Historias de Facebook : más allá del barco amarillo

Layag Layag, Filipinas Fue uno de mis amigos quien encontró esta comunidad de cultivadores de algas marinas en una zona de manglares a 800 kilómetros al sur de Manila, donde los niños tenían que nadar para ir al colegio. Esa historia me conmovió. Así que actualicé mi estado en Facebook [¡¡¡Wow..unos niños nadan 2 km para ir al colegio!!!] y uno de mis amigos me desafió [¿Qué vas a hacer tú?]. Me hizo pensar que debíamos hacer algo por ellos. Así que creamos una pequeña empresa para recaudar fondos [Yellow Boat of Hope Foundation] y juntamos suficiente dinero para comprarles una barca. Pero no nos percatamos de una cosa: por la tarde, cuando baja la marea, una barca es un tanto inútil. No puedes llegar y darles lo que tú crees que necesitan; tienes que averiguar cuáles son sus necesidades reales. Es un proceso de aprendizaje, y se está convirtiendo en una especie de relación. Las redes sociales nos ayudan a conectarnos con lugares que se enfrentan a desafíos que no conocíamos. Ahora nos planteamos ayudarles de un modo más integral ayudando a los jóvenes que acaban el instituto a conseguir becas del State College of Marine Science and Technology para salir de la pobreza y mejorar la calidad de vida en la comunidad. Al construirles una barca, no nos dimos cuenta de que se crearía un efecto dominó para entendernos unos a otros y construir una relación con ellos. Jay Jaboneta Encontró su objetivo con una actualización de estado Historias