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Esquivando polémicas, superando escepticismos y abriéndose paso a golpes de espada así
llega el nuevo Devil May Cry un título desarrollado lejos de oriente por un equipo británico
esto ha despertado desconfianza ya desde su anuncio, pero hecho no en ***ón Devil May
Cry es un excelente videojuego desata la furia del nuevo Dante que promete hacerte fan del
género Hack and Slash.
Un muy divertido juego de acción que conserva todos los elementos clave de la franquicia.
Dante ha cambiado de aspecto, sí, pero sigue siendo ese cazador de demonios con modales
de estrella del rock y destaca por su espíritu inconforme. Él es el protagonista de un producto
agradable, frenético y muy entretenido; uno que no nos deja ni un minuto de descanso,
y que es exactamente el tipo de divertidísima descarga de adrenalina que esperábamos.
Sigue conservando todo su carisma que le ha caracterizado más de una década. La belleza
de la lucha en Devil May Cry vuelve a quedar patente con sólo echar un vistazo a la pantalla
cuando se está disfrutando de él, y cualquier observador puede quedar fácilmente cautivado
por los elegantes movimientos de Dante y por su incomparable agilidad también en PC. Las
acciones a sus mandos son sencillas en apariencia, pero cuentan también con una profundidad
favorable que es la principal responsable de que el juego no caiga en ningún momento
en las siempre tediosas rutinas. Recomendamos como casi en estos casos conectar un pad a
nuestro ordenador para disfrutar del juego ya que el combo de ratón-teclado no acaba
de resultarte cómodo o intuitivo como en el mando que es mucho más efectivo, otra
cosa, si golpeas los controles sin pensar en lo que estás haciendo estás perdido.
Puede que te sirva en el nivel de dificultad más bajo, pero ya en el intermedio es una
sentencia y no queremos ni hablar de lo que supone en los retos más altos.