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¡Oye, Eric!
Fiestón en el campus esta noche.
-Vale. -No te olvides de traer birras. ¡Adiós!
Esta parte mejor justo detrás del traste.
¡Muy Bien! A ver, deja que lo oiga. Una vez más.
¿En serio?
Tío, al final has venido. Tómate una birra con nosotros.
¿Hola?
¿Hola? ¿Hay alguien cerca?
¿Sí?
¡Hola! ¿Puedes venir y ayudarme, por favor? Estoy medio atascada.
Sí.
¡Gracias!
Estoy peor colocada de lo que pensaba. ¿Crees que puedes ayudarme a bajar?
¡Hola! ¿Cómo estás?
Estoy bien.
¿Sí? Bien.
¿Crees que puedes ayudarme a bajar, por favor?
-Sí. -Gracias.
¿Qué quieres que haga?
No sé.
Eh, ¿qué estás mirando?
No, estoy de coña, está bien.
-Bien. -Vale,
¿cómo quieres hacerlo?
-Si mueves tu pierna... -¿Dónde?
-Tenéis que esperar vuestro turno. -No, tienen que atenderle ahora.
Venga. Mírale. Su nariz es más grande que su cara.
¿Por qué no vuelves a la fiesta?
¿Y dejarte así?
Entonces, eres músico.
Te oí tocar antes de saltar por la ventana. Sonaba muy bien.
¿Tocas en algún sitio?
-Sí. En clase. -No,
digo en un sitio real, donde la gente pueda escucharte.
Venga, Eric, ya te he dicho que lo siento,
no me hagas sentir peor.
-Quizá nos toque pasar la noche aquí. -Bueno, podrías irte.
¿Te vas a desmayar?
No.
¿Estás seguro?
Sí, estoy seguro.
Vale.
Ten cuidado. Confía en mí, tío. A la de tres:
uno, dos...
¡Dios!
¡Mierda!
-¿Qué pinta tiene? -Asquerosa.
Pero sexy.
A ver, tío, ibas a contarme cosas sobre esta chica.
No hay mucho que decir.
No vive aquí, se coló.
-Está loca. -Oh, sí, conozco a ese tipo de mujeres.
Estoy seguro.
¿Entonces pudiste,
ya sabes, meter ficha?
-Estaba en un hospital cubierto de sangre. -Sí, eso es verdad.
Para serte sincero,
creo que fui un poco borde con ella.
Eso está bien.
No, no me refiero a...
No.
¿Es ella?
¡No digas nada! ¡No digas nada!
¡Es guapísima, tío! No me habías dicho que estaba buena.
Sí, ya sé que es guapa, pero, por favor, tengo que hacer esto,
de verdad tengo que hacerlo. No tengo tiempo para esto.
Jason.
-¡Ey! ¡Chica! -Esto es una puta biblioteca.
¡Aquí está Eric!
¡Sí!
¡Está viniendo!
¡Hola! ¿Cómo estás?
-Hola. Mejor. Gracias. -¿Sí?
¿Cómo está la nariz? Perdón.
-No la toques. Me duele mucho. -¿Sí?
-Tiene mucho mejor aspecto, ¿no? -Sí, está mucho mejor.
-Soy Jason. -Hola. Soy Jo.
-Hola, Jo. -Encantada.
-¿Cómo te va? -Encantado. Va bien.
-Jo, ¿qué haces aquí? -Vamos a ir a un pub.
Hay una jam session.
-¿Ahora? -Sí.
-No. -Eric.
-Venga, Eric, va a ser divertido. -No, mira. Lo siento.
Eric, tienes que cantar delante de esta chica.
-Ya te digo que no voy a tocar. ¡No! -Pues Jason dice que vamos.
¡Sí! Jason dice que tenemos que ir.
¿No tengo nada que decir en esto?
-¡Venga, chicos, vamos! -No lo sé. ¿Los Stones?
No, eso está trilladísimo.
-¿Eric Clapton? -Demasiado viejo.
¿Y esos dos?
-¿Dylan? -¡No puedes tocar Dylan aquí! ¡Cállate!
Puede que no.
¡Chicos, venga! ¡Vamos!
Venga, Eric, ¡vamos!
Estos niñatos...
¿Habla francés?
Sí.
Lo siento, tío, no queda sitio esta noche.
-Es igual. -No sabía que iba a haber tanta gente.
-La próxima vez. -¡Jo!
Hola.
