia.
Me da alojamiento, eso es todo.
Si todavía me lo pides, me iré.
No te lo pediré más.
¿Por qué tienes miedo de vivir conmigo?
No tengo miedo, no quiero malos rollos.
Estoy desquiciado, quiero dormir contigo cada noche.
Yo también.
Entonces ningún problema.
Bill va a prestarme su casa al otro lado de la isla.
Todo lo que debemos hacer es ir.
Wolf no se pondrá muy contento.
No se puede contentar a todo el mundo.
- No quiero herir a nadie. - Lo sé.
Te recogeré a las 3 de la mañana.
Nadie nos verá.
¿ Adónde va este túnel?
Al mar.
Vuelvo enseguida.
¿ Qué es?
¿ Qué pasa?
¿ Conoces el culto al Sol?
En Calcuta, los jóvenes
Deciden de repente adorar el sol.
Sentados, piernas cruzadas, totalmente desnudos,
lo siguen durante todo el día.
En seguida se quedan ciegos.
Después de un año,
Desecados, mueren.
Te volviste a afeitar las piernas.
¿ Me quieres?
Estelle se negaba a salir.
Tenía miedo de todo, excepto de nuestra casa.
No, se acabó.
Estoy segura de que tienes.
Que no...
¿Volvió David?
¿Estás así por él?
Sí, sé que no volverá.
Creo que necesito un poquito de caballo.
Bueno, veré qué puedo hacer.
Ten cuidado.
Stefan va a volver.
¿Qué dirá cuando me vea?
Nada.
Le diré
que me habías avisado y que yo me olvidé de decírselo.
No tenía tu dirección.
Diré que yo te la envié.
Por otra parte, es verdad.
Hasta cuando dices la verdad, parece que estás mintiendo.
¿Qué piensas de Stefan?
Le quiero mucho.
¿Estás enamorada?
Creo que sí.
Te adoro.
Ven a reparar la vela.
Estoy cansada.
¿Te asusté?
En absoluto.
¿ Acabas de volver?
¿ Por qué no entraste?
Estaba descansando un ratito.
Debías reparar la vela.
Cathy ha llegado.
Olvidé avisarte.
¿Qué es el caballo?
Ni idea.
Estoy inquieta por Cathy.
Está muy mal.
Deberías hacer el amor con ella.
Dime,
¿Qué es el caballo?
Heroina.
¿Tú tomas de eso?
Ya no.
El año pasado, nos chutábamos...
Pero paramos.
Cathy se fue el día siguiente.
Nos dejó confusos y asustados.
¿Qué pasa? Dime qué pasa.
Nada.
Demasiado sol...
El viento...
Llamaré a un doctor.
Nada de doctores. Quédate conmigo.
¿ Dónde estabas?
Te eché de menos.
¿Qué es esto? ¿Qué es?
Ya estás otra vez.
¿ Dónde escondiste el resto?
No hay más.
Es Cathy. ¿ No?
La robé...
A Ernesto.
Te juro que no volveré a hacerlo.
Te quiero.
¡ Es mejor que tu porquería!
Es muy diferente.
¿ En qué?
Esto lo hace todo hermoso.
y vivo.
El caballo te hace sentir bien.
Eso es, el caballo.
Los que lo toman Quieren evitar la vida
Los que fuman esto o se ponen de ácido
quieren vivir más intensamente.
Los hippys desprecian la heroína
Los junkies desprecian a esos jóvenes locos
Que creen que ellos han descubierto el mundo
Raramente se mezclan
y llevan vidas diferentes.
Tú eres una excepción.
De verdad, no estoy enfadado.
¿ Pero por qué empezaste de nuevo?
Sólo una vez.
¿ Pero por qué?
No lo sé.
Eras malo, me aburrías con Wolf...
Estaba deprimida.
Pensé que éramos felices.
Tú sí, pero no yo.
Decías que me querías.
Pero te quiero.
Eso no tiene nada que ver.
¿Sabes qué es lo peor?
No, dímelo.
Quedarse enganchado.
Es el fin.
Pero un picotazo de vez en cuando,
es como una copa o un cigarrillo.
¿ Es decir?
Me queda un poco.
Me habías dicho lo contrario.
Tomé sólo la mitad.
Me queda la otra mitad.
Voy a tirar eso.
Si tú quieres, está aquí.
Se diría que es harina.
