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María Eugenia Farías - Puna, estromatolitos, origen de la vida y ciencia extrema.
Soy científica y les voy a contar la historia de un descubrimiento.
Este descubrimiento comenzó con muchas preguntas
que me hacía desde chica.
Por ejemplo, cuando terminé de hacer el catecismo
y tenía que tomar la primera comunión,
no me quedé muy convencida porque no encontré,
después de haber visto todo el Génesis, el antiguo testamento y el nuevo testamento,
¿dónde estaban los dinosaurios?
Mi papá, que era científico me mandó a hablar con un cura.
Después, a los 10 años, empecé a tener pasión por los tiburones blancos.
En ese momento en la revista National Geographic.
Pero mi primer gran crisis existencial
fue leyendo a Carl Sagan.
Leyendo a Carl Sagan me enteré y me di cuenta que estamos en un tiempo y en un somos un punto diminuto
en el tiempo y en el espacio que es infinito.
¿Cómo hacer para dejar huella de nuestra existencia como personas, como comunidad, como sociedad, como especie,
en un tiempo y en un espacio tan infinito?
Cierren los ojos e imagínense el infinito.
Algo que no termina, y no termina, y no termina, y no termina y un Rivotril por favor,
porque me daba muchísima ansiedad eso, desde chica.
Si a eso le sumamos el tiempo, tener la idea que hace 13.000 a 15.000 millones de años fue el origen del Universo,
que la Vía Láctea tiene alrededor de 13.200 millones de años,
que el planeta Tierra tiene alrededor de 4.500 millones de años
y que el primer registro de vida en el planeta Tierra tiene 3.800 millones de años.
Pero no necesariamente, la vida se tiene que haber originado en el planeta Tierra.
Cuando se estudia el Universo, se encuentra que ese universo infinito
está plagado de moléculas orgánicas.
Esas moléculas orgánicas son los ladrillos de la vida.
La vida podría estar viajando de planeta en planeta.
Hace falta una sola célula, una sola molécula, una bacteria para infectar de vida un planeta.
Y esta molécula, esta bacteria, esta espora de vida
podría estar viajando de planeta en planeta.
Esto podría pasar en todo el Universo.
Pero veamos qué es lo que pasa en el Sistema Solar.
En el Sistema Solar, el planeta más cercano que tenemos a la Tierra es Marte.
La vida podría haber venido de Marte.
¿Por qué podemos decir eso o hipotetizar eso?
Porque Marte, hace miles de millones de años, no era un planeta rojo,
sin oxígeno o sobre todo con agua, como es en este momento,
con agua solamente en estado de hielo en los cascos polares.
Hace miles de millones de años Marte tenía agua líquida
y Marte podría haber sido un lugar donde se originó la vida en la Tierra...
la vida en Marte y haber viajado a la Tierra.
Podría haber viajado en un meteorito.
De hecho, hay meteoritos que vienen de Marte, que cayeron en la Tierra,
que tienen registros, de actividad orgánica.
Entonces, si soy una célula, o una espora, o una molécula que va a viajar por el espacio,
tengo que ser muy resistente. Tengo que ser un extremófilo.
Un extremófilo es una bacteria que se adapta a condiciones extremas.
Y como todavía no podemos viajar a Marte porque todavía no se desarrolló la tecnología necesaria,
pero creo que estamos muy cerca de hacerlo,
por ahora, vamos a estudiar cómo sería esa vida, en un ambiente,
el más parecido que tenemos en la Tierra a Marte, que es la Puna.
Nosotros somos microbiólogos. Hace 10 años que venimos trabajando en la Puna.
Venimos estudiando las bacterias, los microorganismos, las formas de vida
que soportan, en la Puna, una serie de condiciones extremas,
como la alta radiación ultravioleta, por la altura,
la baja tensión de oxígeno, el gran contenido de arsénico,
un ambiente muy salino en el agua, con cambios muy drásticos de temperatura,
fuertes vientos. Todas estas condiciones son parecidas a las que habría en este momento en planetas como Marte
o lo que pudo haber en esa Tierra primitiva.
En ese ambiente, hace 2 años, encontramos estromatolitos.
