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Quiero agradecer muy especialmente a Miguel, porque el campus Veracruz - Boca del Río
ha sido para el Centro de Estudios China-Veracruz y para las actividades de desarrollo de la Universidad en China,
un factor esencial.
La participación a través de Liliana, Miguel, en todo el proceso que venimos desarrollando en China
ha sido de agradecer, de destacar y de ponderar respecto al resto de toda la Universidad.
Así que muchas gracias, Miguel, por tus palabras.
Muchas gracias a todos los estudiantes del campus Veracruz - Boca del Río,
cada vez que venimos nos encontramos en un espacio en donde es característica la presencia de muchos académicos y estudiantes,
inquietos e interesados por el tema,
y esto se refleja en todas las actividades que el Centro y la Universidad vienen desarrollando.
En primer lugar, quería destacar qué es lo que está pasando con el papel o el trabajo que la Universidad Veracruzana
viene haciendo respecto a China.
Nosotros decimos que China es un factor clave en el proceso económico y social actual,
y que es la Universidad Veracruzana una de las pocas universidades de América Latina que ha sabido encarar
este proceso, este fenómeno con mucha solvencia.
Por eso es que podemos afirmar que para América Latina, en este momento,
la Universidad Veracruzana es una de las universidades líderes del continente en materia de
relacionamiento académico con este espacio inmenso que es la República Popular China y sus instituciones académicas.
Y, ¿por qué tiene tanta importancia este acercamiento con China?
Cuando hablamos del mundo académico de China, luego vamos a hablar de otros aspectos de orden económico y social...
Cuando hablamos del mundo académico de China estamos platicando no solamente sobre un espacio
en el cual se desarrollan alrededor de 2.000 universidades en distintos campos del conocimiento.
China, además, representa una perspectiva absolutamente diferente, como experiencia social,
respecto al resto de nuestros países más conocidos, cercanos o que denominamos "del mundo occidental".
China tiene otra concepción respecto al tiempo, al ser, a las artes, a la arquitectura, a la medicina, al paisajismo,
por supuesto también al desarrollo científico tecnológico,
y esto implica que intercambiar con ellos abre caminos muy diferentes a los hasta ahora conocidos por nosotros en todos los campos.
Por lo tanto, al relacionarnos con China no solamente nos estamos relacionando con uno de los espacios
de construcción universitaria y científico-tecnológica más importantes del mundo,
sino también más diverso respecto a nuestro mundo conocido.
De ahí por qué señalamos la importancia de esta relación con China.
Queremos, brevemente, mencionar lo que está sucediendo con la educación universitaria en China.
Observen que de los 2,28 millones de estudiantes que había matriculados por 1978,
ahora la cifra está en el orden de los 29 millones; es decir, un crecimiento exponencial
que acompaña, además, el crecimiento que está teniendo el conjunto de la actividad económica de ese país.
Aquí estamos viendo, ya por matriculación anual,
la otra imagen mostraba el acumulado,
qué es lo que está sucediendo con la expansión del sistema universitario en ese país.
Y de ahí también la importancia para nosotros de tener esta posición tan interesante como interlocutores válidos
de México y de América Latina con este inmenso mundo académico que representa China.
Actualmente, y perdonen que me detenga un instante en la actividad específica como Universidad,
tenemos vigentes algunos convenios con universidades muy importantes, quiero destacar dos o tres solamente.
En primer lugar, con la Universidad del Pueblo de China,
que es una universidad de gran prestigio con la cual estamos tratando de implementar un seminario e intercambios estudiantiles.
En segundo lugar, con el Instituto de Relaciones Internacionales Contemporáneas de China,
que es uno de los núcleos de los intelectuales y funcionarios que diseñan la política exterior de China para América Latina.
Con ellos estamos desarrollando un seminario anual.
También quiero destacar el convenio con la Universidad de Estudios Internacionales de Beijing,
en donde todos los años estamos dictando un curso con participación de académicos
de esa universidad y de nuestra universidad, en la ciudad de Beijing, que luego veremos más en detalle.
Y con la Universidad de Ciencia y Tecnología de Chongqing,
con la que también hicimos un acuerdo muy importante, que después desarrollaremos, sobre
la creación del Centro de Estudios "Sergio Pitol",
con quien estamos desarrollando la posibilidad de dictar una licenciatura en idioma español de doble titulación
con maestros y programas de nuestra universidad en la ciudad de Chongqing.
