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Decidimos sumarnos al proyecto Jóvenes y Memoria
luego del acto escolar del 24 de marzo de este año
donde nos enteramos que tres chicos de nuestro colegio
eran parte de los 30.000 desaparecidos que había dejado la última dictadura cívico militar en nuestro país.
Esta noticia nos impactó, ya que nunca antes habíamos escuchado nada de ello.
De hecho, nos llevó a preguntarnos:
¿Cómo era el Nacional en ese momento?
¿Qué nos sucedería si viviéramos en esa época...
en comparación a la vida escolar actual?
Nosotros acostumbrados a vivir en Democracia
Nosotros...
Nacidos en Democracia
Para ingresar a esta escuela había que ingresar a través de un examen de ingreso
entonces los alumnos que entraban
entraban fruto de un esfuerzo muy grande.
Repetir significaba quedar afuera de la escuela.
No se olviden también que el respeto estaba visto desde afuera con el uniforme.
Las chicas de guardapolvo, pollera larga
medias, zapatos, como corresponde
si querías ver algo era la rodilla.
Y los varones estrictos, blaizer, camisa, corbata, pantalón.
Por ejemplo, había una regente que cuando veía que una alumna traía el guardapolvo por encima de la rodilla
frente a sus compañeros le bajaba el ruedo
y se lo ponía en el largo que a ella le parecía que el guardapolvo tenía que estar
que era por debajo de la rodilla.
Y quedaba deshilachado, y lo digo también en un nivel metafórico
porque no solamente de tu guardapolvo colgaban hilos
sino que vos en esa situación de alguna manera
era una situación fuerte, ¿no?.
En cierta forma tendría que ser una que aplica el colegio, que es venir acorde a lo que ellos dicen
con ropa que no llame la atención ni nada
pero estos últimos tiempos que yo noté eso los alumnos no la respetan mucho. O el pelo corto.
En mi caso yo no uso la vestimenta que dice, la remera del colegio, y a mí nunca me dijeron nada.
Acá verdaderamente encontrarse con una diversidad de que podés traer el uniforme
o no podés es una decisión tuya,
no te discriminan por el tema de la sexualidad, no te discriminan por ejemplo,
si tenés una orientación plural de la sexualidad.
Yo creo, que debo haber tenido unas 10 horas libres en todo el secundario.
Había que estar sentado, era la pelea de estar sentado haciendo ¿qué?
Veníamos acá a este espacio, biblioteca
buscábamos ajedrez, o hacer alguna tarea...
pero no podías estar sin hacer nada, eso de estar parado, viajando, dialogando
no era así.
Una escuela antigua a esta es como que...
como que los profesores eran más formales
no hacés tal cosa y "pum" con la regla en la mano así, como que te pegaba.
Ahora que un profesor te toque, se vienen todos los problemas
se viene tu vieja, se viene la policía.
Se pedía silencio...
y se hacía silencio...
se respetaba el silencio y los preceptores se paraban delante de sus cursos
y nos miraban
y nos callábamos...
Y con los profesores era mucho respeto. Las horas de clase en un silencio…
A parte, teníamos que tomar nota porque no había fotocopias.
Bueno y malo, al mismo tiempo.
Ya no hay un respeto hacia otro compañero es como...
un boludo, un tarado, no tenemos nombre.
Cuando toca el recreo uno sale al patio...
se encuentra con los amigos. Habla, charla un rato
si quiere puede ir a comprar al buffet, ir al baño
hasta que toca el timbre y entrás de vuelta al salón
Yo más que nada en los recreos...
debato sobre el Centro de Estudiantes, todo el tiempo
debatir, sociabilizarme con los demás, ver las miradas de los otros.
Creo que es un lindo lugar más que nada en esta escuela que hay mucha diversidad de gente
para encontrarse con los demás.
Deporte.
Según las épocas...
fútbol.
y según otra época posterior, Fórmula 1.
