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Cuando considero adonde nos puede llevar la innovación y educación,
pienso en estos astronautas.
Empezaron fuera en el espacio,
apuntando primero a sus propios países.
Y en muy corto tiempo, su conocimiento
del mundo en su totalidad creció.
En muchas aspectos éste es nuestro viaje.
Empezamos pensando en nuestros propios territorios,
y nuestras propias circunstancias,
y a través de la educación y una expansión de esa visión,
nuestro conocimiento crece,
y nuestros limites pueden romperse.
Y antes adentrarme más en el futuro y el presente,
les quiero contar una historia verdadera del pasado.
Es la historia de una joven de Oriente Medio de unos 19 años.
De un pueblo donde si algo de cabello
sobresalía del pañuelo, o si sus ojos llamaban la atención de un hombre
que no era de su familia, podía perder su honor.
Donde estaba prohibido que las niñas fueran a la escuela
y donde conocían por primera ves a sus esposos, la noche de bodas.
Y esta niña en particular era animada, conocida por su inteligencia,
se puso firme y no se casó
hasta poco más después, muchas niñas en su pueblo.
Entonces, tenía 15 años el día de casamiento
y quedó gratamente sorprendida al conocer a su esposo.
Era simpático, parecía respetuoso,
era agradable a la vista,
y entonces la vida parecía tornarse bien para ella.
Y tras unos meses de matrimonio
ella estaba embarazada del primer hijo.
Y su esposo, quien viajaba afuera del pueblo
– viajaba por trabajo– y regresaba,
pidió verse con los padres de ella.
Y la costumbre de ese tiempo era que ella viviera con sus padres.
Y les informó que quería que su joven esposa tuviera educación.
Como madre de sus futuros hijos, quería que supiera leer e escribir.
Y esto escandalizo tanto a la familia, que lo sacaron de la casa.
Quisieron anular el matrimonio.
Y quisieron que ella abortara a ese niño engendrado por alguien
con tendencias tan locas.
Y por la primera vez en su vida, ella desobedeció a sus padres
Y escapó de la casa e encontró a su esposo en un pueblo cercano.
Y siguió adelante y tuvo este hijo, con gran riesgo y temor.
Y ese bebé nació saludable –una niñita
que creció para convertirse en una de las educadoras más relevantes del siglo XX en Irán.
Y ese bebé era mi tía.
Y esta pareja joven eran mis abuelos.
Y comparto esto porque su valor de romper con el pasado,
y su convicción de proveer una educación para sus hijas y sus hijos,
tuvo un impacto tan profundo que hoy estoy aquí antes Uds.
Y parte del impacto, solamente una generación o dos,
la de mis padres y mi generación,
éstos son unos de los lugares donde sus hijos y sus nietos
han ido a estudiar y a dirigir.
Y la educación y esta visión de romper barreras fue el catalizador.
Y comparto esta historia, no porque seamos tan únicos,
sino porque vivimos en estos tiempos cambiantes.
Hay millones de historias similares, donde la educación sirvió como catalizador
y personas han roto barreras inimaginables.
Y, por ejemplo, estos niños que conocí, que viven
en un barrio violento lleno de pandillas en Los Ángeles,
sus padres son trabajadores emigrantes mexicanos,
me dieron esa presentación en chino mandarín.
O la madre que habría sido quemada viva
siendo viuda,
es ahora empresaria y su hija asistirá la universidad.
O hasta este poder de información que estamos sosteniendo en la palma de nuestra mano
Esto era inimaginable para la mayoría de nosotros hace 5 años.
Y ahora es nuestra nueva normalidad.
Y esto es la historia de nuestro tiempo.
Y muchos de nosotros, si destapamos nuestras propias historias de una o dos generaciones,
nos damos cuenta que lejos hemos llegado.
Entonces, pienso que el próximo paso en este proceso, es este desafío,
que creo que oiremos hablar todo el día,
es esta conexión en el nivel de relaciones humanas.
Sabemos que estamos más enchufados de lo que hemos estado antes.
Pero no estamos necesariamente más conectadas.
¿Cuál es el elemento humano allí? Somos una sociedad global.
¿Qué es lo que crea a un ciudadano global como parte de eso?
Y he pensado en esto mucho tiempo.
Y fui afortunada de crecer con esta mentalidad de ciudadanía global.
Y tuve la oportunidad de pasar unos pocos meses viviendo con mis hijos en Gambia
en África Occidental hace unos años atrás.
Y mire a través de los ojos de mis tres hijas.
Esta experiencia de hacer muchos amigos nuevos con orígenes muy diferentes a los suyos.
Y encontré por casualidad esta cita:” Sé amigo de la raza humana entera.”
y cuando pensé cómo transmitir ciudadanía global a la gente
que si lo ven en el tele, cambiarían el canal.
