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TRES ESTACIONES
Tú debes ser Kien An.
Así es.
Bien, sígueme.
Aquí tienes tus cosas.
Bien, Kien An, si estás aquí es porque vienes con muy buenas recomendaciones
Es una casa respetable, así que espero que no nos defraudes.
No lo haré, señor. No se preocupe.
Aquí las normas son muy estrictas.
Es muy importante no desobedecer ninguna.
Es maestro Dao es un hombre muy poco indulgente.
La campana suena muy temprano. Tienes que ser puntual.
Las flores se recogen y se hacen en ramos para venderlas en la ciudad.
El maestro Dao se enorgullece de sus flores.
Y los clientes se enorgullecen de ellas.
Así que tú también debes enorgullecerte de ellas.
Jura no pensar en él.
No dejes que el templo te distraiga.
Tú mantente ocupada,
y pronto olvidarás que está ahí.
Voy a creer que está abandonado.
El maestro vive allí, pero hace años que no sale.
Las viejas dicen que ha perdido su alma, que le abandonó hace mucho tiempo.
¿Es aquella carga que está allí tan bella como un loto?
¿Con hojas verdes y pétalos blancos?
Hojas verdes, pétalos blancos.
Centro amarillo.
Centro amarillo, hojas verdes, pétalos blancos.
Está cerca del fango, aunque no huele a fango...
El destino de una mujer es como una gota de lluvia.
Algunas caen al canal...
Otras caen en ricas piletas.
¿Compra, Señor? Tengo chicles y cigarrillos.
Por favor, ¿quiere algo? Tengo chicles y también cigarrillos.
Compre algo, por favor. ¿Quiere chicles? Compre algo, por favor, compre algo.
Llevo toda la mañana esperando. ¿Has traído el linimento?
Sí, claro. ¿Todavía te duele el brazo?
El brazo y la espalda.
Pásamelo, yo también lo compré.
Oye, a lo mejor tu acabas con esta discusión.
¿De qué se trata?
¿Ves aquel hotel de ahí?
Sí, claro. ¿Qué le pasa?
He hecho una apuesta con Minh.
Yo digo, y estoy seguro que allí la gente se baña con colonia, seguro.
¿Porqué?
¿Te has fijado en el olor?
Todos los clientes que recogemos allí huelen de maravilla.
Ya, es el olor del dinero.
Ese hotel es el más caro de la ciudad.
Ir allí es tirar el dinero.
Con lo que ganamos en un mes...
...no podríamos ir allí y pedir la habitación más barata
Para poder tener tanto lujo hay que tener los bolsillos bien llenos.
No da igual cuántas estrellas digan que tienen...
...Ninguno se puede comparar con mi suite de mil estrellas.
¿De mil estrellas? No digas tonterías.
Es verdad, desde mi cama las veo. No hay techo, solo estrellas.
Por lo menos tienes cama.
¿Aún sigues leyendo ese viejo libro?
Al menos eres persistente.
- Hey, hey... - Señorita, sí, señorita...
- El mío es mejor. - Sí, adelante, suba, suba.
Vamos para allá. Un momento.
- ¿Vamos? - Sí, será divertido.
¿Aún no lo has arreglado? Pues hay que estar preparado.
Cualquier día te costará un buen disgusto.
¡Vuelve aquí!
¡Necesito que me lleves! ¡Vámonos de aquí!
¡Te he dicho que vuelvas!
De prisa.
Eso estuvo muy cerca.
¿Qué ha pasado?
Oye, tú conduce y no hagas preguntas.
Déjame en el hotel Marqués.
Diablos, se me ha corrido el maquillaje.
Ya me conocen, nunca dejo que nadie me lleve a casa.
¡Qué cara que han puesto! Pero ellos se lo han buscado.
Gracias por la rapidez.
Si quiere puedo esperarla.
No, tardaré un rato.
No me importa.
Tardaré horas, ya buscaré alguien que me lleve.
¡Recién recogidos del lago!
¡Lotos blancos y frescos!
¡Recién recogidos del lago!
¡Lotos blancos y frescos!
Jovencita, espera un momento.
¡Oh! Por fin han llegado, ¡Qué bien!
Tú debes ser nueva.
Nunca te había visto.
Sí, señor. Empecé esta misma semana.
Las flores de tu maestro son muy bonitas.