Y en todo caso la política la llegábamos a hablar
en el patio o en las salidas que hacíamos.
Si vos ves una foto de aquella época
parecía el colegio militar cuando egresan la camada que van a ser generales,
porque eran filas perfectas, gente totalmente uniformada.
Hoy los alumnos están dentro de la organización de los actos.
Había sanciones que tenían que ver con las amonestaciones
a las veinticinco amonestaciones te expulsaban de la escuela.
Y quiero remarcar que lo que era expulsar, significaba que ese año vos no podías seguir cursando
y debías cursar al otro año en otro colegio
con la mancha de que en tu boletín dijera que vos habías sido expulsado.
Bastaba con que te miraran un poquitito fijo
¡Listo!
Entonces tampoco había tanto que arreglar.
Siempre hubo casos de alumnos que tuvieron sus temas de disciplina
esos chicos eran expulsados.
Y ya te digo lo que habíamos dicho anteriormente, chicos que se escapaban por una ventana
chicos que se peleaban fuera de la escuela, entonces la escuela: "Vengan para acá, ¿qué paso?"
"Listo, 25 amonestaciones, ¡afuera!"
O fumar en el baño, que eso se dió en todas las épocas, también era motivo para algo severo
para una sanción severa.
Tener un parte de amonestaciones, sea la causa que fuera
que arrancabas con 5, era una gran reprimenda en tu casa
y mucha vergüenza entre tus compañeros.
Tenías muy pocas posibilidades de dar tu veredicto
de decir vos lo que había pasado
era escuchar al docente y tomar notas en los famosos partes de amonestaciones
Yo tengo profesores que son totalmente distinto
que tienen una visión de la libertad, de la proyección en el ámbito de debatir
son como más abiertos y creo que esa es la verdadera enseñanza.
“El profesor siempre tiene la razón aunque no la tiene”
Era algo como indiscutible. No te pasaba por la cabeza discutirle.
Siempre había alguien que discutiera
pero ese alguien que discutiera duraba 3 meses, 5 meses
o le decían “váyase” o lo expulsaban.
No había una cuestión de cuestionar.
La verdad los profesores hay varios que no tienen problema
si es que tenemos que participar en el Centro o dar una opinión
hay algunos casos en los que se puede armar algún debate
pero también están los otros profesores los cuáles no quieren.
No había Centro de Estudiantes tampoco, estaba prohibido.
El Centro ya había sido disuelto en el 75´, en la época de la triple A.
Cuando en mi curso me eligen como delegada, yo llego a mi casa
¡Feliz!
a contar que iba a formar parte del Centro de Estudiantes y que teníamos pensado proponer cosas...
Y me acuerdo que mis viejos se pusieron serios
y...
y mi papá me dijo de ninguna manera...
olvidate...
asi eh...
Y en el Centro de Estudiantes
se hacen asambleas, son abiertas a todos los chicos.
Uno puede ir dar su opinión sobre distintos temas, hablar, expresarse.
también hay comisiones de trabajo que las integran los chicos que quieren.
Y la partición es abierta, no se le prohibe a nadie que participe.
Después tuvimos un problema...
Un par de compañeros que desaparecieron.
Tuve un profesor de castellano, que es lengua actualmente,
que de repente dejó de venir
el argumento fue que
supuestamente había tomado una licencia. ¡No, no!
él vino en una lista
se llamaba lista negra, después se sabía.
Acusado de comunista.
Todavía no éramos tan conscientes de lo que estaba pasando
pero igual tampoco comíamos vidrio. ¿No?.
Porque teníamos profesores que nos hablaban al respecto de lo que estaba pasando.
No se olviden que también teníamos Educación Cívica en las escuelas
y había un profesor que te dice:
"Ahora todo está todo subordinado a estatutos militares..."
"y por ahora está guardada la Constitución Nacional"
Cuando se empezó a saber que había gente que desaparecía, no se habló más nada.
Se cerró todo, la posibilidad de soñar, trabajar, estudiar y todo lo demás.