La creación del Centro de Estudios sobre México y América Latina "Sergio Pitol"
es la creación del primer centro de México en China,
se propone intercambiar con los técnicos, académicos, miembros del sector público de China,
nuestras experiencias, nuestras ideas sobre cómo debe configurarse esta relación,
y no sólo en el plano académico, también en los aspectos sustantivos del comercio y de las relaciones diplomáticas.
Pero, ¿qué es China? ¿Por qué nos detenemos en China tan especialmente?
¿Por qué no hacemos un Centro sobre Suiza o sobre Bélgica, que seria pertinente también?
Pero quiero decirles, en este momento la importancia estratégica que tiene relacionarse con China
trasciende a ese ámbito académico del que hablamos recién,
y se inscribe en una necesidad de diseñar estrategias para abordar la relación con el área del mundo que incluye especialmente a China,
pero que contiene también a la India, ***ón, Corea, y todo el sureste asiático,
el gran polo económico del mundo, el gran motor actual y en las décadas futuras de la economía mundial.
Este país que tiene una superficie similar a la de Estados Unidos, 9.600.000 km2,
aunque aquí no vamos a detenernos en estos temas, limita con 14 naciones,
muchas de las cuales están en este momento ocupando un lugar preponderante en la economía mundial.
Estamos aquí además en presencia de casi la mitad de la humanidad acumulada en términos demográficos.
Pero vean Ustedes un primer tema que debemos ya ir imaginando como nuestra oportunidad a futuro.
Las superficies que ven en color amarillo son las únicas áreas de China susceptibles de ser utilizadas para uso agrícola,
únicamente en las cuencas de los dos grandes ríos que ven aquí, el de arriba es el "río amarillo" o "Huang He",
y el de abajo el Yangtze o "río largo".
Estás son las dos grandes cuencas en torno a las cuales se desarrolla gran parte de la agricultura de China.
Un país con una población crecientemente demandante de productos,
con una topografía muy compleja, muy bella en algunas partes, pero muy difícil de aplicarse a la agricultura,
y, sobre todo, con una coexistencia de la población urbana ahí en dónde además están las tierras de aptitud agrícola.
Prácticamente cada metro de tierra agrícola está compitiendo con este acelerado proceso de urbanizacion en China
que en 1949 tenia una población urbana del 10%, con 600 millones de habitantes,
y ahora supera el 50% con 1.350 millones de habitantes.
Otra característica de China, también para ir registrando sobre todo quienes se van a interesar en hacer negocios con China,
es que China es un país plurinacional:
hay 56 minorías nacionales con hábitos, estructuras institucionales,
y, en general, prácticas totalmente diferentes unas a las otras.
Por lo tanto, cuando nosotros veamos oportunidades, más que mirar a China,
vamos a tener que estar mirando a una región, a una cultura,
porque China sería inabordable con cualquier volumen de oferta que podamos producir.
No es posible encarar el mercado chino como un todo, como algo homogéneo.
Aquí expongo cuatro grandes rasgos de la historia de China.
Estamos hablando de una sociedad con una experiencia social de 5.000 años,
con instituciones consolidadas desde mucho tiempo atrás,
poco podríamos hacer al ponernos a describir paso a paso cada evento de su rica historia, poco podríamos indicar más que una serie de nombres y hechos puntuales.
Por eso solo señalo cuatro grandes etapas:
Todo lo que es el mundo dinástico, incluyendo en él a partir del año 221 a.C. lo que es el periodo imperial propiamente,
hasta la caída de la dinastía de los Qing, en 1911-1912 , es lo que se conoce como el antiguo régimen chino.
1911-1912 marca la caída de la última dinastía de los Qing y la aparición de la primera república China,
que por muchas características, debilidades y contradicciones no puede consolidarse,
además de procesos de interferencia externa,
hasta que en 1949, postguerra mediante o Segunda Guerra Mundial mediante,
triunfa la revolución, se consolida la República Popular China.
Este es un periodo que tiene muchas etapas también,
que aquí estamos dejando de lado a los efectos de no detenernos demasiado,
pero que, y es muy interesante, en 1978 tiene un giro, un cambio, de situación, motivado por lo que se llamó "el proceso de modernización".
Bueno, la proyección que hace CEPAL a través del Fondo Monetario,
es que estamos a unos años, y probablemente todavía se corra un poquito esto,
de que China se convierta en el principal producto bruto por poder de compra del mundo.