Por favor, dame un ramo.
Huelen exquisito.
¡Qué bonitos! ¿Cuánto es?
5,000.
Muchas gracias.
¿Otra vez tú? ¿Qué estás haciendo aquí?
Te estaba esperando.
Ya te dije que no me esperaras.
Bueno, no tenía otra cosa que hacer.
Supongo que no querrás más dinero, ¿Verdad?
No, sólo quería asegurarme de que tuvieras transporte.
Está bien. Llévame al distrito dos.
Mañana trabajaré en el Majestic.
Allí los clientes son mucho más ricos.
Y sobre todo, saben cómo tratar a una dama.
Hé quedado sin tabaco.
¿Tienes cigarrillos?
No.
Bueno, es igual. Hace demasiado calor para fumar.
Ahora mismo podría quedarme en una habitación bien fresca.
Sólo tendría que quedarme toda la noche. Pero no quiero.
A veces desearía quedarme dormida en una de esas enormes camas...
...Con el aire encendido toda la noche.
Es lo que hace todo el mundo.
Ahora me tomaría una copa, pero seguro que no bebes.
No.
¿Qué demonios haces?
Ni bebes ni fumas. ¿Cómo demonios te diviertes...
...además de quedarte esperando a las chicas guapas?
¡Maldita sea! ¡No otro apagón!
Las noches que hay apagones hace un calor insoportable.
¿Qué ocurre?
Dinos, ¿a dónde vas? Tu cara no me suena.
La llevo a casa.
Tranquilo, ella vive aquí.
¡Déjenlos pasar!
Nuestra calle no es segura durante los apagones.
Aunque hay calles aún peores.
Puedes parar al lado de esa farola.
Centro amarillo, hojas verdes, pétalos blancos.
Está cerca del fango, aunque no huele a fango...
El destino de una mujer...
...es como una gota de lluvia.
Algunas caen al canal...
Otras caen en ricas piletas.
¿Puede alguien saber cuántos tallos hay...
...en un campo de arroz?
¿Cuantas ondulaciones en un río? ¿Cuántas capas en una nube?
¿Puede alguien barrera las hojas de un bosque?
¿y decirle al viento que no agite más los árboles?
¿Cuántas hojas debe comer un gusano de seda...
...para hacer un vestido de colores del pasado?
¿Cuánta lluvia debe...?
No te preocupes por ellas. Ignóralas.
Llevan aquí tanto tiempo que ahora se creen las dueñas del lago...
...y te miran a ti con desprecio.
Yo no lo sabía.
No tenías por qué.
Sigue trabajando...
Si no recogemos lo suficiente el maestro se enfada con el señor Mui
...y le castiga severamente.
Llevo toda la vida aquí y sigo sin soportar este calor.
Supongo que lo mejor es no pensar en ello.
¡Tírame una bolsa de frutos secos!
Siempre sueño con el día en que vayan a nuestra esquina...
...y construyan un hotel enorme.
Con tanta gente es inevitable.
Lo único que pido es no seguir en esto cuando tenga su edad.
Dime una cosa.
¿No te has fijado en ese americano?
Lleva un montón de días allí sentado, sin hablar con nadie...
...y fumando con la vista perdida.
¿Cómo que días?
Lleva varias semanas. Me lo dijo un empleado del hotel.
Se la pasa todo el día allí sentado fumando...
...y mirando fijamente el restaurante que está allí en frente.
Seguro que no sabes que ese local...
Había sido un bar que frecuentaban los Marines.
La semana pasada me hizo llevarle por toda la ciudad...
...Dímos mil vueltas buscando a la jóven de una foto.
Yo creo que está chiflado.
Oye, volvámos a la esquina.
Kien An.
Vístete enseguida.
El Maestro Dao desea verte.
Muchas gracias por venir.
Por favor, no tengas miedo.
Lo que voy a pedirte es sencillo.
La canción de esta tarde...
¿dónde la aprendiste?
La aprendí de mi madre, Señor.
Me la cantaba cuando yo era pequeña.
Me gustaría que la cantaras.
No comprendo por qué.
No te traje aquí para que comprendieras.
Tu canción de esta tarde...
Quiero que la cantes.
¿Puede alguien saber...
...cuántas ondulaciones hay en el río?
¿Cuántas capas hay en una nube de monzón?