-Dame un segundo, ahora vengo. -Me tengo que ir.
No. No te vayas.
Deja que nos tomemos una.
Solo una, ¿vale? Yo invito.
Y píllame una birra también.
Gracias, Jay, sí, me encantaría un trago. Gracias, tío.
¿Qué? ¡Ella invita!
-¿Has visto a Jo? -No.
Es un poco maleducado, ¿no?, arrastrarnos aquí y luego largarse.
¿No se supone que íbamos a relajarnos?
La voy a buscar y a decirle que nos vamos.
Te daré mi número. Puedes llamarme.
-Quizás. -Sí.
Yo me largo.
¿Has podido encontrarla?
No, ya se dará cuenta. ¿Te vienes?
Vale.
Siento mucho interrumpir vuestra velada,
pero tenemos a un músico increíble aquí esta noche.
También es un muy buen amigo mío
y sería una pena que nos fuéramos a casa y no le oyéramos tocar.
Así que, por favor, ¿podemos aplaudir a Eric?
-Venga, ¡sube al escenario! -¡Tienes que subir! ¡Es tu oportunidad!
-Es su primera vez. -¡Sí!
¡Venga, Eric! ¡Vamos!
-Perdón. -Cuidado.
¡Vamos!
Sube, vamos, sube.
-Te voy a matar. -Buena suerte.
Lo siento.
¡Eres grande!
¡Ese es mi amigo!
-Es horrible. -Sí.
Se le va pillando el gusto.
-Creo que estoy bien. -¿Sí?
¿Quién es ese tío?
¿Jimmy? Es un amigo.
Vi que antes le dabas un regalo.
-Sí, ¿lo has visto? -¿Una señal?
Sí, la hice con unas maderas que recogí el otro día.
Me gusta reciclar cosas, darles una vida nueva.
-Es un poco estúpido. -No, es muy bueno.
¿Escribes tus propias canciones?
-Nunca he escrito una. -¿Nunca?
Es lo primero que haría, escribir mis propias canciones.
¿Sí?
Es muy, muy difícil.
¡Venga, Mary!
¡Y así es como se hace!
¡Queen B!
¡Frenchie! ¡Zorra!
¡Ven aquí!
-¿Sabes a quién vi? -¿A quién?
-A Danny Zucko. -No.
-¿Cuál era su nombre real? -¡Si no lo sabes tú!
Sea como sea, viene al Burning Man.
¡No! No le has dicho que voy, ¿verdad?
-Puede. -Eres una perra.
-¡No hice nada! -Burning Man, ¿qué es eso?
Burning Man es un festival en Nevada, en el desierto, en medio de la nada.
-¡Qué ganas de ir contigo! -Sí.
-¡Por fin! ¡Es nuestro verano! -Lo sé.
Será genial. Y allí el dinero no existe, intercambias cosas.
Tienes que llevar tu comida. Y viene Alex.
-¡Lo sé! -¿Alex va a ir?
¡Claro que va!
Es un dios.
Mary, deja de beber.
¿Te gusta?
El tatuaje, digo.
Supongo que tenemos gustos diferentes.
No lo creo.
Venga, chicos, vámonos de aquí,
¡este sitio está muerto! ¡Nos vamos! Venga.
¡Vámonos!
¡Frenchie, venga!
¡No voy a aceptar un no como respuesta!
-¡Frenchie, vente con nosotros! -Me voy a ir. Lo siento.
-¡Vámonos! -Me ha gustado verte.
Vamos, chicos.
Espera. ¿Me das tu número?
¡No tengo!
Quizás...
puedo ir contigo.
Si recordáis, la semana pasada
hablábamos del Romanticismo,
hablábamos de los clásicos,
hablábamos de la gran tradición Occidental,
cuyo mayor representante es nuestro amigo Ludwig van Beethoven,
nacido en Bonn. ¿Alguien recuerda cuándo?
Miradlo para la semana que viene.
Ludwig van Beethoven nació en Bonn, pero se hizo un nombre
en Viena.
De lo que quiero hablaros hoy es del paradigma de la época.
Tocamos un poco el tema la semana pasada,
pero quiero centrarme en los subgéneros de la época,
o sea, del siglo XIX.
¿Qué haces?
-Tengo algo para ti. -¿Qué?
-Tengo algo para ti. -¿Ahora?
Sí, ahora. Mira.
La he hecho yo.
¿Te gusta?
La tallé
y luego quemé el interior para que quedara más oscuro.
