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Damasco, el volcán ha sido apagado
Hoy es el 23 de julio, son las 19 horas
y nos encontramos en el monte Qassyum, la montaña que domina Damasco.
Como es una montaña alargada, la ciudad de Damasco es también alargada.
Es una aglomeración de unos 6 millones de habitantes,
seguramente un poco más en este momento ya que
mucha gente se ha visto obligada, debido a los combates
en diferentes ciudades cercanas, a replegarse hacia la capital en busca de refugio..
La capital misma fue atacada,
hace varios días, por una oleada de Contras,
en su mayoría provenientes de Jordania. Otros llegaron también
a través del Líbano, a través de Irak, a través de Turquía…
en cada caso se precipitaron sobre los puestos fronterizos, los tomaron
y trataron de penetrar hasta la capital.
En muchos casos los paró la aviación,
bombardeándolos en el desierto para impedir su avance.
Pero algunos llegaron hasta la capital y la atacaron en momentos
en que un atentado decapitaba el alto mando militar.
¿Qué sucede en este momento con esta batalla de Damasco?
La realidad es que se acabó.
Actualmente sólo queda un bolsón de combates,
en el barrio de Jobbar, que no podemos ver bien desde aquí
porque está realmente muy lejos. Está por allá pero muy lejos.
Ustedes no podrán distinguir nada de eso porque es un combate callejero
y no hay uso de artillería, a no ser muy excepcional y esporádicamente,
ha habido algún disparo de mortero allá a lo lejos.
Todo el resto de la ciudad está ahora absolutamente en calma.
Justo detrás de mí, pueden ver ustedes la plaza de los Omeyas,
que es la mayor plaza de Damasco,
y en el costado derecho de la plaza
se encuentra el edificio de la televisión nacional que,
como ustedes saben, hoy es objeto de una protección especial
porque se sabe que la OTAN quiere destruirlo a cualquier precio.
Ayer hubo una batalla importante
que acabó con la bolsa de Contras
que se hallaban en los terrenos próximos a Mazzé.
Mazzé es un barrio donde se hallan las embajadas
y allí existe una zona cultivada y también de arbustos
que se encuentra justo al borde
y que va hasta el barrio de Kaffar Sussé.
Es como si el bosque de Vincennes estuviese dentro de París.
Allí hay esencialmente tunas o nopales,
aunque también hay todo tipo de arboles,
no sólo ese tipo de cactus.
Hubo allí una batalla importante, ayer y el día anterior,
que se terminó con la rendición o la muerte de los atacantes,
que allí eran esencialmente egipcios
y jordanos,
mientras que los están atrapados en Jobbar
son en su mayoría somalíes y sudaneses.
Se ve por allá un poco de humo
porque esos campos siguen quemándose.
Es casi imposible detener el fuego...
el fuego de esos cactus gigantes.
Como ustedes pueden ver, no hay aviones, no hay helicópteros, ni nada por el estilo.
Todo ha vuelto a la normalidad en Damasco.
El ejército sirio puede saborear su victoria
y el pueblo sirio puede por fin descansar
después de varios días terribles
que le fueron impuestos por las potencias extranjeras
que enviaron aquí a esos mercenarios.
Me he desplazado ligeramente
para que ustedes puedan ver, detrás de mí,
la Gran Mezquita de de Damasco, símbolo de la civilización damascena,
ya que durante siglos
las diferentes religiones rezaron juntas.
En esa mezquita están las reliquias, la cabeza de San Juan Bautista,
considerado por los judíos como uno de los suyos,
considerado un profeta por los cristianos y también por los musulmanes.
Día a día, durante siglos, todas esas religiones rezaron juntas en ese lugar.
Por supuesto, a partir de la creación del Estado de Israel,
los judíos abandonaron Damasco para irse más lejos
y ya no están presentes en esta mezquita.
Pero las otras confesiones siguen rezando allí diariamente.
El programa del Ejército “sirio libre””,
el programa de los Contras,
consiste en poner fin a este tipo de sociedad
y en instaurar aquí una dictadura confesional
en la que una confesión aplastaría a las demás.
En función de esa manera de pensar,
los jefes del ESL han anunciado que pretendían conquistar Damasco
y que rezarían aquí el día 15 del mes del Ramadán.
Eso, está por ver. Por lo pronto,
todas las fuerzas de los Contras han sido expulsadas de la ciudad.