¿Puede alguien...
...barrer las hojas de un bosque...
y decirle al viento...
¿Compra? ¿Compra? ¿Compra?
¡Para! ¡Para!
¡Hey, ***!
¡Hey! ¡Hey! ¡Mi dinero!
¡Mi dinero!
¿Compra? ¿Compra? ¿Compra?
¡Dinero! ¡Dinero! ¡Dinero!
¿Cuánto?
5.000
Cuando esté ante San Pedro...
Le diré 'se presenta otro Marino, Sr.'
Ya he estado en el infierno.
1ª División de los Marinos, 68-69.
¿Esta mierda es auténtica?
¿De dónde lo has sacado?
Te doy 50,000 *** por él. ¿Qué me dices, chico?
¿Quieres 100.000 dongs? ¿Me tomas el pelo? Te doy 60.000.
¿Sabes qué?
Olvida éste.
¿Cuánto quieres por todos?
No dejes que te engañe.
Tengo una idea. Siéntate aquí.
Buku ***.
¿Desde cuándo trabajas en la calle?
Tengo una hija.
Está aquí, en alguna parte. Nunca la he visto.
Recibí una carta. Su madre había muerto.
Pensé que era el momento de ir a buscarla.
Se parece a mí, ¿verdad?
Sé que ha llegado la hora de encontrarla.
Y a lo mejor de hacer las paces con este lugar.
Pruébala, tranquilo. Nadie va a decirte nada. Aquí todo el mundo va por lo suyo.
Esto quedará entre tú y yo.
En serio, ***...
Me caes bien, chico.
¿Ha visto mi caja, señor?
Señor, ¿ha visto mi maleta?
Bueno, espero...
...que mis pensamientos privados...
...te hayan resultado entretenidos.
Lo siento. Ya me voy.
¿Cuánto has leido de mi obra?
Lo suficiente.
¿Y eso qué quiere decir?
Lo suficiente...
...para comprender su dolor.
¿Y qué sabes tu acerca del dolor?
Mi vida ha sido dura.
Yo también me he sentido sola.
¿Sabes qué se siente cuando los niños te señalan y se burlan de ti cuando sales a la calle?
¿O cuando te ven venir, y la gente se mete en sus casas...
...cerrando puertas y ventanas? ¿Sabes tú lo que es eso?
¿Por esa razón se esconde entre las sombras?
Yo no me escondo
Dicen que hace años que no sale del templo.
¡Eso son tonterías!
...mis oídos huyen de estas ventanas para oír el canto de los pájaros.
Mi nariz atraviesa estas paredes...
...para dormitar con la fragancia de mis lotos.
Con cada amanecer y cada ocaso...
...mis ojos revolotean por el aire.
Y mi corazón...
Mi corazón ha trascendido...
...No le limitan las ataduras del hombre.
Ahora ya sabes porqué no salgo.
Será mejor que no vuelvas por aquí.
Yo vuelo, y mis alas se extienden...
al cielo voy persiguiendo...
...perezosas mentes dejo en el paso...
...soy como la brisa que acariza el prado...
...los mares visito desplegando mis velas...
...soy hermano de la reina loba...
...compañero de las estrellas...
...mi mente echa a volar con la marea...
...elévate, sol, de dorada aura...
...y teje, querida luna, hilos de plata...
...despeja las sombras que se ciernen sobre mí...
...que quieren aprisionar mi alma...
...ojalá fuera un loto flotando en un lago...
...perfumando el día de fragancia y poesía...
...busco en el viento rastros de mi anterior espíritu...
...pero es el reflejo de mi presente...
...lo que se revela...
Fue el último poema que escribí...
...antes de perder... los dedos.
Ya puedes irte.
Yo le prestaré mis dedos, si lo desea.
No pierdas el tiempo con los pensamientos de un hombre amargado.
Para mí no sería perder el tiempo, señor.
Deberías irte...
...antes de que empiecen a preocuparse.
Espera.
Podríamos...
...empezar mañana.
Empezaremos mañana.
¿Le has limpiado los zapatos a un americano con maleta de madera?
Con esta lluvia no he limpiado ni un zapato.
No estarás siguiéndome. ¿Verdad?
¿Y qué harías si lo hiciera?
Oye, mira...
...no sé porqué estás aquí, pero...
¿Llevas esperando toda la noche?