Fue de tal impacto la noticia que llegó hasta la revista Nature.
¿Por qué? Porque estos estromatolitos estaban vivos.
Vamos a ver qué es un estromatolito y para eso vamos a hacer un viaje en el tiempo.
Vamos a irnos 3.800 millones de años atrás, a ese planeta primitivo.
En ese planeta primitivo, que era la Tierra, no había una capa de ozono,
por lo tanto, la radiación ultravioleta arruinaba cualquier forma de vida.
La vida tenía que crecer escondida en el fondo de los océanos
o escondida... bajo las piedras.
En ese momento no había oxígeno, entonces la vida tenía que respirar otro tipo de moléculas,
y crecía muy lentamente.
En ese ambiente primitivo había muchísima actividad volcánica,
cambios drásticos de temperatura,
unas aguas muy salinas llenas de metales. ¿Les suena parecido?
Esas son las condiciones muy parecidas a las que tenemos en la Puna.
En ese ambiente primitivo surgió ese primera molécula de ARN.
Que fue capaz de autoduplicarse y dar lugar a una molécula de ADN,
que se envolvió... en una membrana, como una gotita de aceite
y empezó a separar qué entraba y qué salía.
Así surgió la primera célula, la primera protocélula.
Esa primera protocélula se fue uniendo con otras células e inventaron la fotosíntesis.
Y como era muy complicado sobrevivir en esas condiciones, se asociaron,
y esa actividad biológica fue precipitando en minerales,
fue captando dióxido de carbono, que transformó a carbonato de calcio,
o sea, en una piedra, en algo que cuando se muere la parte viva, queda la fósil,
Esa colonia de algas y bacterias captó dióxido de carbono, liberó oxígeno
a lo largo de miles de millones de años, creó la capa de ozono.
Liberó oxígeno a la atmósfera y la vida dejó de ser anaeróbica y empezó a ser aeróbica.
Siendo aeróbica creció más rápido, pudo evolucionar, dio lugar a los primeros organismos multicelulares,
a los invertebrados, a los primeros peces, los anfibios, los reptiles que pudieron conquistar la tierra,
a los mamíferos que crearon los telescopios, que vieron el Universo
y se llegaron a preguntar: ¿qué estoy haciendo aquí?
Entonces, los estromatolitos tuvieron un papel fundamental en transformar
ese planeta hostil en la Tierra, en este planeta azul que conocemos hoy.
Hay otros lugares del mundo donde se encuentran estromatolitos vivos.
En Bahamas, en Cuatro Ciénagas en México (un lugar que está perdiéndose en este momento
por el uso intensivo del agua para la agricultura),
en Bahía Tiburón en Australia, en Yellowstone.
Pero todos los descriptos hasta este momento estaban al nivel del mar y en climas cálidos.
Los que encontramos en la Puna, son los primeros que se encuentran
en las condiciones de alta radiación ultravioleta, baja tensión de oxígeno,
en las condiciones más parecidas a lo que fue esa Tierra primitiva.
El descubrimiento de los estromatolitos en la Puna no es más que una mirada para ver hacia nuestro pasado
como vida en la Tierra.
Esta es Laguna Socompa. Estas piedras que están ahí, son los estromatolitos.
Si nosotros a esas piedras, que podrían pasar inadvertidas,
la cortamos, encontramos, estas capas.
Cada una de esas capas estuvo en la parte superior.
Cada una de esas capas es una línea de crecimiento de estas piedras vivas que son los estromatolitos.
Vamos a ver al microscopio electrónico qué es lo que podemos encontrar dentro de un estromatolito.
Así me creen que están vivos.
Esas son diatomeas, esos son minerales
y eso es un mineral con bacterias. Eso redondito que está ahí es una bacteria.
Pero eso no era todo. En Socompa, además de encontrar estromatolitos vivos, encontramos estromatolitos fósiles.
Por eso lo llamamos el Jurassic Park microbiano. Como en la película,
el paleontólogo, con un cráneo de dinosaurio, pensaba cómo era toda la socialisación de los velociraptor,
Bueno, después se encontró al velociraptor vivo.