Yo creo que recién ahora estamos en un proceso de salir de a poco con esto.
Dos compañeros nuestros...
primero fue Jorge La Cioppa y después Raúl Lagraña,
en el momento fue que desapareció y preguntamos así entre nosotros,
nadie sabía nada, nadie sabía nada.
Van a la casa de la hermana, la secuestran a ella
la hermana también era egresada de acá, dos años anterior.
Se llamaba Elisa Lagraña.
La deuda que yo creo que tenemos con ellos nada más
como para que no se pierda
que más que menos nosotros seguimos con nuestra vida, tenemos hijos
un poco nuestra existencia se prolonga mucho más allá que sólo desaparecer
hemos escrito cosas
hemos construido cosas
pero estos pibes de repente desaparecen.
Ustedes tienen que tener presente que los chicos que fueron a la guerra tenían unos años más que ustedes, nada más...
que fueron ofrecidos como carne de cañón
que fue una locura, una empresa totalmente descabellada y loca.
Eso, para muchos nos hizo el clic que necesitábamos para decir:
“Bueno basta, basta de todo esto porque, ¿A dónde vamos a ir a parar?”
Muchos, yo no fui, pero mucha gente se alegró de esta cuestión triunfalista.
Y a veces me planteo yo: ¿Qué hubiera pasado si hubiéramos ganado la guerra?
No sé que hubiera pasado, ¿no?
¿Cuántos años más hubiera durado?
Tres pibes desaparecidos...
No, no me sorprendió mucho porque bueno en la dictadura sabemos...
sabemos todo lo que ha pasado y todo lo que se consideraba subversión
que hasta incluso la vestimenta se consideraba motivo de desaparición
Pero me impactó que sea un caso tan cercano, por ejemplo, si yo hubiera vivido en esa época...
también me desaparecían, terminaba...
Y ahora veo que hay bastante participación
y que me parece muy bueno y que hay que seguir incentivando eso.
Y ojalá, ojalá...
que todo eso que pasó
como final por mi parte, sirva para muchos chicos de hoy entender
que viven en Democracia, que viven en Libertad.
Y gracias a Dios pueden decir lo que pueden decir...
y que gracias a Dios los asesinos están donde tienen que estar...
en cárceles comunes.
Yo tengo un tío abuelo desaparecido y verdaderamente sabía que golpeó mucho
y fue un arrancamiento de cultura total
y de vida.
Que verdaderamente creo que eso no va a volver a pasar nunca.
Y ver a los jóvenes comprometidos en recordar y rescatar la memoria
más allá de que estamos en este proyecto de... están en el proyecto de Jóvenes y Memoria.
En todo lo que es rescatar la memoria yo creo que sería importante esto de hablar con nuestros abuelos
hablar con, más que nada, con los abuelos de ustedes por que son la generación, ¿no?
Los tios, los primos... ver... ¿Qué pasaba en tu época?
Porque esto es algo importante para que reflexionemos también en familia y con los nuestros, ¿no?
Porque uno ahí descubre historias
que ni siquiera se imagina, ni siquiera se imagina...
Votar representantes, charlar con amigos y poder debatir
crear canciones, ponerme la ropa que mejor me representa,
si quiero puedo participar del Centro de Estudiantes
o militar para lo que creo
esa es la vida que llevo desde que nací.
Si un día me despertara y me encontrara con que me han sacado las posibilidades de elegir
ya no sería yo mismo.
Y al escuchar todos estos testimonios que fuimos grabando
me hace valorar más esa frase que a veces resulta como natural
que no existe otra opción que
“vivir en Democracia”.
Pero hubo otro tiempo, donde la sociedad argentina tenía impuesto de qué modo y manera debía vivir
donde le habían quitado los derechos civiles, sociales, entre tantos.
Eso te hace valorar las luchas alcanzadas
y reflexionar lo mucho que queda por conseguir.
Sin memoria...
Todo se podría volver a repetir.