He pensado que necesitarías un transporte.
A esta hora no hay taxis de fiar.
¿Y cómo sabré si tú eres de fiar?
Para aquí un momento.
Toma. Esto es para ti.
No es necesario. No puedo aceptarlo.
Vamos, cógelo.
No lo rechaces. No suelo ser tan generosa.
Oye, ¿qué haces aquí afuera?
Hace demasiado calor para dormir adentro.
Estás loco.
Si yo tuvera una cama, no saldría ni borracho.
Tan tenue era la luz de la luna...
...que no podía envolver el pálido lago.
...pero a pesar de todo he hallado...
...un resquicio de felicidad entre el agudo dolor.
Escribir estas palabras es como...
...hacer que suene una nota en un instrumento...
...tañer un acorde...
...hacer vibrar un rayo de luz...
...como una melodía en mi corazón...
¿Lo has anotado todo?
Sí, está todo.
Muy bien.
Es suficiente por hoy.
Yo puedo seguir un rato más.
Desafortunadamente, yo no.
No me quedan palabras.
Maestro, ¿nunca ha pensado en abandonar este lugar?
No. A veces tengo un sueño...
Sueño que mis dedos han vuelto a crecer.
y que la hinchazon de mi cara ha disminuído.
Y también sueño que llevo conmigo...
...una docena de cestas con mis mejores lotos.
...y que viajo al mercado flotante.
Mientras me acerco a las mujeres...
dejo caer suavemente mis lotos sobre el agua...
...y los veo flotar por el mercado como un río blanco.
Y entonces puedo regresar por fin a casa...
...liberado y puro.
Luego me despierto en la mitad de la noche...
...y me doy cuenta de que...
...era un sueño que jamás se hará realidad.
Aún no es demasiado tarde.
Sí, es tarde.
Más de lo que puedas imaginar.
Y no se te ocurra volver hasta que hayas encontrado la caja.
¿Le llevo a alguna parte?
¿Se han enterado de la noticia? Al parecer sí se celebrará la carrera de ciclotaxis.
¿Y este año quién será mi rival?
¿Conoces a Khoi? Es ese de ahí.
¿Ese es mi rival?
No solo participa, sino que además ha apostado a que te ganará.
¿Y tú vas a participar?
No lo creo.
Seguramente crees que estoy loca, pero es la verdad, me encanta el calor.
¿Qué has dicho?
Que aunque creas que estoy loca me encanta que haga calor.
Para la mayoría resulta insoportable.
Aún recuerdo cuando iba al colegio...
...vestida con un Ao Dai blanco...
...y cerca de allí había grandes hileras de árboles Phuong Vi...
...que florecen durante los meses de más calor.
Todas las jóvenes recogíamos sus flores rojas...
...y nos las colocábamos en el cabello para presumir.
Y si tenías suerte, te la regalaba un chico.
Las guardábamos en un libro y así no olvidabamos al chico.
Seguro que te regalaban muchas flores.
Miss... ¿Te importa decirme cuánto cobras?
¿Cobrar qué?
Pues por pasar una noche contigo.
Cincuenta dólares.
Pero ya sabes que no paso la noche con nadie.
¿Por qué lo preguntas? ¿Es que acaso tienes ¿algún cliente para mí?
No, tan sólo era curiosidad.
No creas que voy a hacer esto toda la vida.
Tengo planes, ¿sabes?
Hay otras formas de ganar dinero.
¡Ah, sí! ¿Cuáles?
Como mi madre...
...que murió trabajando hasta reventar.
¿Y qué sacó? Nada.
Eso no me pasará a mí.
¿Has estado en alguno de esos hoteles?
Aún no.
Estar allí es como vivir en otro mundo.
Ellos no son como nosotros.
Caminan diferente, hablan diferente.
El sol sale para esa gente.
Nosotros vivimos a su sombra...
...que va creciendo, se hace más grande con cada hotel que construyen.
La próxima vez fíjate en la gente...
...que sale por la puerta principal, y la próxima vez dime,
¿A cuántos has visto como tú?
Algún día yo me quedaré en ese mundo.
...y me convertiré en uno de ellos, lo sé, estoy convencida.
Pues no creo que esa sea la solución.
¡Ah, sí!, ¿Crees que es mejor casarse con alguien como tú?
Aquí tiene sus flores.