Aquí es lo mismo. Tenemos una pregunta en los fósiles, la podemos contestar en los modernos.
Es uno de los pocos lugares, si no el único lugar en el mundo,
donde hay coexistencia de estromatolitos fósiles y modernos.
Y si nosotros nos vamos al microscopio electrónico, no encontramos diferencia
entre lo que está fosilizado y lo que es moderno.
Está tan bien conservado, la parte fósil, que no hay diferencia.
¿Por qué? Porque estamos al lado de un volcán. Un volcán que es activo,
un volcán que elimina sílice, en sus cenizas,
y esto nos hace acordar, por ejemplo a Pompeya, ustedes saben,
una ciudad que quedó totalmente momificada por las cenizas de un volcán.
Acá pasaría lo mismo. Aquí tenemos bacterias modernas de un estromatolito moderno
y de un estromatolito fósil.
Pero vamos más allá. Yo les conté que Marte pasó por ciclos evolutivos,
Donde podría haber condiciones que podrían haber albergado vida.
De hecho, la sonda Rover, sacó fotos de Marte que son bastante intrigantes
y que dan estas estructuras muy parecidas a las que encontramos en Socompa,
estas montañas estratificadas fósiles, muy parecidas a las partes estratificadas de estromatolitos fósiles de Socompa.
Si vemos al microscopio electrónico, también nos llama mucho la atención
lo que se encuentra en Marte con lo que se encuentra en Socompa.
Estos son estromatolitos vivos, los tenemos criando, criándolos como mascotas en el laboratorio.
Los estromatolitos (de hecho tiene cada uno el nombre de uno de mis hijos).
Los estromatolitos, están vivos desde hace 3.800... No estos, ¿no?
sino los estromatolitos como forma de vida están vivos desde hace 3.800 millones de años.
Hubo 3 extinciones masivas en la Tierra.
Y ellos fueron capaces otra vez, después de un efecto invernadero,
de volver a captar el dióxido de carbono, liberar oxígeno y preparar la vida... la Tierra para una nueva forma de vida.
Los estromatolitos tienen muchísimas aplicaciones biotecnológicas,
como por ejemplo los biocombustibles, la biorremediación.
Fueron captadores perfectos de dióxido de carbono,
Y a esto nos hace acordar el calentamiento global.
Los podíamos usar para poder revertir el daño que estamos haciendo en el medio ambiente.
Una vez que fue el descubrimiento de los estromatolitos en Socompa,
fuimos con una sensación de contra reloj buscando otros ambientes.
O sea, a uno, cuando le cambia la forma de ver, ve todo distinto.
Y encontramos también estromatolitos en Tolar Grande.
Los ojos de mar de Tolar Grande. Eso no es el Caribe, esa es la Puna
y esos son arrecifes de estromatolitos.
En Laguna Diamante, dentro del cráter del volcán Galán,
a 4.700 metros sobre el nivel del mar está Laguna Diamante
donde... tenemos un PH muy alto, una salinidad que es 8 veces la salinidad del mar
y una concentración de arsénico nunca antes registrada: 230 mg/L.
En esas condiciones hay vida, hay bacterias formando estas especies de estructuras muy parecidas a las de la Tierra primitiva.
También lo encontramos en Jujuy, en Salta, en el Lluillaillaco, en el salar de Antofalla.
Ese color es natural, son bacterias.
A partir de este momento, y espero haberlos convencido y que hayan entendido lo que es un estromatolito.
Ahora les voy a contar la experiencia personal que significó haber hecho este descubrimiento.
Tenía 2 caminos: hacer el camino típico del científico que es publicarlo,
primero estudiarlo, lo cual lleva bastante tiempo y después publicarlo y contárselo a otros científicos.
Pero, paralelamente, me di cuenta de que en la Puna, en los lugares donde estaban estos descubrimientos
había problemas y eran graves. Uno de los problemas era, por ejemplo,
en los ojos de mar de Tolar Grande, había contaminación,
una contaminación que estaba matando los pozos donde se... se estaban matando los estromatolitos... en los ojos de mar,
Otro de los problemas es la inminente exportación de agua de la Puna hacia la minería... hacia Chile
para que sea usado en la minería.
