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Ciudad olímpica
TransCarioca un Río más veloz para ti
41 km de carretera trayecto 68 por ciento más corto
Soy Antonieta Rodrigues.
He vivido en este barrio de chabolas, Largo do Campinho.
Soy la trabajadora social desde las expropiaciones...
que nos obligaron a hacer sitio para el Mundial de fútbol y las Olimpiadas.
No nos reasentaron, sino que nos dejaron tirados.
Tirar: Eso se hace con la basura. Simplemente nos dejaron en otro lugar.
A todos nos dieron el mismo importe: 15.600 euros.
Ya tuvieras 1 ó 2 habitaciones, una chabola o 2 plantas. Para todos igual.
Mi casa era patrimonio cultural y ha sido destruida por el alcalde Paes.
Según las fuentes históricas, aquí se hospedó Dom Pedro I.
También dicen que un metro cuadrado tiene mucho valor aquí.
La compensación que nos pagaron es irrisoria.
Aquí estaba mi cuarto de baño.
De aquí hasta allá había la cocina.
Donde está la carretera, se encontraba mi dormitorio y otro cuarto.
Mi casa empezaba allí, donde hay esa separación.
Era una casa antigua de dos plantas.
El alcalde Eduardo Paes destruyó este monumento.
La casa empezaba aquí y llegaba hasta allá, donde ves ese poste.
La primera reunión oficial fue el 5 de enero.
Nos dijeron que debíamos mudarnos a Cosmos: a dos horas de viaje.
Si no, debías recurrir al juez.
Todo el mundo tenía a sus amigos aquí.
Uno se fue a Campo Grande, todos fuimos a parar en lugares distintos.
Es difícil seguir en contacto.
Nos metieron en un pueblucho. -Y la gente se ayudaba entre ella.
Todo el mundo se ayudaba. -Incluso los juicios son complicados.
Es difícil reunir a toda la gente.
Mi vecino de la derecha vivía con su madre, sus dos hermanos y su mujer.
Su madre tenía problemas de salud.
Un día llegaron funcionarios del ayuntamiento acompañados de policías.
Simplemente dijeron: Vamos a derribar todo esto.
La policía estaba armada y eran muchos.
También la policía municipal llevaba chalecos.
Dijeron: No tiene sentido oponerse. Ni pudimos terminar el desayuno.
Entraron, arrancaron las sábanas y rompieron las cortinas.
Como si no tuviera ningún valor.
Mi casa era enorme. -Tan bonita.
Les trae sin cuidado. 15 años vivimos en la casa, mis hijos se criaron en ella.
Es como si me hubieran quitado mi vida. Bueno, sigo con vida...
pero mi sueño, mi vida, todo estaba allí. Está mal lo que han hecho.
Por la mañana temprano los vecinos fueron a la ciudad a objetar.
Para detener el derribo. La respuesta fue:
'El derribo sigue adelante, no importa si hay niños.' ¿Es lo que dijeron, no?
Me siento indignada.
Opino que también lo podrían haber consultado de otra forma.
Entonces nos habría afectado menos. Estoy indignada.
Ahora vivo en este barrio. Esta parte húmeda siempre la recorro a pie.
Buenos días, vecina. -Buenos días.
Lo malo es que si vas cargando las compras...
o llevas otros objetos pesados, debes dejar el coche ahí abajo.
Debes cargarlo todo. Las bolsas en una mano, mi hijo en el otro brazo.
Acabas exhausta. Sobre todo si llueve, como hoy.
Para ir a la escuela debes bajar estas escaleras.
A menudo baja tanta agua que esto se convierte en un río de lodo.
Pude comprar esta casa con el dinero de la indemnización.
El dinero de TransCarioca y del señor Eduardo Paes.
De día este espacio es el cuarto de estar y por la noche el dormitorio.
Aquí hay otro cuarto, que es mi cocina.
Esta es la cocina. Tan pequeña que apenas hay espacio para mí y mi hija.
Ahora te enseño el cuarto de baño. También es muy pequeño.
Aquí está el cuarto de baño.
Esto es el cuarto de baño, también muy pequeño. Todo es lo mínimo.
Una casa pequeña, una compensación pequeña y ninguna mejora.
Podría haber sido una casa mejor, pero bueno.
Según las leyes municipales, a cambio del desalojo...
nos ofrecerían una vivienda mejor o comparable. Esta no es lo uno ni lo otro.
En 2016 Río de Janeiro organiza los Juegos Olímpicos.
En 2014 el Mundial de fútbol.
Debido a todos los proyectos cientos de familias tuvieron que dejar sus casas.
Reciben una indemnización de como máximo 30.000 euros.
Fueron obligadas a mudarse a lugares muy alejados de sus antiguos hogares.
La indemnización suele ser insuficiente para comprar una vivienda comparable.
Por ello sobre todo la gente con pocos ingresos se ve obligada a mudarse...
a lugares muy alejados de donde vivían antes y de sus lugares de trabajo.