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Simon Con mejor control con su bomba desde 2004
Reduciendo las hipoglucemias en la diabetes tipo 1
Para empezar, me impresioné mucho con el diagnóstico.
No sabes qué es lo que va a suceder,
no sabes ni lo que realmente es la diabetes.
Justo había comenzado a patinar
y, la verdad, es que tenía muchas ganas de seguir haciéndolo.
Pero no estaba seguro si podría hacerlo,
o, hasta qué punto podría seguir haciéndolo.
Lo más difícil
que he experimentado hasta ahora fue debido a las hipos
cuando ya trabajaba en el hospital,
al principio de mi primer año en prácticas.
Fui a hacer ciclismo durante un par de horas,
más tarde cené, como normalmente lo hacía,
y desafortunadamente, justo después de haber cenado,
me sentí mal y comencé a vomitar.
Ya tenía la insulina dentro de mi cuerpo
y estaba vomitando la comida.
Por lo que, esta insulina, siguió haciendo efecto.
La reposición del glucógeno almacenado en mis músculos tras haber hecho ciclismo
agotó mi glucosa en sangre.
En poco tiempo tenía niveles por debajo de los 50 (mg/dL).
Aunque había bebido medio litro de Coca Cola
y comido dextrosa (azúcar)
mis niveles de glucosa continuaban cayendo
Lamentablemente, dos o tres colegas
me tuvieron que llevar a Urgencias en el hospital donde trabajaba
para que me atendieran.
Esa fue la primera vez que
no supe lidiar con la bajada de mis niveles de glucosa.
Fue un sentimiento extraño, no tener ya el control sobre mis niveles
el no poder controlar lo que hacía.
Ahora que lo pienso, tuve suerte de que no fuera algo más grave.
Comencé con la bomba de insulina
dos años después de haber sido diagnosticado.
Me empezó a resultar muy difícil compaginar las múltiples dosis,
el deporte, el patinaje, las competiciones,
y el poder controlarme correctamente
para poder rendir de la mejor manera posible.
Por lo que decidí intentarlo con la bomba;
interfirió muy poco con mi vida diaria
y me funcionó muy bien mientras practicaba deporte,
decidí quedarme con ella permanentemente.
Lo mejor de una bomba de insulina es que,
con la ayuda de la propia bomba,
no tengo que amoldar mi vida a mi diabetes,
todo lo contrario, puedo controlar la diabetes de manera que esto no limite mi vida.
Y esto ha sido lo mejor que me ha pasado.