Cuando nosotros empezamos con el centro, una breve referencia,
hicimos un video y pusimos: "China hoy es la séptima economía del mundo".
Al rato tuvimos que poner que es la cuarta, y ahora ya no ponemos nada,
porque en realidad es tan acelerado el proceso que en dos o tres años,
todo lo que se pueda decir al respecto queda como antiguo, o fuera de contexto.
Ahora bien, la pregunta es: ¿Este es un proceso imitable?
Por supuesto que no.
Cada país o cada región tiene su experiencia social, su historia, sus instituciones,
la construcción de esa experiencia social va a ir determinando también caminos,
obviamente que no podemos nosotros hablar de imitaciones,
pero sí es interesante ver procesos que, en algunos aspectos,
pueden ser útiles para mostrarnos algunos elementos que constituyen nuestras políticas macroeconómicas.
En este sentido, siempre he dicho que ha habido toda una propaganda, digamos, de los economistas neoliberales,
de que en realidad lo de China fue porque China se liberalizó, porque China siguió las "recetas" del Fondo Monetario, etc.
Y no es nada más lejos que eso.
Primera cuestión, China jamás ha renunciado al papel rector del Estado.
El mercado es fundamental en China por historia, porque los ancestrales mercados chinos
han sido característicos de la China de los siglos XVI, XVII, XVIII, XIX.
Yo explico muchas veces que Adam Smith, cuando pone en "La riqueza de las naciones" como ejemplo del desarrollo de un mercado,
pone a China, no pone a ningún otro lugar. Ese es el mercado, para él, modelo o laboratorio de su teoría.
Pero porque China realmente tenía mercados altamente desarrollados en esa época;
y es cierto que durante el proceso, primero de la revolución,
la imitación del modelo estalinista tan cercano y en esa época exitoso,
los llevó a ellos al proceso de colectivización.
Pero en esencia, la estructura, el funcionamiento de la sociedad china, siempre funcionó con mercados,
pero, siempre el Estado fue un Estado rector, y los mercados no fueron simplemente lo que tradicionalmente vemos,
mercados de oferta, demanda, etcétera
Las formas de mercado que existen históricamente no solamente en China, sino en gran parte de las culturas antiguas,
no tienen mucho que ver con los modelos teóricos que aprendemos.
Entonces, cuando los economistas neoliberales dicen: "China asumió el camino neoliberal", no es cierto.
Y, nosotros, aquí, queremos reflexionar con Ustedes sobre tres grandes lineamientos estratégicos que condujeron al proceso de modernización en China.
El proceso de modernización abarca otros sectores, no vale la pena entrar en esto hoy, pero sí en los tres principales lineamientos.
Primero, participación social.
Y cuando hablamos de participación social, es especialmente del sector campesino,
porque fueron los campesinos quienes platicaron y exigieron al Estado
que se retornara a esas políticas de esos antiguos mercados chinos,
para que todos los excedentes por encima del producto que se utilizaba para alimentar a la población asalariada, digamos,
fueran comercializados por los productores.
China en 1960-1962 tuvo una hambruna muy importante,
murieron millones de personas por escasez de alimentos.
Cuando comienza el proceso de modernización y a partir de esta participación masiva del sector campesino,
en 1985 China se convierte ya en el principal productor de cereales de la Tierra.
Desaparece la inseguridad alimentarias por la vía de recuperar esa historia que tenían,
pero sobre todo por la extraordinaria participación del pueblo, de los trabajadores agrícolas, en este proceso.
Por eso es que en este cuadro, en donde están viendo la participación de cada sector en la economía,
ven que entre 1978, aproximadamente, y hasta 1985, en la gráfica se ve en color celeste,
el sector agrícola crece en su participación.
La suma de los 3 es el 100%.
Está el sector industrial, el sector servicios y el sector agrícola.
Crece la participación y son los excedentes del sector agrícola los primeros,
no solamente que generan tasa de crecimiento del 10%,
son los primeros que se vuelcan, inclusive, a la actividad industrial.
Cuando andan por la campiña de China, de pronto en medio de los campos se encuentran con una fábrica.
Han sido procesos de acumulación que se han gestado en el sector agrícola y que se han volcado en la industrialización.
El gran motor, el gran elemento dinamico en la primera etapa de modernización de China fue el sector agrícola y la participación social.
