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La última adaptación de Stephen King ha mostrado sus peores pesadillas a una nueva
generación de niños. La miniserie de TV de 1990 asustó a cada niño y adolescente
con cuatro horas de duración en el VHS. Pero la versión del 2017 cambia un poco de escenario,
llevándonos a los finales de los 80, cuando las imágenes de los niños eran mostradas
en las cajas de leche, y los New Kids on the Block sonaban en los walkmans de cada adolescente.
En una temible y espantosa casa de terror, el Club de los Perdedores se reúne para hacer
lo que los adultos no pueden: desterrar el mal.
¿Pero realmente ponen fin al enemigo? Veamos lo que realmente sucede al final de It (Eso).
El Club de los Perdedores es fuerte Hay un trasfondo de rebelión adolescente
que plasma la historia de It (Eso), ya que son un grupo de incomprendidos, subestimados
y, en algunos casos incluso abusados por otros niños mayores, los que se autodenominan como
Perdedores con P mayúscula. Bill Denbrough es tartamudo y asume la culpa
de la desaparición de su hermano menor. Beverly Marsh ha desarrollado una reputación totalmente
inmerecida, justo cuando su padre afirma el dominio sobre su niñez de forma espeluznante
y hasta incluso violenta. El boca sucia de Richie Tozier disfruta de pasar cada segundo
de su tiempo libre en juegos de arcade. Stanley Uris es constantemente fastidiado por su kipá,
aunque apenas sí puede recitar en hebreo. Mike Hanlon es el niño que hace homeschooling
y que todavía es considerado “otro” debido a su raza. Eddie Kaspbrak es el niño inteligente,
pero constantemente degradado por su madre. Y Ben Hanscom es el niño cuyo amor por la
comida y afinidad por la biblioteca lo convierte en una presa fácil para los peores bullies
de la ciudad. Al unirse, forman un campo de fuerza singularmente
valiente y hasta entretenido contra este ser demoníaco que ha plagado la ciudad durante
años.
No son invencibles A diferencia de otros niños, que tal vez
están menos sujetos a torturas diarias por parte de sus compañeros, los Perdedores sí
han vivido situaciones y han tenido que enfrentar sus miedos casi toda su vida. Desde agresores
hasta padres opresivos y hermanos perdidos, ya han pasado por las peores cosas que la
vida puede darles. Así que Pennywise, a pesar de todos sus trucos, sólo puede dañarles
hasta un cierto punto... especialmente cuando están unidos.
Sin embargo, parece que tienden a separarse todo el tiempo. Como podemos ver durante la
película, Pennywise constantemente intenta separarlos, ya que necesita sus miedos para
alimentarse. “Rich.. a qué le tienes miedo?”
“Payasos”
Esa táctica de susto no funciona tan bien
cuando están juntos, pero separados, son completamente vulnerables. Al final de la
película, llegan al acuerdo de reunirse si la ocasión llama, pero cada uno irá por
caminos separados mientras tanto... lo cual no es buena noticia para las próximas víctimas.
También, al estar solos son más propensos a romper las promesas que habían hecho. Los
lectores del libro y los fanáticos de la miniserie sabrán que Stan Uris no se recupera
del todo bien como los otros, y en cuanto a Bevy, bueno...
Bev se elige a sí misma... o algo así.
Además de inundarnos con metáforas de que
está llegando a su adolescencia, también tenemos un triángulo amoroso donde Beverly
Marsh (sin mencionar a su grotesco padre) es la manzana de no sólo uno, sino dos pares
de ojos: “Brasas de enero” Ben y el líder del grupo, Bill.
