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Presidente: Saludos a todos
y felices fiestas.
Primera Dama: Sabemos que esta es una época
de mucha actividad para todos,
así que no tomaremos mucho de su tiempo.
Queremos dedicar un momento para desearles a todos
una feliz Navidad, de nuestra familia a la suya.
Presidente: Esta es una temporada
para que millones de personas
que viven en Estados Unidos se reúnan con sus familias,
continúen las tradiciones navideñas de larga data
y se muestren agradecidos a las personas a quienes aman.
Y entre unas cosas y otras, algunos hasta podríamos ver
un poco de baloncesto y comer galletas navideñas.
Primera Dama: Aquí en la Casa Blanca
durante las últimas semanas,
alrededor de 70,000 personas de todo el país nos han visitado
y han observado nuestras decoraciones navideñas.
El tema de este año fue "Reunirse:
historias de la temporada".
En cada habitación de la casa, intentamos narrar una historia
acerca de quiénes somos como estadounidenses
y cómo celebramos las fiestas juntos.
También nos aseguramos de resaltar algunas
de las historias más poderosas que conocemos:
las de nuestras excepcionales tropas, veteranos
y familias de militares, y su servicio y sacrificio
por nuestro país.
Presidente: Nuestros extraordinarios hombres
y mujeres uniformados están en servicio activo para que
el resto de nosotros podamos disfrutar de las bendiciones
que apreciamos durante esta temporada festiva.
Sin embargo, eso significa que muchas de nuestras tropas
están lejos de sus hogares y de sus familias.
Pasan más tiempo hablando por teléfono
con sus seres queridos en casa.
O configuran chats de video para poder ver
cuando se abran los regalos.
Hoy les decimos a todas nuestras tropas que están
en nuestros pensamientos y oraciones
en esta época navideña.
Y tenemos buenas noticias: Para muchas de nuestras tropas
y veteranos más recientes, esta podría ser la primera vez
en años que pueden estar con sus familias en Navidad.
De hecho, con el fin de la guerra de Irak y la transición
en Afganistán, hay menos hombres y mujeres de uniforme
desplegados en zonas de peligro que en cualquier otro momento
de la última década.
Primera Dama: Eso es algo por lo cual
todos podemos estar agradecidos.
Y con más tropas de regreso a casa,
ahora nos toca brindar servicio; nos toca dar un paso adelante
y mostrar nuestro agradecimiento a las familias de militares
que nos han dado tanto.
Por eso, Jill Biden y yo hemos comenzado nuestra iniciativa
Joining Forces para alentar a todas las personas que viven
en Estados Unidos a que apoyen a nuestras familias de militares
de todas las maneras posibles.
Una y otra vez, hemos estado desbordados por el apoyo
que hemos recibido de personas de todo el país
que han encontrado nuevas maneras de contribuir
a estas familias a través de sus escuelas,
negocios y centros religiosos.
Presidente: Este es el mismo espíritu
de entrega que nos conecta a todos durante la época navideña.
Así que muchas personas en todo el país están ayudando
en comedores, comprando regalos para niños necesitados,
u organizando recaudaciones de alimentos y ropa
para sus vecinos.
Para familias como la nuestra, ese servicio es una oportunidad
de celebrar el nacimiento de Cristo y de vivir
como Él nos enseñó: amar a nuestro prójimo
como a nosotros mismos, alimentar a los hambrientos
y cuidar a los enfermos, y atender
a nuestros hermanos y hermanas.
Independientemente de cuáles sean
nuestras creencias religiosas, como personas que vivimos
en Estados Unidos podemos tomar esos valores para ser
mejores padres y amigos, mejores vecinos y ciudadanos.
Primera Dama: En miras al Año Nuevo,
prometámonos vivir en virtud de esos valores al extender
nuestra mano y ayudar a levantar a aquellos
en nuestras comunidades que necesitan ayuda.
Presidente: Así que feliz Navidad a todos.
De nuestra parte y de parte de Malia, Sasha, Abuela, Bo...
Primera Dama: Y Sunny, el nuevo miembro
de la familia Obama...
Presidente: Les deseamos
una temporada navideña llena de bendiciones y seguridad.
Primera Dama: Felices fiestas a todos,
y que Dios los bendiga.