-Es increíble. -¿Te gusta?
Sí, me encanta.
Tenías razón. Creo que es lo que quiero hacer.
¿Púas de guitarra?
No, cosas con madera.
Creo que podría ser buena.
Sí.
¿Tienes clase?
Claro.
Jo. No.
Para.
Vete.
¿Tienes clase?
...el Imperio Otomano. Esas influencias procedían
de lo que es ahora Turquía.
Es solo sexo, ¿vale?
Muy bien, amiga.
Eres tan dulce.
Oye...
No soy dulce.
Burning Man es un festival en medio del desierto.
Es como que aceptas a todo el mundo y eres libre de expresarte.
-¡Qué hippie! -Sí. ¡Es precioso!
-Ese es el problema de la sociedad. -¡Amor libre!
Durante el día puedes ir desnudo, pero yo me pondré pezoneras. Creo.
Hay la hostia de tormentas de arena y polvo
y es como... Y entonces te pones las gafas.
¡Eric! ¡Eric!
-¡Mina de oro! -¡Mira esto!
¿Te gusta?
¡Eric! ¡Corre!
Y ahora vuelve a Mi menor.
-Hola. -Hola.
¿Has dormido aquí?
He encontrado un curso de carpintería. Empieza la semana que viene.
Es en Londres.
No voy al Burning Man.
No va a ir al Burning Man.
A ver, ¿no va a ir al Burning Man por ti?
¿Qué?
Eric.
Voy a tocarle la canción a Jo esta noche.
¿Vas a tocarla esta noche?
¿No es un poco pronto?
Está bien, tío.
Le va a encantar.
Hola. ¿Estás preparado?
Hola a todo el mundo. Buenas noches.
¿Cómo estáis?
¡Hola! ¿Qué estás haciendo aquí?
Voy a tocar.
¿A tocar qué?
Una canción que he escrito para Jo.
¿Para Jo?
No se lo digas.
No diré nada. Le va a encantar.
Sales en cinco minutos.
-De acuerdo. -Más te vale ser bueno.
Cinco minutos.
¡Está aquí, vamos!
¡Frenchie!
Es un chico guapo, ¿verdad?
-Es su ex. -¡Por Dios! ¡Mírate, tío!
-¿Cómo va todo? -Muy bien. ¿Cómo estás tú?
-¡Bien! -Tío, tienes buen aspecto.
Has estado fuera demasiado tiempo. Me has dejado sola en Londres.
-¡Tú me dejaste! -Jo.
-Tengo que salir al escenario. -Sí, ahora voy.
-Soy Alex, tío. -Eric.
Eric, ¿te vienes al Burning Man con nosotros?
No.
Dame dos segundos, ¿vale?
-Vale. -Ahora voy.
Ahora voy.
-Vale. -Vale.
-Jo, ¿estás bien? -Sí, estoy bien.
-¿Te vienes? -Espera, ¿no vienes al Burning Man?
No me mates, Pe.
¡Aquí estás! Te he estado buscando, tío. Venga, eres el siguiente. Venga.
¡Gracias! ¡Muchas gracias!
Venga, te toca.
Necesito un minuto, estoy esperando a alguien.
Me da igual. Sal ahí.
-Solo un segundo. -No.
¡Sal, joder!
¡Sube al escenario!
Ten cuidado.
*** niñato.
-Hola, soy Eric. Busco a Jo. -¿Quién? Perdona.
Soy Eric. Estoy buscando a Jo.
Sí, ¿y qué quieres?
-¿Sabes cómo puedo contactar con ella? -Déjalo estar.
Ya te dirá algo cuando vuelva, ¿vale?
¿Tienes el número de su amiga o algo?
¡Están en el *** desierto, tío! Por favor, deja de llamar, ¿vale?
¡Eric! Eric, tío.
Eric, tío, estamos comiendo, ¿quieres sentarte con nosotros?
Estoy liado. Tengo que practicar, voy muy retrasado.
-¿Qué quieres decir con liado? -Lo siento.
Está loca, tío.
Gracias.
Vale.
Disculpe,
¿sabe cómo llegar a Black Rock City?
BIENVENIDOS A RENO
Tengo que ir al centro.
-¿Qué cojones crees que estás haciendo? -¿Perdón?
Su obligación es llevar a los clientes.
¿Mi obligación?
Deberías ir andando a todos lados hasta que quemes toda esa grasa que te sobra.
