Tip:
Highlight text to annotate it
X
Cuando era niña en Nueva Jersey
soñaba con tener un pasaporte a todas partes.
Esa era mi concepción de la oportunidad
de ver tierras nuevas y conocer gente nueva
y comprender especialmente a los extremos,
los extremos de muchas cosas, para poder
entender donde se situaba todo lo demás.
Conseguí mi pasaporte como corresponsal en el extranjero
para las cadenas televisivas ABC News y Bloomberg Television.
Eso me ha llevado a ver la vida en la República Islámica.
Me ha llevado a la caza de piratas en la costa de Somalia.
Me ha llevado al corazón de la revolución.
en la Plaza de Tahrir.
Y como dijo Garman, a donde quiera que vaya
trato de tomar instantáneas culturales.
Para los informes de prensa, pero también para mí misma,
Y los anoto en un cuaderno como este.
Este me ha acompañado desde Londres hasta Katmandú.
Y esto es un trozo de lo que hay adentro.
En el medio dice جعل أحلامك الحقيقية O sea, "Has tus sueños realidad".
Es parte de un anuncio de hipoteca en Túnez.
Y esta a la derecha, "Ridha Allah Al-Walidain"
lo escribió mi amiga Sulaf en Jordania
en memoria de su padre.
Es un concepto árabe musulmán del karma especial que recibes,
una bendición de los padres,
que se transmite de la madre o del padre al niño.
Un colega de Turquía escribió esto:
"Deliye hergun bayram". "Si estás loco, todos los días son un banquete".
En otras palabras, si eres lo suficientemente loco,
puedes obtener todo lo que quieres.
Eso es árabe. لاندفاع يأتي من الشيطان.
"Lo que viene demasiado de prisa, probablemente viene del diablo".
Este parece un trabalenguas: "Partzratzeer Partzratzoor".
Levántate y trae a otros contigo.
Y a continuación:
"Voneh jeeshtek, voruh perceeh an guh leenee".
Cree que lo que es verdad y lo que está bien al final funcionará.
Eso lo aprendí de nuestra organizadora aquí en TEDx, Kristine.
Y la última: "Satyameva Jayate".
Es un proverbio indio:
"La verdad debe ganar, da igual quién pierde".
Así que viajando alrededor del mundo rellenas un montón de cuadernos,
y aprendes mucho y el simple hecho
de hacer periodismo, te ayuda a crecer
te da lecciones para la vida,
y estoy tan agradecida a todos por ellas
que quiero compartir algunas hoy con Uds.
Aquí están estas cinco cosas que he aprendido
como corresponsal en el extranjero que Uds. también pueden aprovechar.
Primero: la percepción puede contar tanto como la intención.
No vale sólo lo que te propones, es lo que proyectas también
lo que puede provocarte problemas, o solucionarlos.
Esto lo aprendí mientras viajaba a Arabia Saudí.
Aterricé en el medio de la noche,
me dirigía a Riad por mi cuenta,
y me di cuenta de que, debido a mi aspecto
tenía que ser muy cuidadosa.
Si eres una mujer occidental y pareces extranjera en Arabia Saudí
la mayoría de la gente no se mete contigo.
A causa de mis rasgos oscuros tengo esta mezcla
de cara oriental con actitud occidental.
Y tenía que estar al tanto de cómo podría ser interpretada.
Tenía que ser consciente de la situación.
Tenía que hablar un poco más bajo o mantener un perfil bajo.
Y se me ocurrió rebajar un poco
el tono de mí misma
para asegurarme de que todo iba bien.
Segundo: El miedo se magnifica con la distancia.
Cuanto más lejos estés de algo,
más aterrador te parece.
Aprendí esto mientras estaba de viaje por el Líbano,
un país que se suele encontrar al borde de una guerra civil.
Todo está tranquilo, y, luego, de repente
hay un atentado en Beirut o un tiroteo en la frontera.
Y todos los días hay grupos que se atacan y van armados hasta los dientes.
Visto desde lejos puede dar bastante miedo,
especialmente cuando se trata precisamente de esta gran burbuja de miedo,
el aeropuerto se cierra
y hay que volver conduciendo a Beirut.
Pero a medida que te acercas puedes localizar el miedo.
Averiguar lo que es real y lo que es una exageración.
Llamar a las personas que conocen el terreno.
Encontrar la manera de mantenerse a salvo.
Y, en general, tener una idea
del volumen objetivo, no del miedo subjetivo.
Eso se aplica para un montón de cosas en la vida.
En casa, en el trabajo, un montón de cosas que parecen amenazadoras
lo parecen más desde lejos,
porque el miedo se magnifica con la distancia.
Si te acercas, se puede tener una idea
de lo que es real y de lo que es una exageración.
Puedes localizar la amenaza,
y abordar lo que hace falta para mantenerse a salvo.
Tercero: No se trata de lo que sabes, o a quien conoces.
Es la forma en que trabajes. Cuán ardua e inteligentemente trabajes.
La vida, como el periodismo, no es una meritocracia perfecta,
pero el esfuerzo cuenta.