¿Sabes lo que eso vale?
Cerca de 10 dólares.
Es de locos.
Y de tontos tirarla.
No hay ningún peligro si se comparte.
No volveremos a tener más.
Claro que sí.
Sólo tienes que pedirle a Wolf.
No seas malo.
¿ No quieres probar? ¿ Sólo una vez?
Te niegas una experiencia
Me encantaría tomarla contigo.
¿ Tienes miedo?
No, pero tú no la probarás.
¿ Estás bien?
Traigo té.
¿Puedo entrevistarle
sobre su experiencia de ayer por la noche?
¿ Cómo se siente?
¿ Y ayer por la noche?
¡ Magnífico!
¿Valió la pena?
Todo tiene su precio.
A mayor valor, más hay que pagar.
La gente no entiende el temperamento germánico.
¿ Sin tragedia, dónde está el placer?
¿Te queda más?
Ten cuidado, Stefan.
¿Te queda?
El segundo picotazo fue decepcionante.
El 3º debía ser el auténtico 2º.
Tiempo... Su ritmo se aceleraba.
Ya no existía.
Hachís.
Hierba.
¿De qué tipo?
Rojo, por supuesto.
Sé generosa.
Con esto basta.
¡Rompamos con todo!
¡ Fuera!
- ¡ Aquí está! - ¿ Qué?
¡ El enemigo! ¡ A la carga!
Estoy orgullosa de ti.
¡ Mira!
Herido en combate.
Salgo.
Cuidado.
No me reconocerán.
¿La llevamos a casa?
Piérdete.
Le dije que la íbamos a acompañar.
Lo del chico me da igual.
Pero me robaste 200 dosis.
¿ Que vas a hacer?
No trates de huir.
Te haría detener.
Irías a la cárcel por unos cuantos años.
Tengo relaciones.
He hecho que te sigan.
Esos tipos
que hacen el carbón de leña...
He aquí mi oferta...
Ya era hora.
Debo hablarte.
Necesito un chute.
¡ Escucha, Stefan!
¡ Te lo ruego!
Cálmate.
Ya hacen doce.
¡ El sermón, más tarde!
¡Rápido!
¿ Qué decías?
No le robé una dosis a Wolf
sino 200.
Eso no le gustará.
No está contento.
Devuélveselas.
¿De verdad lo quieres?
Está rabioso.
Le devuelvo lo que queda.
Como le caes bien,
bastará que tú, para reembolsarle las dosis,
trabajes como barman por una temporada.
Que se vaya al diablo.
No tenemos elección.
Si trabajas,
todo irá bien, y...
podrás quedarte con alguna dosis.
Si no, nos hará detener.
Podemos irnos.
¡ Haz las maletas!
Ven a ver.
¿ Qué hacen?
Carbón de leña.
Nos fuimos a vivir a la ciudad
cerca de mi trabajo.
¿No tienes nada que decir?
Estoy de mal humor.
Muy bien. Yo también.
He pillado un adelanto.
Reembolsemos a Ernesto.
Llámale Wolf.
Le llevaré el dinero mañana.
Yo mismo iré.
Es lo que quise decir.
Reflexiona o calla la boca.
¿Qué estás cavilando?
No te incumbe.
Me das asco.
Ella lo hacía a su modo, bajo la lengua.
Los polis no miran ahí.
¿ Qué pasa?
Un cigarrillo.
¿ Sangras?
Me mordí la lengua.
¿ Qué escondes?
¿ Y esto?
¡ Te chutabas a escondidas!
Todo el tiempo.
Solamente cuando lo hacías tú.
¡ Yo no me escondía, perra!
Y yo no echo sermones.
Déjame.
Es demasiado estúpido.
Detengámonos.
Todavía podemos dejarlo.
Aún estamos a tiempo.
Aquí están las dosis.
El dinero para las 50 que faltan.
Cuéntelo.
Siento mucho haberte molestado.
Pero esto no me pertenece.
Lo devolveré en dinero.
Haces bien
en haberte vuelto razonable.
¿ Por qué no somos amigos?
El 7 de septiembre.
Así se acaba una semana de infierno.
Intentamos ser nuestros propios médicos.
De hecho, buscamos sustitutos.
La excusa: el LSD debía tener sobre nosotros
el mismo efecto que sobre los alcohólicos.
¿ Es puro, al menos?
