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Nos encontramos en una misteriosa jungla en Costa de Marfil...
De esta salvaje estampa surge la alucinante cúpula de la basílica de Yanmosucro, réplica
del Vaticano, construida en solo tres años y terminada en 1989.
Esta obra faraónica fue obra de un devoto expresidente de Costa de Marfil, que dilapidó su fortuna y se la regaló al Vaticano.
Siete hectáreas del mejor mármol europeo... ¡Que no falte de nada!
Me pierdo entre cientos de columnas dóricas... (en concreto 127)
Este sacro complejo, sin complejos, cuenta con una réplica de la Plaza de San Pedro,
con columnata de Bernini incluida.
Dada su exótica ubicación, no me extraña que esté vacío, ya que la gente por aquí
tiene otras respetables creencias...
En este dibujo vemos comparado el original con la réplica.
Y pensar que caben unas 7000 personas sentadas... ¡Y cada banco con sus altavoces y su aire
acondicionado! ¡Qué derroche!...
Siete mil cuatrocientos metros cuadrados de vidrieras... todo luz y color.
Una de estas enormes vidrieras muestra la llegada de Cristo a Jerusalén, y arrodillado
junto al asno, tenemos al devoto expresidente. Alguna licencia tenía que tomarse...
Bajo el baldaquino hay una cruz de 50 Kg., de oro macizo... no resulta muy coherente
teniendo en cuenta que Jesucristo fue pobre, tan pobre como la mayoría de los habitantes
de este continente...
Aturdida por este insólito "lujo africano" huyo a ambientes más "espartanos"