Así era la mayoría de las personas que conocía.
Y me di cuenta que dentro esta idea de amistad, que también es muy universal,
y hablo de esto a audiencias muy diferentes,
y les pregunto: "¿En qué piensan al pensar en un buen amigo?“
Y desde los pequeños de jardín de infancia hasta los ejecutivos
de cualquier trasfondo religioso, de cualquier origen cultural,
no importa cuanto dinero tienen o educación
las respuestas son casi siempre las mismas.
Y me dicen
un buen amigo es alguien en el que confío,
que es amable conmigo, que se preocupa por mí,
que me ayuda en un día pesado,
están allí por mí,
no me juzga,
nos divertimos juntos.
Entonces, esto es…ya captan la idea.
Y verdaderamente, al observar qué se requiere para ser un ciudadano global, es ser un buen amigo
de todo el mundo.
Es tan simple como eso.
Y pienso que eso también impulsa la calidad de éxito que buscamos para esta nueva economía.
El tipo de persona que quieres contratar, con que quieres trabajar,
es adaptable y flexible a nuevas ideas, son amables contigo , son confiables
son responsables, son trabajadores,
también adaptables a varias circunstancias y culturas
Sus sentido de humor puede cruzar muchas barreras culturales.
Pueden comunicarse en una gama de maneras, en una gama de ideas,
esa es la persona con que queremos trabajar.
Eso es lo que tomamos en cuenta.
Un ciudadano global también es un modelo de lo que buscamos en nuestros trabajadores.
Y esto también da cuenta de nuestros objetivos para educación del siglo XXI.
Y pienso que hemos estado estrechamente centrados en ser competitivos
que eso realmente no nos permite lograr esta ciudadanía global.
Entonces, la medida del éxito de mi hijo es en qué universidad prestigiosa ingresará,
y nuestra nación mira que competitivos somos.
Estamos en una carrera hasta la cima, esto implica un juego de suma cero.
Nosotros ganamos, ellos pierden.
Pero sabemos que podemos ser mucho más que eso.
Y la competición es buena, pero es una pieza de una rompecabezas mucho más grande.
Es la persona que puede colaborar, competir y usar esa tecnología
en una manera que servirá al bien común.
Y así es como los involucramos.
Y así es cómo resolveremos los problemas más grande que afligen nuestro planeta:
Ambientales, tecnológicas, de salud, del bienestar, de resolución de conflictos, de seguridad.
Esos no los soluciona un número uno individual y competitivo.
Y pienso que es nuestra opción. Tenemos que hacer una elección
de cómo cambiar durante esa mentalidad.
Entonces, cuando miramos estas imágenes de estos niños en Beijing,
o estas niñas, demandando democracia en la plaza Tahrir
quienes por casualidad llevaban un hiyab,
¿los miraremos como una amenaza , como la competición,
o podemos tomar la decisión de cambiar nuestra mentalidad,
y pensar de su humanidad y posiblemente verlos como nuestros amigos?
¿Como nuestros compañeros y colaboradores, como posibles colegas de nuestros hijos?
Y este cambio de mente también requiere un cambio de los prejuicios que tengamos
Y comparto esta fotografía frecuentemente al hablar a audiencias de varias edades.
Y me doy cuenta que hay muchas suposiciones que ellos hacen.
Y comparten conmigo lo que están viendo en la foto
Pero yo compartiré con Uds. lo que en realidad está pasando aquí.
Esta familia —llegamos a ser gran amigos —.
El padre es un profesor de francés en la escuela local, y la lengua oficial allá es inglés.
Y el, como muchos miembros de su comunidad, habla aproximadamente cuatro idiomas.
Y la gente nota que, ¡vaya! hay muchos niños en esa foto.
Cuatro de los niños son sus hijos. Cuando les preguntamos que
si podía tomar un foto de la familia
Era extraño no incluir a esos niños que por casualidad estaban jugando allí.
Y eso verdaderamente habla mucho sobre su sentido de comunidad y de cómo se educa a estos niños.
Y esa es toda una conversación que podemos tener con nuestros hijos,
y de cómo cuidamos de los niños entre nosotros.
A veces ellos notan que en las expresiones de las caras de los niños que no parecen muy felices.
Y ellos pueden hacer muchas suposiciones de lo que tal vez está pasando,
Pero en realidad, simplemente segundos antes de que tomamos la foto,
estaban brincando, riendo, jugando, muy felices.
Y esto verdaderamente demuestra una idea muy sutil de respeto.
Es una idea muy sofisticada de cómo se mira el respeto .
Ellos no me enseñan los dientes y sonriendo conmigo, al extranjero,
pero están ahí en un modo respetuoso.
