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LA NOCHE DE LAS ZANAHORIAS
''Oh-la-la! Qué silencio! ¿Por qué tardaron tanto en hacerlo?''
Pensó Diego, el ciclista solitario, el amante de todo lo redondo,
y enemigo acérrimo de todo lo angular.
El hombre que lo tenía todo escrito en su cara.
''Basura!... '' pensó Diego al ver la rodilla de Julia.
Este era el segundo pensamiento que tenía esa mañana.
Oh, hijo, qué gordo estás.
Eres muy gordo para venir de donde venimos.
Suele pasar que tu vida es una sucesión de choques,
una cadena de relaciones rotas y decepciones.
Hay cambios irreversibles tomando lugar nos guste o no.
Diego, el hombre que luego de ver un solo ángulo recto sufrió durante
semanas eteras de náuseas, lo había experimentado todo,
y aún le dolía como una patada en el tendón de Aquiles.
Traición. Combinada con el abandono de principios.
La tristeza de Diego era tan poderosa como su ternura.
¿Cuál es la duración de la depresión de un ciclista?
¿Cuatro segundos? ¿Una eternidad?
Y entonces lo recordó ''Oh-la-la! Si! PGI!''
- Hola! - PGI.
- Soy Diego. - Recepción.
- ¿Tiene habitaciones para uno? - ¿Para uno? No lo creo.
- ¿Quién habla? - Diego!
- Bien, venga y veremos.
- Soy Diego... Diego... Diego, Aquí!.
¿Qué es esto, Victor?
Ahora, mantén tu lengua entre los dientes.
¿Una planta de energía o el crematorio?
Cada vez que Diego veía un edificio diseñado por Carl Christian Wintersberg
El recordaba a Franz.
Demasiadas esquinas, lo oía diciendo.
Demasiadas esquinas.
Diego luchó por llegar con crecientes náuseas.
No había vuelta atrás, Diego sabía que sólo había un camino -
De derecha a izquierda.
había una gran demanda para entrar al PGI
Cualquiera que no hubiera entrado aún era un contendiente.
Ser contendientes era su real propósito,
porque sabían que, una vez adentro, no tendrían nada qué hacer.
Las justificadas demandas de parte de los contendientes
Normalmente obtenían... Vagas respuestas.
Pasaporte, por favor.
Disculpe, no tengo el mío. Soy un inmigrante ilegal.
Victor adivinó de inmediato adónde pertenecía Diego
Pero mintió - Como siempre lo hacía.
Entonces Diego vió a Steffi.
Nada de ángulos, sólo redondez.
Steffi era un huevo duro.
El torbellino de adrenalina en la sangre de Diego empezó a calmarse.
Algo perdurablemente redondo había entrado en su vida.
Michael, la cebra
Michael era una cebra sin rayas,
quien con su fuerza de voluntad y algo de pintura blanca
había logrado lo imposible.
La última cosa en el mundo a la que Michael se parecía era a una cebra.
El pensaba que eso era sólo el comienzo.
Un largo y doloroso viaje había templado su espíritu,
Pero su cuerpo era frágil, en efecto, muy frágil.
Como todos en el PGI,
Michael tenía su propio y muy privado sueño.
Michael soñaba con casarse con la mujer más gorda del mundo,
tan pronto la hubiera encontrado y el estuviera listo.
Hola, soy una goma de mascar.
Todo sistema debería poner mucha atención al subsuelo
para detectar el momento en el que dejara de suspirar.
Ese momento podría ser llamado el principio del fin.
El misterio de Mikhail
La única habitación en la planta baja estaba ocupada por Mikhail.
Mikhail, quien soñaba con alinear a todos los habitantes del mundo
y hacerlos felices.
Sin embargo se veía impedido por una fuerza que lo halaba hacia el techo.
Este fenómeno era conocido en el PGI como el misterio de Mikkhail.
Metódico como era, Mikhail sospechó
que detrás de la aparente aleatoriedad de la aparición de esa fuerza,
había un patrón escondido.
El empezó a investigarlo en privado, apoyado por su inquebrantable fé
en la correlación no linear entre la cronometría y la expansión del espacio-tiempo
¿Era Mikhail consciente
de las concecuencias que sus acciones podrían traer?
¿Y dónde consiguió el ketchup,
cosa en la que ni se podía pensar en el PGI?
Helmuth, el verde
Helmuth odiaba los autos.
En su más brillante sueño vio a toda la gente del mundo
caminando con sus dos pies.
Así que decidió intentar ser un especialista en caminar.
Victor, el temporal
638.
Voy!
En realidad, Victor no era un inmigrante ilegal.
Victor era el gerente director del PGI.
La razón de que estuviera en recepción
era el artículo de minorías en los estatutos del PGI.
Victor aceptó toda la responsabilidad, porque no le importaba.
Era temporal.
Sólo necesitaba un ligero impulso,
un estímulo para subir a los pisos superiores.
