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Buenos días, soy Neveen Shalaby.
Estamos en Abu Regala, un barrio que amenazan con derribar.
Debido a todos los escombros, está plagado de insectos.
Es peligroso para los niños, porque por aquí pasa el tren.
Cada familia tiene algún miembro con alguna enfermedad de pecho.
Estamos rodeados de desperdicios.
Pero le seguimos dando las gracias a Dios.
Me duele el pecho. -¿Cómo es eso?
Por el humo.
Mi nombre es Eman Shaaban Hegab, soy viuda y tengo 42 años.
Mi marido falleció tras un calvario de dos años y cuatro meses.
Tenía cáncer de laringe, de cuerdas vocales y del tiroides...
causado por la contaminación y todos los desperdicios.
Tras la muerte de mi marido nadie me ayudó.
Decidí empezar a vender café y té.
Ahora amenazan con derribar el barrio y echarnos.
Tengo cinco hijos. Dos están aquí y mi hija enferma está dentro.
Fíjese en cómo vivimos.
Estos son nuestros muebles. Es todo lo que tenemos.
He vuelto a reconstruir tantas veces esto, pero todavía no es seguro.
No tengas miedo, no duele.
Aquí hay una cocina, pero no funciona.
Detrás nuestro hay un gran vertedero. Es por eso que hay tantas moscas.
Aquí el gobierno vierte toda la basura. Estamos rodeados de basura.
¿Dónde están los huevos?
No hay agua ni electricidad.
La cogemos de forma ilegal.
Hoy debo hacer la colada y después voy a cocinar.
Enciéndelo, cariño.
Los viernes hago la colada y cocino algo rico para los niños.
Ese es mi papel como madre. Para ellos soy padre y madre.
Entre semana trabajo como un padre. Los viernes estoy con los niños.
Los niños son muy importantes para mí. Debo ser padre y madre para ellos.
Mamá.
Mira a ver qué quiere tu hermana enferma.
Con unas buenas tijeras lo podría hacer mucho más rápido.
Estas tijeras son mejores.
El gobierno nos debe dejar en paz o darnos una casa nueva.
Más de 4000 familias tienen los mismos problemas.
No soy la única viuda. Aquí hay muchas viudas.
Solo recibo una pequeña pensión. ¿Cómo debo vivir de 160 libras?
Ocho meses después de morir mi marido recibí 160 libras.
Esta es mi hija Omnia. Tiene cinco años.
Desde que tiene un año y medio padece una grave pulmonía.
Fuimos al hospital para que le hicieran una radiografía.
Descubrieron que tenía una pulmonía crónica.
Es causada por el humo y los desperdicios.
¿Por qué debemos vivir en estas condiciones?
El médico dijo: Necesitas aire fresco que no esté contaminado.
Pero le sigo dando las gracias a Dios.
Pero ahora nos quieren echar. ¿Dónde debemos ir?
Mira, así se consigue el agua aquí. Debemos ir a recogerla muy lejos.