Muchas veces, los niños de secundaria en particular, notan la camisa de “Hot Wheels”
y dicen: “¡Yo tenía esa camiseta!”
Y en realidad, yo digo, “Tal vez esa era tu camiseta.”
Entonces, ¿dónde llegan tus cosas? Es algo para pensar.
Y la razón para haber tomado esa foto, era porque si ven el niño con la camiseta roja,
tiene un gallo.
Y estábamos sentados al otro lado en esos banquillos, teniendo una conversación,
y este gallo entrando y saliendo por donde estábamos sentados, y era imponente.
Bueno, estaba manejando el cotarro
Y era este gallo gordo y saludable.
No se ve estos gallos gordos allá.
Tenía hermosas plumas, negras y brillantes, con plumas en la cola turquesas.
Y solo hice un comentario, “Qué gallo tan hermoso.”
Y lo dejé así.
Y nos disponíamos a irnos, y la esposa dijo algo en el oído al esposo.
y asintió con la cabeza, y antes de saberlo yo,
ella me echó el gallo a la cara. Y me sorprendió,
y la persona que estaba conmigo rápidamente cambio de inglés a wolof,
porque eso es lo que se hace en un entorno social,
y él les explico, muy respetuosamente,
que estábamos honrados por este regalo, pero que no podíamos llevarnoslo.
No nos íbamos directamente a la casa, no podríamos cuidarlo.
Entonces, en vez de eso, ¿podríamos tomar una foto de su familia con el gallo?
Y así es como terminamos con la foto.
Pero la verdadera razón porque compartí esto con Uds. es porque después de irnos
estuve pensando en este gesto.
Y hice una cálculo rápida de lo que les significo ofrecernos este regalo.
Y es casi lo mismo como que si te conozco hoy por primera vez y hago un comentario de este auto
estacionado fuera de tu casa y digo: “Ese es un auto muy lindo.”
Y al salir de la puerta , me ofreces las llaves.
Y eso es imaginable.
Tenemos mucho más cosas que regalar, pero ellos lo regalaron.
Entonces, ahora cuando miro esa foto, no los veo como
qué suposición podríamos haber estado haciendo de personas por las que debemos de sentir lastima.
Y como un caso de caridad.
Pero verdaderamente es este espacio de dignidad y es este ejemplo de generosidad,
de inmensa generosidad.
Y pienso que esta historia va mucho más allá de lo que sucede en la foto.
Y esta habilidad de poder relacionar con ellos como sus amigos, y lo que podemos aprender de ellos.
Ciertamente sus necesidades todavía son grandes, pero hay mucho más que sucede allí,
ahora que podemos apreciarlo. Y considero cómo empezamos a realizar ese cambio
de mente, no tiene que ser tan complicado.
Empezamos con estos micro pasos muy simples.
Empezamos con lo que amamos, y no tiene que sentirse como tarea
Entonces, cambiando nuestra lista de compras, invitando amigos del barrio a nuestra mesa,
para compartir sus historias de vida, sus orígenes, y simplemente ser su amigo.
Y es divertido y es bueno para nosotros
La escuela Thunderbird International Management School hizo un encuesta de sus recién graduados,
Y les preguntaron "¿Cuáles fueron unas de
las experiencias más beneficiarias para Uds. en nuestro programa superior de gestión?”
Y estos eran los que estaban trabajando exitosamente en trabajos internacionales.
Y dijeron que era la experiencia de compartir almuerzo con diversos compañeros de clase.
en la cafetería. Entonces la idea es de empezar con lo que amas.
Entonces si eres fanático del deporte, puedes usar esa experiencia
sobre los deportes que amas a través de muchas maneras.
Uds. saben, el resumen simplemente es: “Sigan, miren, den, aprendan, escuchen.”
En muchos niveles a través de tu deporte favorito.
Pueden empezar con los Olímpicos y la Copa Mundial.
Pero hay eventos pasando todo el tiempo en todos lados, y muchas veces en cable básico.
Una tarjeta de la librería o una conexión del internet puede abrir nuevo mundos.
Entonces, tomar la decisión consciente de lo que van a leer,
de lo que van a escuchar, de que película van a enseñar,
en la noche de cine en tu sala,
no tiene que ser tan complicado.
Pero por supuesto, esa experiencia nos lleva a un lugar nuevo. Y es muy simple.
Es verdaderamente accesible.
Y finalmente, creo que todos estos juntos nos ayudan a conectar los puntos
de educar a estos ciudadanos globales
que pueden usar la tecnología, que usan lo que damos en la aula.
Pero estos están avanzando este efecto transformador
Es un cambio de la mente, y son las cosas pequeñas que hacemos.
Pero juntos pueden hacer un gran cambio.
Gracias
(Aplauso)