Cuando empecé en lo audiovisual, en Nueva York,
A menudo oía a la gente decir
"Lo que cuenta es a quién conoces, no qué sabes hacer".
Y yo no lo podía creer porque no conocía a nadie.
Mis padres eran inmigrantes, todos empezamos desde cero.
Y yo tenía que creer que eso no era cierto.
Entonces, un productor amigo mío, David Katz,
en un momento milagroso de la conversación se volvió hacia mí y me dijo:
"Lara, no se trata de lo que sepas o a quién conozcas,
sino de cómo lo hagas. Si trabajas arduamente, o lo haces bien".
Porque si lo haces bien, aprenderás lo que necesitas saber.
Y te encontrarás con quien debas por el camino.
En Oriente Medio hay una palabra para todos los contactos,
todos los beneficios que se obtiene al conocer a las personas adecuadas
y al ser capaz de tirar de los hilos.
La palabra es "wasta".
Esto se usa mucho.
¿Cómo obtuvo ese tipo una visa? Wasta.
¿Cómo entró esa chica en la universidad? Wasta.
¿Cómo construyeron aquellos una fábrica en la playa? Wasta.
Todo el mundo lo odia, todo el mundo lo quiere.
Pero la verdad es que si trabajas duro y trabajas de manera inteligente
puedes construir tu red, trabajar en tu wasta,
usarla, para bien y no para mal.
Pero si se rinden
porque no nacieron en una "wastocracia"
se están dando por vencidos demasiado pronto.
Numero 4: Te pierdes 100 % de las fotos que no llegas a tomar,
y unas cuantas de las que sí.
Esto está tomado de Wayne Gretzky,
pero la idea es que tienes que acostumbrarte a la frustración
y salir de ella sin sufrir secuelas
cuando algo no funciona.
Tengo que recordarme esto cada vez
que trato de obtener una entrevista de alto perfil.
Yo quería entrevistar al presidente de Somalia.
Eso significaba hacer una solicitud, buscar a su gente
contactar a los que conocían a su gente
llegar al Cuerno de África, con cámaras
y luego sentarse a esperar.
Y cuando estás a medio camino de lograrlo
y no estás seguro de que vaya a funcionar.
te puede resultar muy duro.
Y puedes sentirte mucho peor si, de verdad, no sale.
Aquella vez me salió mal. Pero otras veces no es así.
Y la clave está en recuperarse.
Tratar las victorias igual que las derrotas.
Sólo imaginarte que consigues eliminar
algunos malos ratos por el camino.
No se puede renunciar y no puedes dejar de intentarlo
Y número 5, mi favorito: La gente es mejor de lo que piensas.
No son ángeles, no son perfectos,
pero son mejores de lo que piensas.
Y eso es porque la mayoría de las veces
intentamos llenar los espacios en blanco
de lo que no sabemos con lo negativo.
Todos los que estamos sentados aquí en la sala
podemos fijarnos en alguien que va bien vestido
y suponer que es un esnob,
o ver a alguien que está súper ocupado
y suponer que está obsesionado,
porque llenamos los espacios con un prejuicio,
cuando no tenemos por qué hacerlo.
Durante décadas, en el Egipto dominado por Hosni Mubarak,
la minoría copta y la mayoría musulmana
estaban enfrentadas.
Había mucha desconfianza, mucha violencia,
atentados con bombas, tiroteos y quien fuese
responsable de aquello, quien estuvo detrás
estuvo arrojando un velo de desconfianza
y prejuicios negativos
sobre esas dos comunidades.
Luego, llegaron los momentos más bellos de la revolución
de la plaza Tahrir: estaban muy cerca unos de otros.
Había cristianos rodeando la plaza,
protegiendo el casco urbano,
y los musulmanes se postraban en oración.
Y luego, en la misa del domingo fue al revés.
Los musulmanes protegían el casco urbano,
mientras que los cristianos se inclinaban en oración.
Una vez que estuvieron cerca y en el mismo lado,
dejaron de tener esos prejuicios.
La palabra para el optimismo, en armenio
es "lavades": el vidente del bien.
Busca lo bueno en las personas,
por tu bien y por el de ellos.
No estoy diciendo que seamos ingenuos.
No estoy diciendo que no tengamos cuidado.
Sólo estoy diciendo que no tiene sentido
ver oscuridad y sombras cuando no tienes que hacerlo.
Sobre todo cuando no estén allí.
Así que en conclusión, ¿cómo interpreto yo la realidad?
¿Llevar la verdad a la pantalla o al menos intentarlo?
Absorbiendo todo lo que pueda de las personas
y los lugares que me rodean
y luego haciendo todo lo que pueda para transmitir su esencia.
Y esto se logra flexibilizando
la empatía, la sinceridad, la actividad, la humildad y el respeto.
Sabiendo cuándo pedir ayuda,
si uno está abrumado;
y cómo pedir ayuda con gracia y gratitud
y con la voluntad de reconocer que estabas equivocado.
Eso es lo que he aprendido en mi trabajo.
Lo aprendí de la vida
y me ha enriquecido.
Gracias.
(Aplausos)