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hoy vamos a leer el cuento de "La cerillera"
era la 煤ltima noche del a帽o y mientras todas las familias se preparaban para
sentarse a la mesa rodeados de ricos manjares en la calle estaba descalza
ella la joven vendedora de cerillas
la pobre llevaba el d铆a entero en la calle
sus huesecitos estaban ateridos de fr铆o por culpa de la nieve y lo peor de
todo es que no hab铆a conseguido ni una sola moneda
cerillas cerillas 驴no quiere una cajita de cerillas Se帽ora?
pero la mayor铆a pasaron por su lado sin tan siquiera mirarla
canzada se sent贸 en un rinc贸n de la calle para guarecerse del fr铆o
ten铆a las manos enrojecidas y casi no pod铆a ni moverlas
entonces record贸
que ten铆a el delantal lleno de cerillas y pens贸 que tal vez podr铆a encender una
para tratar de calentarse la encendi贸 con cuidado y observ贸 la preciosa llama
que surgi贸 delante de sus ojos
de repente apareci贸 en el sal贸n de una casa
en el que hab铆a una gran estufa que desprend铆a mucho calor
que bien que se estaba all铆 pero la cerilla se apag贸 r谩pido
y la estufa desapareci贸 con ella
probar茅 con otra pens贸 la ni帽a
en esta ocasi贸n vio
delante de ella una gran mesa repleta de comida
y record贸 los d铆as que llegaba sin probar bocado
alarg贸 la mano hasta la mesa para tratar de llevarse algo a la boca
y z谩z se apag贸 la cerilla eran tan bonitas las cosas que ve铆a cada vez
que encend铆a una que no se lo pens贸 dos veces y encendi贸 una tercera cerilla
oh!!! exclam贸 la ni帽a con la boca abierta que 谩rbol de navidad tan grande y cu谩ntas
luces es precioso
se acerc贸 a una de ellas para verla bien y de golpe
desapareci贸 todo la peque帽a cerillera r谩pidamente busc贸 una nueva cerilla y
volvi贸 a encenderla en esta ocasi贸n apareci贸 de ella la persona a la que m谩s
hab铆a querido en el mundo era su abuela abuelita que ganas ten铆a de verte
驴qu茅 haces aqu铆? no te vayas por favor d茅jame que me vaya contigo te echo de menos
y consciente de que la cerilla que ten铆a su peque帽a mano estaba a punto de
apagarse la peque帽a siguen encendiendo cerillas
hasta que agot贸 todas las que le quedaban
instante en el cual la abuela
cogi贸 dulcemente a la ni帽a de las manos y adem谩s desaparecieron felices la
peque帽a dej贸 de sentir fr铆o y hambre y empez贸 a sentir una enorme felicidad dentro de s铆
a la ma帽ana siguiente alguien pas贸 junto al mismo sitio en el
que la peque帽a se hab铆a sentado y la encontr贸 all铆 rodeada de cerillas
apagadas inm贸vil helada por culpa del fr铆o
pero con una sonrisa inmensa en su cara
pobrecita! exclam贸 alguien al verla
pero lo que no sab铆a nadie es que la peque帽a se
march贸 feliz de la mano de su abuelita hacia un lugar mejor
Es un poco triste este cuento...