Tip:
Highlight text to annotate it
X
Muy buenos días o muy buenas tardes, muy buenos días
porque todavía no comimos, ya estamos medios tardones
pero no importa, es un día muy especial para Sunchales,
es un día muy especial para Santa Fe, es un día
muy especial para el cooperativismo.
Señor gobernador de la provincia de Santa Fe; señores titulares;
señor gobernador de la provincia de Río ***, qué sorpresa,
no sabía que había sido titular de Sancor Seguros,
lo cual revela que realmente estamos ante un verdadero
ejercicio de cooperativismo, que alguien de una provincia
profunda, del país profundo, también forme parte
de esta conducción.
Creo que hoy han sucedido muchas cosas.
Recién cuando mirábamos las cúpulas históricas
de la Universidad Nacional de Rosario, en especial
de la Facultad de Derecho, que yo no me acordaba realmente,
cuando venía para aquí releía y me acordaba que había sido
destruida producto de un incendio luego
de una manifestación, porque no fue un incendio
como el que le puede pasar a cualquiera, era parte
de un incendio político si se quiere también,
no de un incendio de los que se producen normalmente.
Digo que eran los recuerdos del incendio de un país que sufrió
mucho, pero no solamente sufrió mucho -sería injusto decirlo,
en los años 2001, 2002, es un proceso muy largo
que empezó en una larga noche allá por el año ´76 cuando lenta
pero inexorablemente se fue desarticulando el aparato
productivo y la movilidad social ascendente en nuestro país.
Por eso esta reconstrucción de la Facultad de Derecho
de la Universidad de Rosario, edificio emblemático,
es algo más que una reconstrucción o una obra
pública; adquiere el valor simbólico de reconstruir un país
que se nos había incendiado y quemado en nuestras manos,
y tal vez también por nuestros propios errores, sin lugar
a dudas, también aprendimos que no podemos seguir echándole
la culpa a los de afuera de las cosas que nos han pasado
aquí adentro, algo hemos tenido que ver.
Y creo que el ejercicio de la responsabilidad no es señalar
sino reconstruir, ponerse manos a la obra y podríamos decir
que hoy hemos reconstruido ese país incendiado.
Producto de que hemos reconstruido, hemos mejorado
y hemos modificado la matriz productiva de ese país,
es que podemos inaugurar este otro edificio que estamos
inaugurando hoy.
No es solamente un edificio corporativo maravillosamente
diseñado, hermosamente diseñado, con un gran grado
de responsabilidad social con los trabajadores,
también con el medio ambiente, es además un edificio
del crecimiento, del modelo argentino, de la esperanza
y de la fe en que las cosas se pueden hacer cuando todos
ponemos esfuerzo, trabajo y retomamos los verdaderos
objetivos que debe tener una sociedad y su empresariado,
y sus trabajadores, y sus intelectuales,
sus mujeres, sus jóvenes, que es el del crecimiento,
el del agregar valor, el de trabajar todos los días
para ser un poco mejor.
Esto se ve muy claramente, la mayoría de ustedes
son empresarios, pequeños comerciantes de una próspera
región y de un país que también ha comenzado a tener prosperidad
a lo largo y a lo ancho, porque lo que pasa en nuestras
provincias, yo que las recorro permanentemente,
las veo con el mismo nivel de intensidad de crecimiento,
de inversión.
El otro día en el discurso inaugural hablaba de los números
de la Nación -pareciera una cosa lejana- miraba antes de venir
aquí los números de la provincia de Santa Fe, de nuestra
provincia de Santa Fe y veía que por ejemplo Santa Fe recibía
en el año 2003, cuando otro Néstor Carlos asumió
como Presidente el 25 de mayo de 2003, 1.713 millones de pesos
de coparticipación nacional.
Hoy está recibiendo casi 10.000 millones de pesos
en coparticipación nacional incluida la coparticipación
del Fondo Solidario de la Soja; es realmente la primera vez
en 200 años de historia que un gobierno nacional coparticipa
un derecho de exportación a las provincias.
