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Creo que el trabajo del hogar
es algo maravilloso porque es un trabajo que aporta felicidad
y no lo considero como algo mecánico o impersonal,
como a veces se considera. Es más,
todo trabajo puede ser visto como algo rutinario
y es verdad que hay algo de rutina en nuestras vidas porque en un
principio nos levantamos
cada día por la mañana y nos vamos a la cama por la noche,
es una realidad,
amanece y anochece;
nuestra vida está basada en rutinas.
Por lo tanto nuestras vidas, tanto en un trabajo remunerado
como en el trabajo del hogar,
tiene su parte de rutinaria,
pero todo depende
de cómo enfoquemos este trabajo, la manera en la que lo llevamos a cabo, poniendo nuestro corazón
en ello.
Me encantan esas palabras del poeta francés Verlaine
que dice:
"La vida humilde con su monotonía y sus tareas sencillas
es una elección
que requiere una gran dosis de amor".
No sé si hay una filosofía para el trabajo del hogar
pero si la hay para el trabajo y
también existe un concepto sobre el trabajo doméstico.
Entonces, ¿qué es el trabajo?
La palabra trabajo
(en Francés 'travail')
Viene del latín
'tripalium' que
significa instrumento de tortura,
así que siempre que hablemos de trabajo nos estamos refiriendo a algo arduo.
El trabajo puede ser remunerado,
producimos
bienes o prestamos servicios a cambio de un salario.
El trabajo también puede no ser remunerado, como es el caso del trabajo
del hogar.
¿Qué es el trabajo doméstico? Es el trabajo del hogar,
'domus' significa hogar.
¿Qué hacemos en casa?
Mantenemos las cosas,
cuidamos de los hijos,
cuidamos a las personas,
y cuidamos del medio ambiente
y nos aseguramos de que estén felices, contentos.
Por eso, es un trabajo
que tiene que ser creativo
y si es un trabajo inteligente será creativo
y artístico también, por ejemplo,
una casa no es solo un sitio para dormir, es un sitio
en el que todos se sientan acogidos, que sea agradable,
que este bien decorado.
No es simplemente un espacio en el que poner camas, una mesa
y unos cuantos armarios,
sino que
intentaremos que sea un lugar
cálido.
Se tendrá en cuenta los colores, la decoración,
los cuadros,
las cortinas.
Es decir, se trata de un trabajo artístico.
Si la casa es concebida por la familia como un hotel,
no es un hogar
es un sitio impersonal.
La gran diferencia es que la casa pertenece a esa familia
y por lo tanto, en esa casa
cada uno tiene su sitio,
cada uno se siente acogido.
Creo que lo más importante para mí es la idea de que el trabajo
del hogar aporta felicidad
si, como dice Verlaine, ponemos mucho amor en ello.