Helmuth también tenía un sueño adicional, un sueño de volar.
Helmuth sabía que todo debía ser logrado paso a paso.
De cualquier modo, esto no lo previno
de sentir una gran solidaridad con todo lo que volara.
Inexplicable Rabieta
De vez en cuando, Diego era poseído por inexplicables ataques de ira.
Habitación 635
El gran Chellista ocupaba la habitación 635,
como una masa de una sustancia gelatinosa y traslúcida de un metro de espesor.
Estrictas líneas de botones dividían la babosa superficie de su cuerpo
en 64 sectores independientes.
El gran Chellista estaba conectado al mundo exterior
con cables de fibra óptica, y todo su mundo exterior,
increible como lo es,
estaba restringido a una pequeña bañera inflable llena de café blanco
en la bodega del PGI,
en la cual flotaba un pato de goma.
Los tres peores enemigos del Gran Cellista eran K, G, y B
que aparecían disfrazados como botones.
Ellos no dejaban que el Gran Cellista se concentrara en su principal tarea -
recibir poderosos combates de inspiración
con la ayuda de los impulsos que venían del mundo exterior.
Era su sueño recibir una batalla de inspiración fuerza cien.
K, G y B tomaban ventaja de cada momento de debilidad
y le producían horribles sueños llenos de malos presagios.
Primer sueño del Gran Cellista
El Gran chellista sueña
que Salchicha está enferma y tiene fiebre.
El Doctor Martens, la vieja bota, viene a verlo.
''No pienses en esa hamburguesa todo el tiempo, las hamburguesas no existen''
Dice el doctor Martens.
Salchicha está espantada de Hamburguesa.
No puede dejar de pensar en ella.
''Y tampoco existen tales cosas como los conejos''
piensa el doctor Martens cuando se va.
Gradual pero firmemente,
la frase estaba tomando forma
en la cabeza desesperanzada y post-modernista de Michael.
Puedes amar a la mujer más gorda en el mundo,
pero al mismo tiempo, no deberías quebrar.
Por enésima vez, michael llegó a la verdad
de que todas las cosas ingeniosas en el mundo eran también perfectamente simples.
Un observador podría haber tenido dificultad diciendo
si Mikhail realmente sabía qué estaba haciendo.
La línea que separaba el mundo tangible, medible con cronómetros,
del irracional era vago, como el origen del subsuelo.
Mikhail difícilmente hubiera pensado
que hacer una pregunta podría también dar una respuesta.
Una respuesta que lo hará pararse frente a la ventana
y mirar fijamente con ojos ciegos a los helicópteros
zumbando sin sentido en los cielos nocturnos,
y a los amenazantes paracaidistas.
Los gemelos siameses Bill & Boris
Boris, uno de los gemelos siameses, era un malévolo sádico.
Contra el muro, ¿verdad?
A la jaula del oso, ¿verdad?
Bill les temía a ambos. Bill le temía a todo.
Pero bill también era capaz de encontrar un sincero placer en todo.
Su sonrisa era conocida en el PGI como una ''sonrisa de Bill''.
Ocasionalmente, Boris se avergonzaba de ser un cerdo.
Sólo un paso separa a un sádico de un masoquista, declaró.
''Es alemán,'' pensó Diego.
Sólo era alemán, como todos los otros idiomas
de los que Diego no entendía una sola palabra.
Mikhail lo supo.
La fuerza que lo halaba se llamaba Helmuth. Helmuth.
Pero la fuerza ya no estaba. Se puso silenciosamente frente a la ventana
mirando fijamente con ojos ciegos a los helicópteros
zumbando sin sentido en los cielos nocturos.
Entonces vió a Helmuth, Su cuerpo delgado y musculoso,
sus apretados pantalones de cuero ***. Si, ese era Helmuth.
Mikhail, el traidor
Hay un tornillo que mantiene a todos los otros juntos.
Alfred tenía un tornillo.
Mikhail tenía algo muy parecido en la esquina de su habitación.
Era una supuesta entrada. Enviando sus datos para ser procesados,
Mikhail había entregado involuntariamente - involuntariamente?,
El código secreto. ¿Era esto el principio del fin?
Agua. Alfred, agua.
Alfred, agua.
¿Agua?
Partida de la Primera Dama
Alfred supo
que no había nada que pudiera traer de vuelta a la primera dama.
Agua. Alfred, a...
La señorita ***, quien había trabajado como cerrajera en al PGI,
era voluntaria en este trabajo.
La señorita *** se oponía al acoso ***,
por lo tanto ella quería experimentar
su verdadero significado.
Entonces le dijo a todos en el PGI que la presionaran,
sabiendo que un buen día...
La señorita *** no sabía exactamente qué haría en ese buen día,
pero lo sentía venir.
¿Tiene un cigarro?
Helmuth se paró firmemente en sus dos pies.
Se podía sentir el acero inoxidable en sus pasos.
Para él, las caídas se habían convertido en parte de su pasado reciente.
