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¡Este es el ESOcast!
Ciencia de vanguardia y vida cotidiana en ESO,
el Observatorio Europeo Austral,
explorando la última frontera con nuestro anfitrión Dr. Joe Liske, alias Dr. J.
Hola y bienvenidos a este episodio especial de ESOcast.
En la antesala del 50 aniversario de ESO en octubre de 2012
exhibiremos ocho capítulos especiales
que retratan los primeros 50 años de ESO explorando el cielo austral.
Capturando la Luz
Durante medio siglo,
el Observatorio Europeo Austral ha mostrado el esplendor del Universo.
La luz estelar llueve sobre la Tierra.
Los telescopios gigantes capturan los fotones cósmicos,
y alimentan las modernas cámaras y espectrógrafos.
Las imágenes astronómicas de hoy son muy diferentes de las de la década de 1960.
Cuando ESO comenzó, en 1962,
los astrónomos usaban placas fotográficas de vidrio.
Eran poco sensibles, imprecisas, y difíciles de manipular.
¡Qué diferencia han hecho los detectores de hoy en día!
Capturan casi todos los fotones.
Las imágenes están disponibles instantáneamente.
Y, lo más importante,
pueden ser procesadas y analizadas por programas informáticos.
La astronomía se ha convertido realmente en una ciencia digital.
Los telescopios de ESO usan algunos de los detectores
más grandes y sensibles del mundo.
La cámara de VISTA tiene no menos de 16 de ellos, con un total de 67 millones de píxeles.
Este enorme instrumento captura la luz infrarroja de las nubes de polvo cósmico,
estrellas recién nacidas,
y lejanas galaxias.
El helio líquido mantiene los detectores a -269 grados.
VISTA hace un inventario del cielo austral,
como un explorador que inspecciona un continente desconocido.
El Telescopio de Rastreo del VLT es otra máquina de descubrimiento,
pero ésta funciona en longitudes de onda visibles.
Su cámara, conocida como OmegaCAM, es aún más grande.
32 CCDs se unen para producir espectaculares imágenes
con unos increíbles 268 millones de píxeles.
El campo de visión es de un grado cuadrado
— cuatro veces el tamaño de la Luna llena.
OmegaCAM genera cincuenta gigabytes de datos cada noche.
Y estos son gigabytes maravillosos.
Los telescopios de rastreo como VISTA y el VST
también examinan el cielo en busca de objetos extraños e interesantes.
Luego, los astrónomos usan el gran poder del VLT
para estudiar estos objetos con exquisito detalle.
Cada uno de los cuatro telescopios del VLT
tiene su propio conjunto de instrumentos únicos,
cada uno con sus propias fortalezas especiales.
Sin estos instrumentos, el ojo gigante de ESO en el cielo sería, bueno, ciego.
Tienen extravagantes nombres como ISAAC, FLAMES, HAWK-I y SINFONI.
Máquinas gigantes de alta tecnología, cada una del tamaño de un pequeño automóvil.
Su propósito:
registrar las fotones cósmicos y recuperar cada trozo posible de información.
Todos los instrumentos son únicos, pero algunos son un poco más especiales que otros.
Por ejemplo, NACO, aquí, y SINFONI usan el sistema de óptica adaptativa del VLT.
Los láseres producen estrellas artificiales
que ayudan a los astrónomos a corregir la distorsión atmosférica.
Las imágenes de NACO son tan nítidas como si hubiesen sido tomadas desde el espacio exterior.
Y luego están MIDI, y AMBER. Dos instrumentos de interferometría.
Aquí, las ondas de luz de dos o más telescopios se unen,
como si fuesen capturadas por un único espejo gigante.
El resultado:
las vistas más nítidas que puedas imaginar.
Pero la astronomía no sólo se trata de tomar imágenes.
Si lo que buscas son detalles,
debes diseccionar la luz estelar y estudiar su composición.
La espectroscopia es una de las herramientas más poderosas de la astronomía.
No es de extrañar que ESO ostente algunos de los espectrógrafos más avanzados del mundo,
como el poderoso X-Shooter.
Las imágenes tienen más belleza, pero los espectros revelan más información.
Composición.
Movimientos.
Edades.
Las atmósferas de los exoplanetas que orbitan estrellas lejanas.
O galaxias recién nacidas en el borde del Universo observable.
Sin la espectroscopia, sólo seríamos exploradores que observan un hermoso paisaje.
Con la espectroscopia,
aprendimos acerca de la topografía, geología, evolución y composición del paisaje.
Y hay una cosa más.
A pesar de su belleza serena, el Universo es un lugar violento.
Hay cosas que hacen ruido por la noche,
y los astrónomos quieren capturar cada evento.
Las estrellas masivas terminan sus vidas en ***ánicas explosiones de supernova.
Algunas detonaciones cósmicas son tan poderosas
que eclipsan brevemente a su galaxia madre,
inundando el espacio intergaláctico con rayos gamma invisibles de alta energía.
Pequeños telescopios robóticos responden a las alertas automáticas de los satélites.
En cuestión de segundos, se ponen en posición para estudiar las repercusiones de esas explosiones.
Otros telescopios robóticos se centran en eventos menos dramáticos,
tales como planetas lejanos que pasan por delante de sus estrellas madres.
El cosmos está en un estado constante de cambio.
ESO intenta no perder ni un solo latido.
La cosmología es el estudio del Universo como un todo.
Su estructura, evolución y origen.
Aquí, capturar tanta luz como sea posible es esencial.
Estas galaxias están tan lejos que sólo un puñado de fotones alcanza la Tierra.
Pero estos fotones tienen pistas sobre el pasado cósmico.
Han viajado durante miles de millones de años.
Pintan un cuadro de los primeros días del Universo.
Es por esto que los grandes telescopios y los detectores sensibles son tan importantes.
Durante los últimos cincuenta años,
los telescopios de ESO han revelado algunas de las galaxias y quásares más lejanos
jamas observados.
Incluso ayudaron a descubrir la distribución de la materia oscura,
cuya naturaleza aún es un misterio.
¿Quién sabe lo que nos traerán los próximos cincuenta años?
Soy Dr. J y me despido de este episodio especial de ESOcast.
Nos vemos la próxima vez en otra aventura cósmica.
ESOcast es producido por ESO,
el Observatorio Europeo Austral.
ESO, el Observatorio Europeo Austral,
es la principal organización intergubernamental de ciencia y tecnología en astronomía,
entre los observatorios basados en tierra y espaciales, ESO es el observatorio más productivo del mundo.
Transcripción por ESO; traducción por Felipe Campos.