Tip:
Highlight text to annotate it
X
—Medalla, medallita mágica, ¿he de renovar o no he de renovar? Medallita, ¿tú qué harías? ¿Medallita?
¡Mierda! ¡Ya estoy harto! A veces pienso qué habría pasado si no hubiera aceptado la oferta de Laporta para entrenar al Barça.
Freixa, ¿eres tú?
¿Qué? ¿Quién eres? —Soy tu otro yo.
—¿Mi otro yo? No, seguro que me he quedado dormido mirando vídeos.
Pues no estoy soñando. Pero espera, si eres mi otro yo, ¿cómo es que tienes esta melena?
—Así es como serías si no hubieses aceptado ser el entrenador del Barça.
—¿Qué? ¿Me estás diciendo que si no hubiera entrenado al Barça tendría esta melena? —Sí, porque no habrías sufrido toda esta presión.
—¡Claro! Cuando fiché tenía mucho más pelo. —Y no tendrías que aguantar a la Central Lechera, ni los villaratos, ni los porqués...
—Ni las ruedas de prensa; ni levantarme temprano, pero bien temprano; ni responder preguntas sobre la renovación... ¡Y podría peinarme!
No sabes cuánto lo echo de menos.
Ojalá no hubiese sido nunca entrenador del Barça. —¿Estás seguro de esto que dices? Piensa que... —¡Segurísimo! ¡Si pudiera, volvería atrás ahora mismo!
¡Ha funcionado! ¡Vuelvo a tener pelo! Pero ¿cómo es que todavía estoy en el sótano?
—¿Qué? ¿Tu sótano? ¡Pero si esto es el sótano del Camp Nou!"
—¿Yo, chico de la limpieza? ¡Pero si en la otra realidad era el entrenador!"
—Guardiola dice que no al Barça. Mourinho, nuevo entrenador del Barça.
Guardiola fracasa otra vez. Mou gana la tercera Champions.
Mou, el ídolo culé.
—¿Tiene una medalla? Pero...
Bien, bien. Lo he perdido todo, pero al menos vuelvo a tener pelo.