Que te den, estúpido hijo de puta.
¿Qué quieres?
Necesito ir a Black Rock City.
¿Por qué me tocan a mí todos los gilipollas?
-Mira, chico, estoy fuera de servicio. -Vale.
Perdón.
Eh, chico.
Esos son los Creedence. ¿Los conoces?
-Claro, por supuesto. -¿Y eso?
Mi padre me ponía los discos cuando era pequeño.
¿Tú tocas?
Sí, la guitarra, y canto.
¿Y dónde está tu guitarra entonces?
Era venir aquí o la guitarra.
Ven aquí, chico.
Ven aquí.
Entonces, ¿a dónde dices que vas?
A Black Rock City.
¿Llevas drogas?
-No. -Qué pena.
Vale, ¡sube!
-¿Me va a llevar? -¡Por supuesto, chico!
-Dinero sí llevas, ¿no? -Sí.
Vale, pues súbete.
-¿El cinturón? -Roto,
pero no te preocupes. No he fumado demasiado.
-¿Y el taxímetro? -Chico,
el taxímetro está aquí.
Lola.
Son dos y Lola va sobre un travesti.
Pero va sobre una chica, ¿verdad? No seas tan mojigato.
Lo que estoy diciendo es que todos los grupos buenos
tienen una canción sobre una mujer.
Martha my dear va sobre la perra de McCartney.
Muy bien, con un nombre de mujer, pero no son sobre una "ella" o una "nena".
Son sobre ellas.
¿Cuántas chicas tienes que conocer antes de convertirte en un buen músico?
¿Tan mala es la canción que le escribiste?
Solo es que creo que no es lo mío. Creo que prefiero tocar lo que otros escriben.
Solo dices eso porque ella se largó y estás jodido,
pero tienes que ponerte en serio con esto.
Sigue practicando.
Tienes que ir a Nashville. No hay mejor sitio para un chico y su guitarra.
Solo quiero volver a casa con ella.
¿De qué cojones estás hablando?
Mi novia está allí. Voy a buscarla.
Tu chica seguramente...
está más para allá que para acá.
No te entiendo. ¿Más allá de dónde?
Más allá de la realidad.
Está volando por las alturas.
No creo que esté volando a ningún lado.
-¿Con quién está? -Con unos amigos.
Con su ex novio.
Esta historia es cada vez mejor.
No están juntos desde hace tiempo.
Piénsalo.
Ella desaparece ¿y con quién se va?
¡Con él!
Esta, mi joven amigo, es la historia más vieja del mundo.
Vas a tener que enfrentarte al ex.
No, no lo creo.
Vale.
Bueno, ya estamos aquí.
-¿Cuánto te debo? -Dame 200 y las gracias.
Vale.
Muchísimas gracias.
Oye, chico.
Cuando encuentres a tu novia, si aún te reconoce...
-Me va a reconocer. -Tienes que recordarle por qué te quiere.
Házselo saber.
No sé si me quiere.
Joder, chaval. Ayúdame un poco. Buena suerte.
Gracias.
-¡Pírate! -Vale.
Se lo van a comer vivo.
A ver qué tenemos por aquí.
-Hola, ¿qué tal? -Hola.
-¿Puedo ver tu entrada? -Sí, claro.
Vale, ¿en qué campamento estáis, chicos?
En Camp Showering.
-Está genial. -¿Verdad?
-Sí, cada año estáis más buenos. -Disculpe,
¿sabe dónde puedo comprar una entrada?
Puedes comprar una en el pasado, hace seis meses que se agotaron.
¿No puedo comprar una?
Te digo que se agotaron, no quedan más entradas.
Tengo que entrar.
Sí, y yo debería haber sido Liza Minnelli, pero así es la vida.
He venido desde muy lejos.
¿No tienes entrada? No puedo dejarte entrar, ya te lo he dicho.
Y ahora, por favor, deja paso a la gente que sí tiene entradas.
¿Vale? ¡Oh, por Dios! Cada año se intenta colar gente, ¿sabes?
-Ya. -Muy bien, ¡nos vemos!
Oh, pobre.
Chaval.
Esperad.
¿Vais a Reno?
¿No?
Toma. Estoy bastante seguro de que esto ayudará.
¿Cómo las has conseguido?
Chico, nunca subestimes la bondad de los extraños.
-No sé qué decir. -Solo dame las gracias.
Espera.
Esto es para ti.
Esto es demasiado.
No vas a recuperarla sin tu guitarra.