El segundo gran elemento fue la descentralización de las decisiones a nivel de las fábricas estatales;
los cuerpos gerenciales empezaron a poder definir sus planes de expansión, sus planes de racionalización de las empresas,
pudieron empezar a utilizar los excedentes que generaban, que normalmente se iban por otros destinos,
y, junto con la industria generada por los excedentes agrarios y la industria generada por una mayor eficiencia,
permitieron que entonces también el sector industrial comenzara a levantarse.
Vean Ustedes, para que esto sucediera también tenemos que entender el contexto geopolítico,
porque todos podrían decir: Bueno, ¿y por qué no se hizo antes?
Bueno, no. Durante la Guerra Fría, en las primeras etapas del régimen maoista,
en conflicto con Estados Unidos y con la Unión Soviética,
ellos ponían las fábricas en los lugares más difíciles de ser atacados o menos vulnerables,
y no donde económicamente era más racional ponerlos.
Todo esto se modifica a partir de 1972, lentamente, con el acuerdo entre Mao Zedong y Richard Nixon,
la famosa "diplomacia del tenis de mesa" que Ustedes conocen.
Entonces, tenemos dos elementos fundamentales: participación social y descentralización;
el tercer factor decisivo en este proceso es un desarrollo científico y tecnológico autónomo.
China definió, a través de sus universidades, sus institutos, sus organismos, digamos, sus mecanismos Estatales,
cómo debía ser un modelo científico-tecnológico al servicio de la sociedad,
para la construcción, digamos, de alternativas, no solamente de orden productivo sino también en términos de la vida de las personas en sus muy diversos papeles.
El desarrollo científico-tecnológico autónomo, por lo tanto, es el tercer gran elemento estratégico de este proceso de modernización.
Por eso es que, cuando se habla de, como en general el modelo neoliberal habla, de que en China en realidad
entraron las empresas transnacionales y le cambiaron la vida a las personas.
Esto es bien contundente.
El proceso de modernización empieza en 1978.
Desde ese periodo y hasta cuando empiezan a ingresar las empresas transnacionales en forma significativa,
han pasado 12 años donde China ha crecido al 10%, donde China ha desarrollado su ciencia y tecnología autónoma,
donde China ha iniciado su proceso de urbanización, donde China tiene en pie su agricultura y su industria,
y entonces las empresas transnacionales, como es normal y lógico,
ingresan cuando ven que están en una situación de ingresar a un mercado altamente positivo para su rentabilidad.
Y por supuesto que traen mucha ciencia y tecnología, pero esa ciencia y tecnología está al servicio de los procesos de acumulación específicos de cada empresa,
lo cual también es normal y lógico.
Está en el papel del Estado ver qué empresa entra, cómo entra, bajo qué condiciones entra,
pero lo que quiero decir es, que explicar el proceso de crecimiento y modernización en China no debe ser al revés,
no es porque entraron las empresas trasnacionales, las empresas trasnacionales ingresan cuando China está de pie,
cuando ha desarrollado su sistema científico-tecnológico, insisto, y cuando los sectores básicos de la economía están funcionando eficientemente.
Llegamos al día prácticamente de hoy.
En términos más globales, ¿qué es lo que ha sucedido entonces?
Si nosotros analizamos el sistema mundo, su historia más conocida,
de aquellos antiguos dominios de las grandes ciudades comerciales, Génova, Venecia, y luego Flandes,
durante el siglo XIX Europa, y sobre todo Gran Bretaña, se consolidan como la gran potencia mundial.
La época de la revolución industrial, la época en donde se diseña un mercado mundial,
a partir del cual Inglaterra es el taller del mundo, y nosotros, por ejemplo América Latina,
somos proveedores de materias primas a ese taller, y luego, por supuesto, a Francia, Alemania y Estados Unidos.
Especialmente al final de la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos se convierte en la potencia hegemónica,
es Estados Unidos el que dicta las normas en los acuerdos de Bretton Woods,
que definen prácticamente todo lo que ha sido la política económica que han seguido nuestros países en los últimos 50 o 60 años.
El eje del poder económico por el Atlántico se desplazó a Estados Unidos desde Europa,
y por el Pacífico se está desplazando hacia el sudeste Asiático en manera acelerada.
Entonces, ésta es una perspectiva global que no debemos perder.