Traer agua desde el Pacífico a 500 km, desalarla y usarla
es mucho más caro que traerla de 45 km, que es agua dulce del lado de la Puna.
O sea, estos ambientes están en serio riesgo.
La minería, ustedes saben que Argentina tiene... la tercera reserva mundial de litio.
No hay un milímetro cuadrado de la Puna que no esté en este momento concesionado o explotado
para la minería, sobre todo en la parte de los salares.
Y todos estos ambientes necesitan agua y están asociados a los salares... a los salares de la Puna.
Otro problema era el saqueo. El saqueo para empresas biotecnológicas,
nadie sabe, un pedazo de estromatolito es así chiquitito, cualquiera se lo puede llevar, o un turista se lo puede llevar como un recuerdo.
Entonces, era necesario legislar, era necesario vigilar el lugar, era necesario determinar áreas restringidas
y era necesario conseguir dinero para la investigación.
¿Cómo hacerlo? Somos científicos, poco conocidos, estamos en Tucumán.
Una persona que me inspiró mucho fue la Dra. Teresa Manera de Bianco,
quien descubrió unas huellas en Pehuencó, unas huellas de fósiles extintos, hace 20 años.
Ella pasó 20 años y tuvo que ganar el premio Rolex para que se reconociera ese lugar,
se declarara reserva y se lo preservara de las camionetas 4x4.
En esos 20 años ella pasó 20 años viendo cómo su descubrimiento se iba destruyendo poco a poco.
Después de 20 años recién, tenía mi edad cuando los descubrió,
pudo pasar recién éste, su primer verano, con la zona alambrada.
Hablando con ella, ella me dijo que el científico que descubre algo
debe hacerse cargo de su descubrimiento frente a la sociedad.
¿Cómo hacerse cargo? La forma que encontré fue con la divulgación científica.
La divulgación científica requiere que el científico, requiere 3 cosas:
primero que el científico sea capaz de hablar de una forma clara para que todo el mundo entienda
lo que es, por ejemplo, un estromatolito.
También requiere una sociedad que le interese lo que es un estromatolito,
una sociedad que no solamente le interese ver a Tinelli.
Una sociedad, que creo que es lo que está ocurriendo ahora,
que le interese canal Encuentro, que le interese Discovery Channel,
que tenga otros intereses; y yo creo que nuestra sociedad estuvo preparada para esto.
Y por otro lado, hacen falta periodistas científicos que sean capaces de divulgar las cosas de una forma correcta.
Esto ocurrió. Los primeros en enterarse del descubrimiento, por una cuestión de absoluto respeto,
fueron los habitantes de Tolar Grande.
En una asamblea se les contó a ellos qué es lo que se había encontrado.
De hecho, se pidió permiso a la Pacha Mama antes de hacer las investigaciones.
De ahí saltó al diario El Tribuno de Salta, el día 26 y 27 de agosto en forma sucesiva, fue tapa del diario El Tribuno,
y ya esa misma tarde, de Medio Ambiente de la provincia de Salta me llamaron para preguntarme qué es lo que había pasado.
A todo esto, yo muchas veces había ido a decir: "tengan cuidado que ahí tienen algo muy especial, lo pueden perder."
Salió en el diario. Esa misma tarde estaba viajando a Salta para reunirme con la gente de Medio Ambiente.
De ahí pasó al diario Clarín. Eso fue un boom, en un día di alrededor de 40 entrevistas,
todo el mundo quería saber de los estromatolitos.
De ahí pasó a La Nación, y ya ahí empecé a tener una idea del poder que tenían los medios de comunicación
y me animé a pedir que hacía falta cambiar leyes para que los estromatolitos sean declarados patrimonio nacional,
y esa misma tarde me llamaron del Senado de la Nación.
Salió en Wikipedia y llegó a Nature.
Nature. Nosotros somos de Tucumán. ¿Saben la emoción de leer la palabra "Tucumán" en la revista Nature?
De toda esa historia me quedó un concepto, ¿no?
