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Todo lo que quería era viajar por el mundo...
Conocer nuevas personas y crecer...
Y aun así, queriéndolo o no,
todo estaba destinado a ocurrir.
Así pues pude convertirme en lo que soy hoy.
Un guardián del aura.
Y todo comenzó aquí, en esta misma habitación.
No obstante...
después de todo lo que pasó,
hay algo que todavía no anda bien.
Siento que se aproxima una batalla, una que sólo yo puedo luchar.
Arceus me advirtió que algo... algún tipo de poder, estaba viniendo...
Nunca me dijo exactamente qué.
Me dio un huevo, del cual nació el Lucario dorado.
Me ayuda a controlar y estabilizar mi aura.
Lo que más me intriga es esta manifestación de aura en tu espalda.
- Nunca había visto algo similar.
- Es la siguiente estapa del guardián.
Todavía no estoy seguro de cómo funciona, pero sé que necesito activar este poder
para purificar los Pokémon, y sólo puedo lograrlo con la ayuda de Lucario.
- Igual que con Reshiram...
- Sí, pude purificarlo.
Pero en verdad fue una mala señal, este Pokémon en concreto...
Es un mensaje. Estoy seguro.
Pero sobre qué o de quién, ni idea.
- ¿Por qué lo dices?
- Reshiram junto con Zekrom, son Pokémon que representan dualismos.
Yin-Yang, el bien y el mal, este tipo de conexión.
- Fue una prueba.
- Bueno, no esperaba que algo así volviera a pasar,
y mucho menos a ti alcanzar tu estado actual.
Pero no puedo dejar de pensar que todo lo que hemos pasado
sólo fuera un preludio...
- Fue una preparación para lo que viene.
No sé por qué, pero esto me da escalofríos.
- y nunca me había sentido así.
- Primo, lo que sea que venga, estamos aquí para echarte una mano.
Lo sé, pero esto no es todo... Me temo que no estoy listo.
Y si estás realmente dispuesto a ayudar, tendremos que ir aún más lejos.
¡Estás hablando con un campeón de la liga y un as del frente!
Los títulos no importan nada ahora. Tenemos que hacernos más fuertes.
Hemos estado contigo hasta hoy, no vamos a dejarte ahora.
- Estoy preparado para recibir tus órdenes.
- Esto sí que no me lo esperaba...
Aguardad...
¿Qué está pasando?
Flávio Jorge, estás arrestado. ¡Ríndete ahora!
- No tengo tiempo para esto... - ¿Qué está ocurriendo, Flávio?
Aún más, recuerda. Tenemos que ir aún a por más.
¡No te muevas o dispararemos!
No quiero hacerte daño, así que lo voy a preguntar de nuevo: ¿Qué está pasando?
¡Ven con nosotros, ahora!
No tengo tiempo para esto.
Señores, estoy esperando las justificaciones.
¡Nosotros somos los que ellos quieren! Invadís nuestra casa, apuntáis con armas a Flávio...
Carlos, cálmate. En resumen, no tenemos la menor idea de qué está pasando. ¿Nos lo podrías explicar?
¿Así que me estáis diciendo que no sabéis nada sobre esto?
Flávio es el responsable de centenares de muertes.
No... No puede ser él.
¿Desde cuándo no estáis con él?
Se fue hace algunos meses, pero me niego a creer que es Flávio.
- ¿Por qué se fue corriendo?
- Hay una fuerte fuerza maligna acechando.
Reshiram fue purificado por Flávio, lo vi con mis propios ojos.
- Te puedo asegurar que no ha cambiado de bando.
- Flávio, a partir de ahora, es considerado una amenaza.
Tenemos que hacer todo lo posible por capturarlo.
- Que tengas suerte... - Lo encontraremos.
Seréis los responsables de sus actos.
De algo estoy seguro y es que si realmente estuvo pasando algo con Flávio...
Nadie podrá pararle los pies...
no con métodos convencionales.
- Voy a llamar a los otros guardianes del aura. - Yo reuniré a los miembros de la Élite Escudo.
Tendrás lo mejor de lo mejor a tu servicio.
No quiero ninguna muerte más.
Quiero saber qué está pasando, luego os daré una sola oportunidad.
Sólo porque vosotros sois lo que sois...
Gracias, inspector. No lo vamos a decepcionar.
No había manera de saber que las cosas acabarían de esta manera...
Perdona, no vine antes, aunque eres el culpable de la mayor parte.
Lo sé, lo siento...
¡Podrías haberte calmado y dejarles explicar qué está pasando!
Hay asuntos más importantes, no podemos perder el tiempo. Ya lo sabes.
¡Ahora sé que la próxima vez que me digas de no ir contigo, no te haré caso!
Por cierto, usa esto así irás desapercibido.
- ¿Preparado para partir? - ¿Qué otra opción tengo...?
Flávio, a pesar de tener todo este poder, hay cosas que no puedes controlar...