Tip:
Highlight text to annotate it
X
Hoy vamos a hacer Mizza (Meatza)
una receta italiana de pizza hecha con una base de carne picada.
Empezamos calentando el horno a 200 grados y preparando la base de la pizza.
Necesitaremos unos 400 gramos de carne picada,
que puede ser de ternera, de pollo
o como la que yo voy a usar,
una mezcla de pollo y pavo. Si alguna vez habéis hecho hamburguesas caseras o
albóndigas, veréis que vamos a preparar esta carne de una forma
muy similar.
Tenemos que condimentarla y para eso vamos a picar fino un diente de ajo,
lo añadimos a la carne...
Vamos a ponerle también unas ramitas de perejil fresco,
si no lo tenéis fresco, vale perejil seco ¿de acuerdo?
Lo picamos fino y lo añadimos a la carne. Lo siguiente que añadiremos será un
huevo, ligeramente batido,
estoy usando un huevo pequeño pero si preferís no usar yemas, poned la clara
de un huevo grande, unos 30 gramos de clara.
Por último, 2 cucharadas soperas de salvado de avena,
1 cucharada sopera de salvado de trigo
y un toque de especias.
Yo voy a usar estas: ya sabéis que tengo especial debilidad por el molinillo de
Toque Ibérico,
huele a jamón serrano.
Ahora vamos a mezclar todo y para eso lo mejor es usar las manos, por supuesto
muy limpias. No necesitamos amasar y amasar,
sólo lo justo para integrar todos los ingredientes.
Ya estamos listos para darle forma a la base de la Mizza.
Ponemos la carne sobre una bandeja de horno:
fijaos que estoy usando una lámina de silicona especial para horno, porque así
voy a poder estirar la carne sin necesidad de añadir ni harina
ni aceite.
Si no tenéis una lámina de silicona, no os preocupéis,
podeis usar papel de horno o incluso papel aluminio.
Usamos las manos para estirar la carne hasta tener una base circular de 26
a 28 centímetros de diámetro.
Esto es el tamaño de un plato llano, lleno hasta el borde.
Os podéis ayudar también con una cuchara, como estoy haciendo yo.
No queremos una base demasiado fina, pero tampoco demasiado gruesa. Esta medida de
26 a 28 centímetros de diámetro os dará a el grosor ideal.
Para que además de deliciosa, esta Mizza nos quede perfectamente acabada,
tenemos que rematar bien el borde de la base,
deslizando la cuchara y ayudándonos con la mano para darle forma.
Ya veréis que bonita queda una vez cocinada,
no olvidéis que también se come en los ojos.
Como véis queda como una hamburguesa gigante. Esta va
a ser la base de nuestra pizza.
La podéis cubrir con cualquier tipo de salsa: yo voy a hacer una salsa de
tomate triturado sin aceite
ni azúcar, que os voy a enseñar ahora. Para hacer esta salsa
voy a necesitar un colador de malla fina,
un bowl
y unos 400 gramos de tomate troceado en conserva.
¿Para qué necesito el colador?
para retirar todo el jugo que viene en la conserva y dejar sólo la
pulpa de tomate.
Así que vamos a remover con una cuchara o con la mano, para ayudar a que
se cuele todo el jugo y que en el colador quede sólo la pulpa.
Añadimos una pizca de sal y un toque de especias.
Lo que hemos conseguido es tener aquí la pulpa
y aquí abajo tendríamos esta salsita que no vamos a tirar:
nos vale para otra receta, pero no para la Mizza
¿de acuerdo?
El tomate crudo es ligeramente ácido,
a mí me gusta así,
pero también se le podría añadir unas gotas de edulcorante, para matar esa acidez.
Vamos a poner esta pulpa de tomate escurrida y sazonada, sobre la
base de carne
y las repartiremos
sobre toda la superficie.
Podríamos utilizar perfectamente una salsa de tomate ya hecha, a condición de
que NO lleve azúcar.
Como véis me ayudo con las manos para extender el tomate. Para preparar la
Mizza, como cuando se prepara pizza, hay que utilizar las manos
todo el tiempo.
Voy a utilizar un queso de yogur desnatado hecho en casa.
Lo he hecho con 500 gramos de yogur sabor natural 0% materia grasa, al que he añadido
una cucharada de las de postre de sal gruesa, y que he desuerado
dejándolo en la nevera 3 o 4 días.
Lo que consigo es una bolita de queso de unos 300 gramos como ésta.
La voy a deshacer en migas y a repartir sobre el tomate.
Este queso al cocinarse en el horno toma un sabor y una textura similares a los del
queso de cabra
sólo que es muchísimo más suave
y que no huele a leche de cabra.
Os recuerdo que tenéis la receta tanto de la Mizza como de este queso
en mi blog, recetas dukan
maria martinez punto com. Vamos a cocinar la Mizza en el horno durante 30 minutos.
Al sacarla del horno la he dejado reposar unos 5minutos
y justo antes de servirla, la he espolvoreado con cebollino picado, para dar un toque
fresco y verde.
¿Habéis visto qué cosa tan bonita?
Espero que la probéis.
Si te ha gustado esta video receta dame un dedito arriba, comparte
este video y suscríbete a mi canal,
es gratis.