Y quiero decirles más, no busquemos misterios, en realidad lo que ha pasado, en cada etapa,
es que cada región ha sido más competitiva respecto a la anterior hegemónica,
porque en algún momento Estados Unidos tuvo una productividad que arrasó con Europa,
desde el punto de vista de competitividad, de producción industrial, de bienes y de servicios.
Y ahora, en realidad el sudeste asiático el gran mérito que tiene es la capacidad de generar productos,
no los que recibimos nosotros de Tepito, hay que ver lo que es realmente la alta tecnología que tienen los productos del sudeste asiático,
incluyendo China,
a precios o a niveles competitivos muy inferiores y que no responden exclusivamente,
como también suele ser un cliché, a que los salarios son bajos.
Hay múltiples explicaciones.
Es más, si analizamos la evolución de los salarios chinos en los últimos cinco años,
respecto a nuestros salarios en Latinoamérica, están creciendo muchísimo más.
Competitividad son muchas cosas, pero sobre todo el diseño de una estrategia, como les decía,
en donde se ponen en pie los pilares fundamentales de una nación.
Hay una diferencia que quiero dejar marcada aquí, porque esto es muy importante por lo que está sucediendo en México.
Vean Ustedes el intercambio comercial entre China y Sudamérica es un intercambio equilibrado en números, no en contenido.
América del Sur exporta muchas materias primas, exporta muchos productos industriales,
pero la balanza comercial está bastante equilibrada.
En cambio, con México y América Central pasa algo diferente.
Tenemos un gran déficit, y ese gran déficit obedece a que tenemos un sesgo exportador que es nuestro vecino del norte,
y está bien, no decimos que haya que cambiar nada de eso, en buena hora si podemos vender más a Estados Unidos,
pero quiero decir, nuestras economías de América Central y de México se han convertido prácticamente
absolutamente dependientes de los ciclos, de las demandas, de las necesidades económicas de los Estados Unidos.
Entonces, en lo que sí tenemos que poner un punto de atención es que tenemos que diversificar,
porque el superávit que tiene México respecto a Estados Unidos se convierte en el déficit que hay respecto a China,
en el déficit que hay respecto a ***ón, o a Corea.
Pero si toman las estadísticas de México respecto al sureste asiático,
el superávit en Estados Unidos se traduce en el déficit hacia estas regiones.
Tenemos que aumentar la oferta, pero también tenemos que diversificar nuestros potenciales compradores.
Sobre todo pensando en estos elementos que están a la vuelta de la esquina,
no para mí que ya estoy más viejo, pero para todos Ustedes a la vuelta de la esquina.
Imaginen 2030, no les queda tanto.
Estamos ahorita con que las clases medias de Asia y Oceanía están alrededor del 30% de todo el mundo,
y está proyectado que para el 2030, el 65% de las clases medias del mundo van a ser asiáticas.
Lo que implica en términos de la transformación total del mapa de consumo mundial,
porque como saben las clases medias urbanas son las grandes consumidoras,
por lo menos de gran parte de los bienes que estamos nosotros, en Veracruz y en México, en condiciones de producir ventajosamente.
Este es un dato muy importante a considerar.
Veamos aquí un poco lo que está sucediendo con México.
Desde México se estaba exportando en 2001, 282 millones de dólares, nada prácticamente.
Ahora ya está casi en 6.000 millones, es decir, la tasa media anual,
a pesar de que cuando hablamos con los empresarios nos dicen que es muy difícil el comercio con China, etc.
A pesar de todo eso, el comercio de México con China crece a tasas muy importantes.
El problema que tenemos es lo que estamos vendiendo.
Si Ustedes ven y analizan lo que vendemos aquí,
lo primero que nos tenemos que preguntar es: ¿qué empresas pueden exportar esto? ¿Serán medianas, serán pequeñas?
Evidentemente no.
Es decir, el mercado que tenemos con China está conducido sólo por un grupo muy reducido de grandes empresas,
lo cual no es una crítica, pero estamos dejando fuera la posibilidad de exportar a China en forma significativa.
Por ejemplo, la agroindustria, los productos agroindustriales; Veracruz tiene un potencial gigantesco en ese tema.
Porque no se trata de vender tampoco grandes cantidades, sino muy alta calidad y buen precio,
porque el crecimiento de esas capas medias de las que veíamos o hablábamos recién, entre otras cosas,
implica que el poder de compra de los individuos cada vez demanda productos de más valor, más sofisticados.