Es el beso de Ben lo que la hace regresar de ese coma inducido por Pennywise, pero son
los labios de Bill los que ella elige besar antes de partir hacia la casa de su tía,
ahora que es una huérfana por decisión propia. Pero ninguno de estos muchachos es lo suficientemente
importante para ella como para mantenerla cerca de Derry. Al final, Ben y Bill son sólo
obstáculos en su objetivo de escapar esa ciudad... obstáculos que, por cierto, supera
fácilmente. La mala noticia es que cualquiera que esté
familiarizado con el libro de King, sabrá que su padre no es el único que la lastimará
antes de que todo esté dicho y hecho. Y, hablando del Sr. Marsh…
La situación de los padres Si pensábamos que las películas de Disney
eran duras con los padres, nos faltaba ver lo difícil que les va a los padres y madres
de Derry. Beverly golpea a su padre con la tapa de un inodoro. Henry Bowers acuchilla
a su papá en el cuello sólo por hacerlo quedar mal frente a sus amigos. Y Mike Hanlon
perdió a sus padres en un horrible incendio. Incluso los padres sobrevivientes se quedan
un poco peor debido a todo lo ocurrido. Bill ha ignorado casi por completo la sensibilidad
de sus padres sobre su hijo perdido, y Eddie desafía las órdenes de su madre y destroza
su receta de placebo. Parte del objetivo de esta historia es desafiar esa filosofía de
que “los padres saben más”, ya que, bueno, están ignorando en gran medida a todos los
niños desaparecidos y asesinados del pueblo. Básicamente es una metáfora para ese momento
cuando los niños se dan cuenta de que sus padres no son perfectos y comienzan a pensar
que pueden cuidarse por sí mismos.
Henry Bowers, Perdido en Acción
Aparte de Georgie y el fiel secuaz de Henry,
Patrick Hockstetter, otro que posiblemente muere es Henry Bowers.
Después de ser persuadido a través visiones para matar a su padre, su repentino sentido
de supremacía social toma el control mientras se lanza a la ofensiva contra Mike, quien
se las arregla para hacerle frente y lanzarlo al abismo del pozo, que es extremadamente
profundo. Pero no podemos aún descartar la idea de que Henry logra salir.
Porque es una regla bien conocida de Hollywood que, si la muerte de un personaje no aparece
en la pantalla, es mejor suponer que no sucedió. Además de eso, en la historia, Bowers toma
un papel muy oscuro. Así que su rabia probablemente se prolongue al igual que la terrible cicatriz
que le hizo en el vientre a Ben.
¿Qué pasó con los niños flotantes? Cuando Bill y el resto de los perdedores vuelven
a unirse para rescatar a Beverly de Pennywise, la descubren flotando en el aire con los ojos
completamente blancos.
Después de sacarla de la inconsciencia, descubren que ella sentía que ya no vivía mientras
estaba bajo el hechizo de Pennywise. Después de que los Perdedores logran deshacerse
de Pennywise, el resto de los niños que habían estado flotando en su guarida subterránea
comienza a caer. ¿También ellos saldrán vivos? Es difícil de saber.
De cualquier forma, sin embargo, parece que el pequeño Georgie no volverá a ser capitán
del SS Georgie en mucho tiempo. A pesar de que otros niños tal vez dejen
de flotar y sí se salven, a Bill sólo le queda llorar junto al impermeable amarillo
que llevaba Georgie mientras jugaba con su bote de papel. Por qué no estaba él en la
nube infantil flotante es un misterio, así que, si escuchas de cerca, probablemente puedas
escuchar el hashtag #JusticiaParaGeorgie que se estará formando en este momento.
It no ha terminado
Aunque los perdedores logran derrotarlo al
final de la película, incluso hasta ellos saben que la pelea no ha terminado.
Vimos que It fue vencido, pero el ser en sí ciertamente no está muerto. Tal cual indicaban
aquellos artículos de noticias que Ben había reunido con tanto cuidado, este mal despierta
una vez cada tantas décadas. Así que, es solo cuestión de tiempo hasta que vuelva
a reclamar otra gran cantidad de víctimas en el Capítulo Dos.
Y cuando lo haga, todos los integrantes del Club de Perdedores se reunirán en Derry para
terminar lo que empezaron: bueno, al menos.. casi todos.
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