Segundo sueño del Gran Chellista
El Gran Chellista ve en su sueño
la solución al misterio de Mikhail.
La habitación de Helmuth estaba exactamente encima de la de Mikhail.
El torso de Helmuth tenía carga positiva,
y la cabeza de Mikhail carga negativa.
Helmuth, cayendo,
causa que Mikhail sea halado hacia el techo.
Mikhail nunca supo
que eran las caidas de Helmuth en el pasado reciente
lo que había destruido su vida.
El presente, para Mikhail, sólo contenía el saber
de que no quería volver atrás, y no podía ir adelante,
y sus melancólicas piezas para el piano.
Podría haber habido otra posibilidad,
Pero su cabeza negativamente cargada rehusaba contemplarlo.
Conejos
Sólo un completo ignorante podría dudar de la existencia de conejos.
Ellos decididamente existían.
En el momento en que los conejos
descubrieron cómo combinar la alta tecnología con el vodoo,
su posición en iniciar y controlar
los procesos de competencia global, se salió de toda competencia.
El rango de sus cada vez más amplios intereses de conejo
incluían prácticamente todo.
En un comienzo pequeños productores de ketchup,
los conejos se habían convertido en uno de los superpoderes del mundo,
pero su corazón aún pertenecía al ketchup.
Por lo pronto,
los conejos habían empezado un gran proyecto -
Ya que el ketchup contiene 83% de agua,
era racional llevar la producción de ketchup bajo el agua.
Ellos sólo debían encontrar el lugar adecuado.
234
Es bienvenido!
Estaba estrictamente prohibido dejar un puesto
sin un reemplazo competente.
Así fue como Jean-Paul entro al juego.
Y si esto no podia ser llamado el principio del fin, ¿qué podía?
Cuando tus zapatos estan llemos de agua,
no tiene sentido preguntar - ¿arriba o abajo?
Victor tenía suficiente agua en sus zapatos
para llegar, de hecho, muy alto.
Tercer sueño del Gran Chellista
El gran Chellista sueña
que Hamburguesa, el portavoz de los conejos
revela a su pasión secreta, Salchicha,
el plan de los conejos de usar el PGI para su producción subacuática de ketchup.
De acuerdo al plan, se construiría una represa,
El agua se estancaría, y todo el PGI se inundaría.
Salchicha entiende
Que sus sospechas acerca de Hamburguesa eran infundadas.
Su miedo y rabia desaparecen.
''Te amo, Hamburguesa'' Salchicha piensa.
Victor volvió la mirada,
pero no había indicios de nostalgia en sus ojos.
Él estaba seguro de que había una gran carrera para él esperándolo arriba.
Las noticias acerca del plan de los conejos
golpeáron al PGI como una botella de Chateau de Terrefort-Quancard,
cosecha '48, lanzada en aguas tranquilas.
Parecía que algo empezaba a moverse,
algo empezaba a madurar.
''Ahora!'' pensó Michael,
Y de repente Michael cayó en cuenta de una realidad preocupante,
que el mayor privilegio del PGI
- estar conectado de forma segura a tu propio tomacorrientes -
era también su más grande defecto.
Libre!
Si, prácticamente todos los huéspedes del PGI
estaban conectados directamente al circuito
y su libertad de movimiento era nula.
Estaban absolutamente impotentes ante el creciente nivel del agua.
Su única esperanza era La noche de las Zanahorias.
Una vez al año, había una noche
en la que los odiados conejos se convertían en zanahorias.
Por una noche, el mundo era libre.
la noche de las zanahorias no tenía fecha fija,
siempre era inesperada.
¿Por qué, entonces no podía llegar ahora,
cuando realmente se la necesitaba?
Sueño de la Noche de las zanahorias
Los contendientes para entrar se habían convertido en contendientes para salir.
Toda la situación en el PGI se caracerizaba
por una tranquila anticipación y un pánico pasivo.
Habían sólo unas cuantas excepciones.
Los conejos se consideraban a sí mismos una fuerza global,
y creían estar en todas partes, como el espíritu santo.
En realidad, los conejos estaban en el piso más alto del PGI.
Todos lo sabían, menos ellos.
Ahora, sígueme.
Demasiado para victor, entonces.
Aquí estás.
Si, mamá.
''Realmente es la noche de las zanahorias?'' pensó Helmuth.
''Aprendí a caminar en vano. ''
''Steffi es grandiosa,'' pensó Diego,
''pero habla demasiado... Y en alemán... ''
Y de repente, Diego vio, aunque aún angular...
Su propia bicicleta!
El alma de Diego se llenó de infinita ternura.
''Oh, cállate, Steffi!'' pensó Diego.
Las montañas aún estaban envueltas en la niebla matutina.
''Oh-la-la,'' Pensó Diego.
Sintió una creciente náusea.
Estaba absolutamente impasible por los eventos en el PGI
Al que nunca llegó a entrar.