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Cristo Rey-confio en vos. Uno dos...uno dos.
Jesucristo es un rey.
Los judios no esperaban un hippie o alguien que sea su compadre o compinche.
Esperaban a un Rey que viniera a gobernar las naciones y a establecer
la paz y la justicia sobre la tierra. Cuando nació los tres Reyes Magos - los tres sabios - vinieron a buscarlo,
esperando encontrar al Rey de los Judíos. Cuando estuvo ante Poncio Pilato dijo "tienes razón,
al decir que yo soy un Rey". Cuando comenzó su ministerio anunciaba
que el Reino de los Cielos
estaba por llegar. Hablaba del juicio final donde El se iba a sentar
en la cumbre del mundo, sobre todas las naciones y los juzgaría en su carácter de Rey. Cuando estaba colgado en la cruz,
el cartel sobre su cabeza anunciaba: "Rey de los Judíos". Luego, el buen ladrón a Su lado, le dijo, "Jesús,
acuérdate de mí cuando entres a tu Reino." Y le contestó "Te aseguro que hoy mismo estarás conmigo en el Paraíso".
Pero El no era como cualquier otro rey. No nació en un palacio, nació en un pesebre.
Vivió su vida entera en la pobreza. En lugar de tratar de adquirir más y más riquezas y poder, los rechazaba
cada vez que podía. No se ponía una corona de oro, se le impuso una corona hecha de espinas. Fue elevado por encima del mundo,
pero fue en una cruz, bendiciendo y perdonando a los que le mataron. Pero no lo duden,
Él es un rey. Y un rey tiene un reino y su reino tiene límites. Nos invita a aceptar su reinado sobre nuestras mentes,
y corazones, y voluntades, y vidas. Mira, tener un rey significa
que tu no eres el rey. Yo no soy el rey. Significa que no hacemos la religión en nuestros términos, pero en Sus términos.
No podemos ser Católicos "a la Carta", que escogen y eligen las doctrinas a seguir, que escogen y eligen los mandamientos que les combiene y "‚ y desechan el resto.
Nosotros no establecemos los términos de nuestra fé, los recibimos. Jesucristo es el Rey. El hecho de ser Rey
significa que reina sobre nuestros corazones y mentes, significa
que nuestra fe tiene efectos sobre nuestras vidas que se expanden mucho más allá de lo que sucede en una banca dentro de la iglesia
todos los domingos. El hecho de que Él sea mi Rey significa que yo tengo un llamado a servirle.
Lavó los pies de sus apóstoles y les dijo: "llámame Señor y Maestro. Mira lo que estoy haciendo.
Si que me llamas Señor y Maestro, esta es la manera como debes servir a los demás. Mira, yo sé que la idea de
tener un Rey puede ser intimidante. De hecho los reinos de este mundo han pasado de moda porque muchos reyes han violado la libertad de las personas
al establecer sus propios reinos y su propio poder. Pero Jesús es no como ningún otro rey. Es un Rey que garantiza
nuestra libertad. Este es un Rey que nos hace libres del pecado,
libres del egoísmo, libres hasta de la muerte, libres del reinado de este mundo. He aquí un Rey
que nos invita no sólo a ser Sus súbditos,
sino que también nos asciende y nos hace herederos,
herederos de mucho más que de reinos de ladrillo y cemento. Jesucristo es un Rey.
ES EL TU REY?