Un descubrimiento científico, cuando es divulgado en los medios, tiene un impacto turístico.
Empezó a venir muchísima gente porque esto salió en todo el mundo,
a partir de estar en Nature se divulgó en todos los diarios,
en la parte científica del mundo.
Tiene un impacto turístico. Empezó a venir muchísimo más turismo
a conocer los estromatolitos de Tolar Grande, de Socompa.
Tuvo un impacto en la comunidad. Tuvo un impacto, esto tiene... en la comunidad es porque
trae muchos más recursos económicos.
Tiene un impacto en el medio ambiente y requiere una respuesta del gobierno.
¿Qué respuesta se consiguió en estos 2 años, hasta ahora?
En lo que es infraestructura conseguimos que en Tolar, un pueblo de 100 habitantes,
que está a 8 horas de Salta y a 3 horas de Chile, en el medio de la nada,
tenga una red de cloacas.
Esto ocurrió en un año y medio. Estamos en Argentina, estamos en la Puna,
estamos en la provincia de Salta.
Se consiguió que se haga un vallado de la zona de los ojos de mar de Tolar Grande,
y ahora se está haciendo todo una caminería para que los turistas que van a conocer no pisen el lugar,
En lo que es turismo, y esto es algo muy... un concepto muy claro,
nada se puede preservar si no da dinero.
Entonces, la forma de preservar esto es que dé dinero.
¿Y de qué forma puede dar dinero? Con el turismo extremo,
con el turismo alternativo, con el turismo... el concepto que quiero introducir
es el turismo científico.
Primero, preparar a la gente de Tolar Grande para que sean capaces ellos de ser guías
y contar lo que es un estromatolito.
Después hacer una ruta de turismo. La ruta de... turismo científico,
La ruta del origen de la vida, donde el turista que tiene que ir en una camioneta 4x4
salga de Jujuy y llegue hasta La Rioja.
Todo por la Puna, haciendo uso de toda la infraestructura de las comunidades originarias
trayendo un desarrollo económico en las comunidades originarias.
Se va a hacer también un centro de interpretación que va a ir desde el origen de la vida al Universo
junto con la Universidad de Córdoba.
Es un proyecto del Ministerio de Ciencia y Técnica de la Nación.
Se consiguieron también resultados científicos, como el orgullo de haber secuenciado
el primer genoma en Argentina. Esto, hasta hace 1 año atrás, se hacía todo en el extranjero.
La información genética y las aplicaciones biotecnológicas no terminaban de quedar del todo en el país.
Se hizo el primer meta-genoma, también de estromatolitos en Socompa,
y se consiguió una financiación, por concurso,
para hacer investigación científica que pueda respaldar la preservación de este lugar.
En la parte de conservación, el proyecto en el cual estamos involucrados
es el Arca de Noé de los microorganismos.
Ojalá que todos estos lugares puedan ser preservados.
Ojalá que lleguemos al tiempo con el tema de la exportación de agua, con los intereses mineros.
Pero en el caso que no puedan ser preservados, por lo menos,
recuperar, guardar, tener en el laboratorio la colección de los genes,
que pueden darnos un montón de respuestas sobre el origen de la vida
y sobre problemas biotecnológicos de la humanidad.
Otro de las grandes cosas que se consiguió, que creo que es el orgullo más grande
que tengo hasta ahora, después de mis 3 hijos,
es que se declaró area protegida a la provincia... a la Laguna Socompa
y los ojos de mar de Tolar Grande.
Hay que pensar que se declaró un área protegida en una zona de muchísimo interés
en minería y se declaró un área protegida por bacterias,
que hace falta un microscopio para verlas, no son ni flamencos, ni osos polares: son bacterias.
Se lo consiguió en marzo de este año.
Y en el proyecto en el cual estoy involucrada y estoy en contacto con científicos
que tienen proyectos con la NASA, es declarar a los estromatolitos de todo el mundo
patrimonio científico de la humanidad,
porque tienen muchísimo para contar sobre el origen de nuestra vida... de la vida sobre la Tierra.
Finalmente, quiero dejarles el mensaje: salven las bacterias.
¡Muchísimas gracias!