En educación: más allá de las obras de infraestructura,
únicamente en aporte a universidades y FONIT,
de los 170 millones de pesos del 2003, estamos arriba
de los 1.000 millones que hemos entregado en materia de recursos.
En lugares emblemáticos como sueldos de jubilaciones
y pensiones: se recibían en Santa Fe 1.312 millones
contra los casi 8.000, 7.999 millones de pesos ingresan
hoy en concepto de jubilaciones y pensiones.
Y tal vez el caso más emblemático de cómo se ha
producido este crecimiento económico con inclusión social
lo tengamos en la cifras del PAMI, una institución
que durante años fue el emblema de lo que no era eficiente,
de lo que no era eficaz, de lo que no era transparente.
Santa Fe, sus jubilados, sus pensionados, recibían del PAMI
en el año 2003 85 millones de pesos en servicios;
hoy están recibiendo 2.144 millones de pesos
en servicios, en mejores tratamientos de salud,
en cuidado, respeto y dignidad.
En definitiva, puede parecer una cifra importante, pero lo más
importante es que trasunta respeto y reconocimiento
por nuestros mayores y dignidad.
En infraestructura, de 41 millones de pesos pasamos
a 2.690 millones de pesos.
En subsidios, y esto es muy importante porque revela también
el impacto del crecimiento industrial en la República Argentina
y en Santa Fe en particular.
El subsidio de energía eléctrica por ejemplo en el año 2003
era apenas de 21 millones de pesos para todo el año,
claro, el país no producía y tampoco había tanta gente
consumiendo ni tanta venta de electrodomésticos;
hoy el subsidio de energía eléctrica en generación,
porque es únicamente en generación, la distribución
está a cargo de la provincia, es de más de 2.000 millones de pesos,
que también aseguran competitividad al comercio
y a la industria e impactan en el consumo.
En total, porque hay muchísimas cifras, las transferencias
nacionales a la provincia de Santa Fe eran en el año 2003
de 4.396 millones por todo concepto;
hoy son 27.711 millones, 536% más.
Esto si nos fijamos en lo que es de recursos presupuestarios,
pero además las herramientas que el Ministerio de Industria
a través de promociones, a través de instrumentos da
y que en la participación industrial, en la recepción
de estas herramientas en la provincia de Santa Fe,
es del orden del 11,2%, 5.130 millones de pesos
en beneficios y herramientas del Ministerio de Industria
y del sector industrial, sobre un total de 45.000
para todo el país, lo cual la hace participar a Santa Fe
en el 11,2%.
Ni qué hablar de la Asignación Universal por Hijo.
Números que además han tenido un impacto formidable en proyectos
que se han desarrollado en materia de infraestructura,
como la Autopista Córdoba-Rosario, como las obras de la Picasa,
como las ruta de Paraná y Santa Fe, en fin, todo lo que
ha significado la infraestructura económica que ha permitido
seguir apoyando el crecimiento económico de la actividad
aquí en Santa Fe.
También la inversión privada, muy importante, esto que estamos
viendo de acá, una muestra de la confianza, nadie invierte
32 millones de dólares en un edificio corporativo
si no piensa que el país va a seguir en la senda
del crecimiento, de la generación de trabajo,
en la senda de tener más cosas que asegurar: autos, casas,
motos, fábricas, esto que estamos inaugurando
hoy es la muestra palmaria del optimismo y la confianza
de nuestros empresarios y un ejemplo también
del cooperativismo argentino en el país y en nosotros mismos,
sabiendo que nadie va a hacer por nosotros lo que nosotros
mismos no seamos capaces de hacer.
Emprendimientos importantísimos que se están desarrollando
en toda la provincia, Profértil, los laminados Beltrami
que nos van a permitir sustituir importaciones y tener chapas
gruesas para el tema de barcos, para el astillero que también
se inauguró el año pasado y que ya ha producido
más de 23 barcazas, y con el laminado grueso
de Beltrami queremos producir barcos de mayor porte,
de mayor magnitud para comenzar a sustituir importaciones
y volver a tener esa matriz productiva que fue única
en toda Latinoamérica y que nos llevó a tener el PBI más alto
en la década de los años 50.