¿ No contiene nada más?
¡ Claro que no! Sé de donde viene.
Nos quedan 3/4 de hora.
¿Llamamos a un taxi?
¿ Buena idea?
La revelación última
de la sustancia de las cosas.
El mundo parece como nuevo.
Una sed de absoluto, de pureza.
Veo claramente
mi alienación atroz.
Sé que no me pincharé más.
Mirarnos frente a frente no fue indoloro,
sobre todo para Estelle,
no era sin embargo el primer viaje.
¡ Eres diabólico!
¿ Todavía lo sientes?
Un poco.
Estoy cansada.
¿Porqué tenías tanto miedo de mí?
No de ti.
De mí.
No me quiero mucho.
Eres maravillosa.
De ahora en adelante...
¡ Libertad!
Por fín estaba en paz con el mundo.
Hasta quería a estos turistas.
Eran compatriotas.
Wolf también estaba emocionado.
Cuando vuelvo a la patria
al salir el sol
miro en el valle
las chicas delante de sus puertas
suspiran y murmuran
Silesia
Mi país
Así nos reencontramos
Mi Silesia
En la ribera del Oder
3 de octubre, 5 de la mañana.
Ella no había vuelto.
¿Cómo había podido dejarla con Wolf?
Es el invierno.
Otra vez estamos enganchados.
Ya no somos de su mundo:
parias de esta microsociedad.
¿Dónde estuviste?
La noche en que todo empezó de nuevo.
Te esperé hasta las 5.
El 3 de octubre, para ser exactos.
¿Cómo quieres que me acuerde de eso?
Mentirosa. ¡ Lo sabes bien!
Estás colgado.
¡ Marrana!
¿ De donde vienes?
De Beirut.
Vístete.
Estoy reventado.
- Tienes buen aspecto. - Mejor que tú.
¿Has ganado un montón de pasta en París, eh?
- ¿ Las máquinas de pinball? - Cosas así.
¿Me das un poco?
¿ Crees que estoy acabado?
No, no lo creo.
Pero sal de aquí.
Mañana nos vamos a París.
Haz tu equipaje,
dí adiós a Estelle.
¿ Por qué?
¿Tú sabes a cuantos tipos ha destruído?
Dos, y de los buenos.
Te había prevenido,
¿ Te acuerdas?
- ¿ Y ella? - ¡ Qué pasa!
-¿Qué va a ser de ella? -En el punto al que ha llegado...
¿ Viste a Estelle?
¡Las 3 de la mañana!
Las chicas que vuelven pasada la medianoche me dan asco.
¿ Qué tiene ella de especial?
Te encoñaste, eso es todo.
Tiene las piernas gordas.
Y no dice más que jilipolleces.
Vas a perder tu torre.
¿Te da igual, tu torre?
Bueno, la tomo.
Te hace falta un chutazo.
Ve a dártelo.
Te cuidaremos en París.
¿ Dónde estabas?
- ¡ Dame eso! - ¡ Habla!
De compras.
¿ Qué compraste?
Fuí a casa de Susan, estuve con ella.
La he visto. Ella no te vió a tí.
¡ Dame eso!
Sigue, ¿qué decías?
Quiero saber en qué empleas el tiempo.
Y lo que hiciste el 3 de octubre.
¿ Si te lo digo, me lo darás?
¿ Aunque no te guste?
¡ Jura!
Bueno, lo juro.
Estuve con Wolf.
No es la primera vez.
No es que me guste...
Es como es...
Lo siento.
Yo te lo preparo.
¿ Qué fue ese jaleo?
Se ha ido.
¿ Adónde?
Se fue.
Es lo que querías.
¿ No?
Eres tú quien lo quería.
El barco sale en 2 horas.
Saldrás de ésta.
No podré sin ella.
- Voy a buscarla. - ¿ Qué dices?
No hagas eso.
¿ Tienes caballo?
Te lo devuelvo mañana, lo juro.
¿Porqué no pillas algo en el bar?
Perdí la llave.
¿ Y en tu casa?
Perdí mis cosas.
Me vuelvo loco.
Enróllate, tío.
Dame dos.
Tranquilízate.
No los tomes al mismo tiempo.
Los imbéciles creyeron que fue suicidio.
Se negaron a un enterramiento religioso.
Era invierno, y sin embargo el sol brillaba como en pleno verano.