Por eso es que esta reflexión sobre qué vendemos, nos lleva a esa otra, qué empresas venden, y esa nos lleva a esta otra,
y dónde estamos nosotros que tenemos toda esta oferta gigantesca para incorporar a ese mercado.
Aquí hay algunos datos sobre los acuerdos de negociación, promoción y protección recíproca que están vigentes,
que es el único sólido que tenemos, así como quienes son los grupos económicos,
que más que centrarse en la exportación han generado inversiones significativas en China.
Quienes vayan a Pekín ahora van a ver al osito de *** ahí dando vueltas,
y *** es una gran inversión, la primera panificadora de Beijing.
Contrató empresas que les dieran ideas de cómo entrar al mercado,
y luego compraron fábricas "llave en mano", la fábrica "Pan Rico" de España,
y ahora son la panificadora en Beijing, no en China, pero en Beijing, la panificadora más importante que hay.
Y con los mismos sistemas de difusión y con otros vehículos,
al estilo de como llegan aquí a todos los barrios y a todos los lugares.
Es muy interesante la experiencia de ***.
En alguno de los cursos que hemos dado allí, el gerente para Asia-Pacífico de *** nos ha dado algunas pláticas
que revelan cuánto esfuerzo, en este caso individual de una empresa, hay puesto al servicio de un proyecto.
Y por supuesto Tamsa que tiene la fábrica de tubos de acero sin costura en Qingdao,
que hemos tenido la oportunidad de visitar,
es una fábrica hipermoderna.
Y las otras empresas más bien con grandes aparatos de exportación de sus productos, eso sí.
Entonces, aquí viene una reflexión que nosotros como universidad hicimos.
Evidentemente, las grandes empresas no tenemos nada qué mencionar, ni nos pueden enseñar mucho ellos a nosotros,
¿Por qué? Porque tienen recursos, recursos técnicos, para poder abordar el tema.
Pero ¿cómo hacemos para evitar que se acentúe la brecha entre estas grandes empresas exportadoras o inversoras de México respecto a las pequeñas y medianas empresas?
¿Cómo hacer para que estas medianas y pequeñas empresas primero se interesen por ese mercado y luego accedan con algunas posibilidades al mercado?
Este es uno de los trabajos que está haciendo la Universidad Veracruzana.
Sabemos que hay, y por eso lo planteamos aquí, restricciones zoosanitarias y fitosanitarias
que están establecidas, en realidad, como barreras no arancelarias, y que tenemos que romper eso,
pero para romper eso, como se hizo con la producción para la venta de cerdo,
los frigoríficos que están en esa producción hicieron lobby, se instalaron, y quebraron eso.
Tenemos que hacerlo con varios productos.
Uno de los más importantes del estado de Veracruz es la venta, por ejemplo, de cítricos frescos, que todavía no está destrabada.
Pero, en general, todas estas empresas que ven y, a futuro, son empresas que han viajado con nosotros,
han entablado negociaciones, en algunos casos habrán hecho o no negocios,
nosotros no le damos seguimiento a eso, salvo que el empresario nos diga que prefiere seguir caminando con nosotros.
Por ejemplo esta es una reunión que hicimos en la ciudad de Nanjing,
donde los empresarios veracruzanos tienen la oportunidad de mostrar sus productos,
hay algunos que van también por interés de importar, o buscando un socio,
y presentar ahí, interactuar, a través de lo que nosotros generamos, con empresas de aquel país.
La embajada de México todos los años también nos prepara una ronda de negocios para todas las empresas que van.
Y también desarrollamos un curso en donde, entre otras cosas, tratamos de que quienes vayan entiendan que necesitamos conocer China,
¿para qué? Para que ellos nos conozcan a nosotros.
Necesitamos generar una masa crítica de académicos, de estudiantes, de empresarios, capaces de interactuar
con esa gran masa de poder económico y con esa enorme cultura que hay ahí.
Como digo, conocer China para que China conozca Veracruz.
Si nosotros no conocemos China, si no sabemos cómo presentarnos, si no sabemos cómo tratar en el mundo de los negocios,
si no conocemos básicamente sus pautas sociales, culturales, filosóficas,
es muy poco lo que podemos hacer.
Y ese es el gran papel que le cabe a la Universidad Veracruzana,
por eso es que hacemos esta presentación y damos las gracias por la presencia de Ustedes.