Bien, gracias.
¿Me puedes dar unas flores?
Las vendes, ¿no?
Sí, creí que preferirías unos...
¿Unos lotos de plástico?
No, no me gustan nada.
Por eso están de moda. A mí me cuesta vender los míos.
Aún no he vendido ninguno.
Supongo que piensan que son más prácticos, y no dan problemas.
Y luego esos ni se marchitan, ni mueren.
Incluso les echan un spray para que huelan igual que los de verdad.
Hoy en día...
...la gente sólo busca la comodidad.
Dáme un par.
¿Qué te debo?
Muchas gracias.
¿Tú eres ***?
Me están persiguiendo.
De prisa, sube.
Míralo.
- Ahí está. - Vuelve aquí.
Chico, tienes que pagar lo que has destrozado.
¿Andas metido en líos?
¿Dónde está tu caja?
No la tengo, me la robaron.
¿Has llevado a algún americano que tuviera una maleta como la mía?
No he visto a nadie con una caja así...
...y con esta lluvia no se ve nada.
No te metas en líos.
Si la veo, te buscaré. Y ahora vete.
Cuidado. Ten cuidado con las motos.
¡No vuelvas a mi restuaurante nunca más en la vida!
Lo siento mucho.
Pero a partir de ahora el Maestro Dao ya no se reunirá más contigo.
¿Por qué? Señor Huy, ¿Ocurre algo malo?
No, simplemente no tiene nada para que tú se lo escribas.
¿Cómo es posible?
Seguro que aún le quedan poemas. Acabábamos de empezar.
Kien An, yo no soy quién para cuestionar al maestro.
¿Yo podría hablar con él? Quizás le convenza.
Imposible.
Pero si me deja hablar con él, estoy segura de que podría...
No puede ser. Sus órdenes han sido muy claras.
Vete. Te sugiero que vuelvas a la sala de dormir.
¿Te encuentras bien?
¿Estás bien?
Lo siento, tengo que irme.
¡Ah, otra vez tú! ¿Qué estás haciendo aquí?
¿Qué pasa, pequeño? Me estás mirando como si fuera un fantasma.
¿Dónde está mi caja? ¡Usted me la quitó! ¿Dónde está mi caja?
¡Largo! ¡Deja de molestar a mis clentes!
No importa. no sé qué dice de una caja.
¿De qué estás hablando?
Estábamos en un bar, y cuando me despisté me robó la caja.
¿Usted le robó su caja?
¿Qué dice?
Antes, en el bar.
Es una broma. ¿No?
Cuéntame todo lo que pasó.
Él quería un mechero, y no pudo convencerme, y estoy seguro de que se la llevó.
Está realmente convencido, es cosa suya querer darle la vuelta.
Espera, fuiste tú el que me dejó plantado. Yo fui al lavabo y cuando volví tú ya no estabas.
Yo no sé nada de tu caja.
Bien, ¿lo ves? No se llevó nada de nada.
Siento lo de tu caja, pequeño, pero es mi última noche aquí.
Es hora de beber y de olvidar este lugar.
Quiero que te marches y que no vuelvas por aquí nunca más. ¡Fuera!
Me alegra que hayas venido.
Eso mismo dijo Binh el año pasado...
...antes de que le ganara.
Hermanos y hermanas...
...¿Listos para la gran carrera?
Ciclistas, preparados...
...listos, ¡fuera!
Escucha, ya no necesito que me lleves.
¿Y eso porqué?
Creo que será lo mejor para los dos.
¿Ha pasado algo malo?
Simplemente no te necesito.
Ya no necesito que me lleves. ¿De acuerdo?
¿Me has visto en la carrera?
No.
Pues gané.
Te felicito.
Creo que te seguiré hasta tu casa.
Tengo los cincuenta dólares.
¿Empezamos ya?
Espera, he comprado esto para ti.
No tenías que comprar nada.
Vamos, ábrelo.
Espera...
Quiero que te lo pongas, pero sin nada de maquillaje.
¿Por qué? ¿A ti qué más te da?
Por favor, lo he comprado para ti.
Camina por la habitación para que te vea bien.
Ahora duerme.
Quiero mirarte mientras duermes.
¿Me puedes dar unas flores?
Los lotos blancos. ¿Me das un ramo?
¿Cuánto es?
5,000 dongs.
