Tip:
Highlight text to annotate it
X
Aprendimos a volvernos limitados.
No hay una sola persona responsable de eso
Es el juego de la Conciencia;
Nuestra propia Maya que debemos entender y trascender.
Es sólo mi modo de expresarlo en este momento.
Hay otros modos de verlo,
pero puede que no te sea desagradable.
Tu propia Maya, nuestra propia Maya está jugando con nosotros
Pero tú tienes el poder
Si no te divides a tí mismo; si has comprendido que
la imagen personal, la idea que tenemos de quienes somos,
es sólo un holograma del Ser.
Tú eres el testigo de eso, también incluso mientras hablamos
¿Te ha ocurrido alguna vez el estar hablando de algo que parece tan terrible,
y que de repente te encuentras partiéndote de risa
porque no puedes creer tu propia Maya?
Algunas veces, también ha venido gente a mi casa y
me han dicho, con un sentido espantoso de sufrimiento, ¿sabes?
algo como: 'Mooji... Es una cuestión de vida o muerte, ¿te das cuenta?'
Y yo escucho y en ese instante pensaba: '¿quién sino Maya podría hacer esto?'
Y algunas veces, tengo que decir: 'por favor, discúlpenme un momento,
tengo que ir al baño. Tengo que ir allí y...' [el público ríe]
Porque ¡es tan maleducado reírse en la cara del ego que se cree su propia proyección!
Serénate, serénate... [el público todavía ríe]
'Como estabas diciendo...'
Porque es tan ridículo; esto es un cuerpo mortal,
pero el Ser inmortal ha elegido moverse en él
para experimentar la sensación de la verdadera dualidad,
la sensación de la manifestación diversa la cual es en cierto modo su propia proyección,
pero no para quedarse dormido a su propia naturaleza trascendental.
Pero se enamoró de su Maya, y así nace el sufrimiento.
Parece algo así. ¿Como acabar con este sufrimiento?
No puedes terminarlo ahí afuera,
cambiando de sitio las piezas, no puedes.
Debes terminarlo aquí, debes terminar Maya aquí.
Sólo aquel que ha realizado el ser puede manejar Maya.
El que se identifica como persona no trascenderá Maya,
es tan potente que dicen que incluso los Dioses son engañados.
Sólo un sabio conoce Maya tal y como es.
El cuadro de Dios.
Y tú, el mismo, a través de nuestra propia introspección, de nuestra propia indagación,
que se comporta con respeto hacia este gran universo,
y llega a comprender, no con cinismo, sino con sabiduría,
reconoces otra vez tu propia naturaleza pura, que no está en ninguna otra parte,
está aquí, pero tú dices ' ¿cómo? ¿cómo no soy consciente de esto?'
Porque nuestras mentes están demasiado inmersas en la manifestación.
Estamos todavía regateando, comprando en la manifestación
con profunda creencia. Porque cuando te conoces a tí mismo, todavía estarás aquí,
todavía te moverás en el mercado, pero no con una ilusión falsa; entonces podrás gozar.
Hemos aprendido a volvernos limitados. La imagen personal, la idea que tenemos de quien somos, es sólo un holograma del Ser. Aquel que se identifica como persona, no trascenderá Maya.