Hoy antes de venir para aquí estaba leyendo un artículo
de un diario económico donde un economista de una fundación
hablaba del año ´74 y decía que precisamente ese año fue
el punto de inflexión de mayor crecimiento y participación
de los trabajadores en el PBI, de mayor ingreso per cápita,
de menor desocupación y pobreza: 3,2 de pobreza
y 4,3 de desocupación, prácticamente
régimen de pleno empleo.
Es obvio que no era por el gobierno que había empezado
en el 73, esas cosas no se hacen en un año y medio, sino que aún
pese a las interrupciones democráticas que había habido
y pese a algunas políticas ese concepto de agregar valor,
ese concepto de generación de trabajo, ese concepto industrial
de la inmigración, ese concepto que nos dieron nuestros abuelos
que bajaron de los barcos, todavía seguía vigente,
no había sido desmantelado.
Y luego, como decía al principio de mi intervención,
vino la larga noche, que no fue solamente
una tragedia en términos de costos de vidas sino
que fue también una tragedia en términos de esperanza
y de desarrollo de una sociedad.
Por eso yo estoy siempre preocupada y siento que el gran
desafío que tenemos todos los argentinos, en especial quien
tiene la primera responsabilidad que es su presidenta
pero también los gobernadores, intendentes, legisladores,
empresarios, dirigentes sindicales, es cómo
institucionalizamos esto que yo creo que nadie discute:
la necesidad de que Argentina siga ampliando
la diversificación de ese nuevo modelo de acumulación,
que sigamos completando, perfeccionando y agregando
ciencia y tecnología a los eslabones de la cadena
para ser cada vez menos dependientes del sector externo
y tener cada vez mayor competitividad, para poder
además desarrollar por primera vez en nuestra historia
y en forma armónica un modelo que tiene fuerte mercado interno
pero que también ha batido récords de exportación
como nunca lo había hecho en sus 200 años de historia.
Y producto de esto es lo que nos anunciaba también el titular
de Sancor cuando nos decía que prontamente están dispuestos
a inaugurar una nueva filial en Brasil, nuestro gran socio,
también en materia de política exterior hemos apostado
a ser parte de esta región.
Recuerdo cuando era legisladora y algún ministro dijo que era
mejor ser amigo de los grandes países desarrollados,
para qué ser amigo de los pobres pudiendo ser amigo de los ricos,
lo que pasa es que cuando los países ricos te miran
a vos no te quieren de amigo, te quieren de semi esclavo
y por eso creo que la opción que hemos hecho desde
el año 2003 de apostar a la región,
de ser parte del Mercosur, de saber que el volumen
y el desarrollo de nuestro hermano Brasil va a ayudar
también al desarrollo, al volumen y al entramado
de nuestra Argentina, es también superar yo diría más que viejas
antinomias, viejas estupideces, porque realmente no puede
calificarse de otro modo lo que algunos decían,
que teníamos que tener un desarrollo independiente
y no depender de Brasil o de la región.
Es simplemente saber que este proyecto necesita de todos estos
elementos, de todas estas variables, de un Estado
que también se comprometa a seguir sosteniendo
estas variables macroeconómicas que permitieron este
crecimiento; esto no es ni viento de cola ni magia
ni suerte, suerte tienen los vagos, resultados concretos
tienen los que creen en las cosas como ustedes
y trabajan todos los días para lograrlo.
(Aplausos)
Esto es lo más importante que hemos logrado y el compromiso
del Estado de seguir sosteniendo estas variables macroeconómicas
y estas políticas activas, desde las reservas del Estado,
el desendeudamiento de la Nación, que ha permitido
también retornar el crédito a nuestras empresas
internacionales, además de haber retornado el crédito también
adentro de nuestro país.