Gracias.
Por favor. No te levantes.
Gracias por venir.
¿Quieres tomar algo de beber?
No, gracias.
Yo, imagino cuánto te ha costado...
...decidirte a reunirte conmigo.
He cometido muchos errores en mi vida...
...y la mayoría ya no tienen remedio.
...y cuando ocurre la oportunidad de enmendar algún daño...
...sientes algo especial.
Al reunirme hoy contigo espero poder enmendar algún daño.
Perdona, son para ti.
Ya había estado aquí antes. En aquellos tiempos no era un restaurante...
Pero eso fue hace mucho tiempo.
Y yo no soy el mismo de aquellos tiempos.
Ha pasado tanto tiempo.
Yo era un jóven marino, y aquí conocí a tu madre.
Lotos blancos frescos recién recogidos del lago.
Hola Lan...
¿Qué estás haciendo aquí?
Te... te he esperado en el hotel... pero no te he visto.
Te lo dije.
Ya no necesito que me lleves.
Además ya no trabajo allí.
Vete.
¿Qué quieres de mí?
No te entiendo. Hice lo que me pediste. Déjame en paz.
Quiero pasar otra noche contigo.
Te pagaré, tengo dinero.
Espera.
Cógelo, no lo quiero. No quiero tu dinero.
No me lo merezco.
Ni siquiera lo hicimos. No hicimos el amor.
Así que no me debes nada.
Me parece que no lo entiendes. Me has dado más de lo que te imaginas.
No sé qué es lo que pretendes.
Dime, ¿Por qué yo?
No tiene sentido ¿Has olvidado que...
...he estado con muchos hombres?
Lo sé, pero no has estado como conmigo.
Abre los ojos, Hai.
¿No lo ves? ¿No quieres darte cuenta?
Yo soy una prostituta, y tú eres mi chofer, nada más.
Sólo eso.
Nada más y nada menos.
Por favor, no pretendas que sienta algo que soy incapaz de sentir.
Está bien. Déjala pasar.
¿Por qué? ¿Por qué no me había avisado?
No era necesario que lo supieras.
¿Por qué ahora, después de haber luchado tanto tiempo?
¿Acaso sus palabras ya no significan nada para usted?
Me he escondido de la muerte demasiado tiempo.
En fin, le daré la bienvenida, será la última invitada.
¿Sabes porqué te hice venir?
La primera noche...
...fue por aquella canción del lago.
La que cantaste aquella tarde...
...ya la había oído antes, hace mucho tiempo...
...En boca de las mujeres del mercado flotante...
...de mi infancia.
Había olvidado...
...mi juventud.
La única época de mi vida en la que fui...
...un hombre puro e íntegro. tu canción me la recordó.
Me gustaría que cantaras...
...esa canción por última vez.
¿Puede alguien saber...
¿Cuantas ondulaciones hay en un río?
¿Cuántas capas en una nube?
¿Puede alguien barrera las hojas de un bosque?
¿y decirle al viento que no agite más los árboles?
¿Cuántas hojas debe comer un gusano de seda...
...para hacer un vestido de colores del pasado?
¿Cuánta lluvia debe caer del cielo...
...antes de que el océano cubra las lágrimas?
¿Cuántos años debe estar la luna en el medio de la noche?
La luna viene y espera cerca...
Mientras llega aquel que robó mi corazón...
Estaré por siempre cantando esta canción.
¡Hey ***!
¡Ven con nosotros!
- ¿Quieres jugar? - Sí, claro.
¡Hey, ***! ¿Por qué tardas tanto? ¿Qué haces?
El señor Huy la recibirá enseguida.
Gracias por venir.
Siéntate, por favor.
Gracias, señor.
Él quería que te quedaras con esto.
Escucha, el maestro era muy atractivo.
Cuando la lepra le afectó...
...se quedó desolado.
Se culpó a sí mismo...
...y se pasó la vida castigándose.
Le tomaron esa foto el día en que cumplió 23 años.
Y seis meses después le encerraron en ese recinto.
La foto había permanecido oculta hasta ahora.
Sus palabras nunca encontrarán oídos sordos, le doy mi palabra, señor.
Si hay algo que yo pueda hacer por ti...
...no dudes en pedirlo.
Sí, hay una sola cosa.
Toma. Así nunca te olvidarás de mí.