Hoy ese inmenso consumo que se está dando de electrodomésticos,
de autos, de motos, es porque ha retornado el crédito
a la Argentina, sin crédito sería imposible
ver las cantidades de motos y de autos que están
en los parques industriales, parques industriales
como el que hoy ayudamos en Carcarañá con nuestro
programa también de ayudar a la infraestructura
de los parques industriales para seguir profundizando
este proceso; a seguir sosteniendo la demanda agregada
como es la Asignación Universal por Hijo, que no solamente
tiene un profundo contenido ético y moral sino también
un profundo sentido económico porque estamos sosteniendo
el consumo en los sectores más postergados, que tal vez
no tienen la capacidad de ahorro que tienen otros sectores
o por ejemplo de ir a veranear fuera del país y por lo tanto
consumen todo aquí adentro, en su barrio, en su intendencia,
en su provincia, por eso el crecimiento
que estamos viendo parejo en todas las provincias.
Hace unos días estuve en Chubut con un fabricante de helados
-un fabricante de helados de la Patagonia, no es lo mismo
fabricar helados en la Patagonia que hacerlo acá
o en Capital Federal, acá es más fácil, además es empresario
de transporte lacustre- y me decía que los cinco días
de carnaval en Comodoro Rivadavia
había vendido la misma cantidad de helados que en marzo del año 2010.
Y esto también tiene que ver con Santa Fe porque el helado
lo hicieron con leche.
Esto es para que veamos cómo todo tiene que ver con todo,
cómo no son posibles desarrollos individuales y autónomos
si no hay un proyecto de nación que involucre provincias,
municipios, sociedad, empresarios, trabajadores,
todos poniendo su grano de arena y todos también cuidando
de lo que hemos logrado, porque nos ha costado mucho
construir esto.
Yo siempre digo que es mucho más fácil destruir que construir,
por eso mantener, mejorar profundizar este camino
que permite que hoy estemos compartiendo este almuerzo,
este edificio, este orgullo de esta empresa tan emblemática
de los argentinos; está acá en Santa Fe pero es de todo
los argentinos, Sancor es una marca registrada
de todos los argentinos, yo lo siento así por lo menos.
(Aplausos)
Y es responsabilidad de todos seguir mejorando para mejorar
los índices de participación de los trabajadores pero también
saber, nuestros sindicatos, nuestros dirigentes, que es
necesario también el esfuerzo para incorporar a otros
que todavía no hemos podido incorporar.
Pese a que tenemos el índice de desocupación más bajo
de las últimas décadas, hemos vuelto al 7,3% y queremos
seguir bajándola, necesitamos que todos pongamos mucha
pero mucha responsabilidad y abordemos temas que son claves
también, cuando uno alcanza determinado crecimiento
comienzan otro tipo de pujas y tensiones,
la de la distribución del ingreso,
que si la rentabilidad empresaria, que si la productividad laboral,
y yo creo que tenemos que sentarnos a discutir
seriamente que las dos cosas van de la mano:
productividad y rentabilidad.
No empecemos a poner como antinomia la discusión
de una cosa con la otra porque no nos va a cerrar;
no hay empresas que tengan rentabilidad si sus trabajadores
no trabajan más y mejor, pero también es cierto
que si los trabajadores trabajan más y mejor y participan
de aquellas empresas que ganan mercados, que ganan
en innovación y tecnología, que nos demos una discusión
seria para ver cómo seguimos para seguir sosteniendo
esa rentabilidad y también la inclusión social
y la movilidad social ascendente que es lo que hace que este
modelo sea sustentable socialmente y para que nunca más
una Universidad Argentina, sea una tan maravillosa
arquitectónicamente como la Rosario o cualquier otra,
se vea afectada por ningún incendio después una manifestación,
en todo caso si tenemos la desgracia de que se produce
un siniestro, que seguramente estará cubierto por Sancor Seguros,
que sea un siniestro casual pero no causal.
Por eso quiero felicitarlos a todas y a todos los hombres
y mujeres que todos los días con esfuerzo, con compromiso,
se levantan muy temprano a salir a trabajar y otros
con responsabilidades empresarias se levantan también
junto a sus trabajadores para imaginar, para investigar,
para crear, para saber cómo hacemos para seguir teniendo
más empresas, más mercado, que en definitiva es tener
más Argentina y mejor sociedad.
Muchas gracias y muy buenos días a todos y a todas.