¡Vámonos de fiesta!
¡Vamos, colega!
Tío, no te preocupes, es un capullo, pero ya sé cómo camelármelo.
¡Tú!
-Veo que me has echado de menos. -Ya sabes que no puedes entrar.
Creo que aquí mis dos amigas dicen lo contrario. Inclusión Radical.
Sí, seguro. ¿Cómo sé que no las has robado?
-¿Por quién me tomas? -¡Cállate! Déjame verlas.
Vale, chaval,
parece que hoy es tu día de suerte, ¡adelante!
¡Estoy en casa, cabronazo!
Gracias.
Vamos, chico, vamos.
Oh, tío.
¡Hola! ¿Cómo estás?
-¡Hola, guapo! ¡Te veo luego! -He vuelto, he vuelto.
Bienvenido al Burning Man. Chaval,
tienes que hacer el ángel. Tienes que gritar: ya no soy virgen.
Venga, grítalo.
¡Ya no soy virgen! Venga, grítalo.
-Ya no soy virgen. -¡Ya no soy virgen!
¡Esto es el *** paraíso, tío!
¡Tócame la campana, nena!
¿Cómo estás? ¡Caronte ha vuelto!
¡Hola, nena!
¡Caronte ha vuelto!
Hay mil sitios que ver, chico,
pero tienes que ver el Templo, ¿vale?
El Templo es el alma del Burning, de la ciudad,
y este año he oído que es una puta pasada, tío. ¡Una puta pasada!
Hola, nena, ¿cómo estás?
Sí, qué bien verte.
¡Caronte ha vuelto!
¡Tienes buen aspecto, tío!
-¿Cómo voy a encontrarla? -No te preocupes.
La Playa proveerá.
Eric,
el Man.
El Man, Eric.
Venga,
ve arriba. La vista es impresionante.
Venga.
Mierda.
Disculpad. Si quisierais encontrar a alguien aquí,
-¿por dónde empezaríais a buscar? -¿Sabes en qué campamento están?
¿En qué campamento? No sé a qué te refieres.
Vale.
A ver, la cafetería está allí,
quizá tengas suerte, todo el mundo pasa por allí.
Está bastante lejos a pie.
¿Sabéis dónde puedo alquilar una bici?
-¿Tenéis algo de agua por casualidad? -Solo absenta.
No, gracias.
-Buena suerte. -Buena suerte, tío.
¡Que vaya bien la Quema!
¿Y bien? Vale.
Jo, te estoy buscando. Estaré aquí todos los días a las 12 a. m. /p. m.
Ente de la penumbra.
Ente de la penumbra.
¿Qué tenemos aquí?
Es un ente de la penumbra.
Ha llegado la patrulla de la luz.
Recuérdalo.
¡Luces!
No pongas esa cara de oveja perdida.
No podemos verte si no llevas algunas luces.
Aquí tienes. Te iluminaremos.
Debes acordarte de ponerte luces.
¡Luces!
Ya sabes, tío. Venga.
Tienes que ponerte luces.
-Siente las luces. -Gracias.
¡Burner!
Es precioso, ¿verdad?
Es mágico.
¿Nos conocemos?
Claro, en otra vida seguro.
Me siento muy conectada contigo ahora mismo.
-Seguro que fuimos todos amantes. -Sí, follábamos como bestias.
Vale,
-ha sido un placer. -¿A dónde vas?
Tengo que encontrar a alguien,
pero ya nos veremos, quizá en la siguiente vida.
¿Qué pasa ahora?
Nos gustas.
Eres muy dulce.
-¿Os puedo coger un poco de agua? -¡Claro!
¡Espera! ¡No te la bebas toda!
Bueno, ¿esperamos a que le suba?
¿A que me suba qué?
¿Eric?
Eric...
Eric.
¿Jo?
Se le va pillando el gusto.
Me siento muy conectada contigo ahora mismo...
Eric...
Eric...
...muy conectada contigo...
Jo...
-Jo... -¿Te vas a desmayar?
Venga, Eric, te he dicho que lo siento.
No voy al Burning Man.
Sí, sí, ¡voy!
¡Eric!
¿Eric?
¿Qué estás haciendo aquí?
¿Qué?
¡He venido a buscar a Jo!
Muy bien.
-¿Qué coño estás haciendo? -Soy el Rey Lagarto.
Me tengo que ir. No puedo cuidarte.
¡Déjame en paz! Por favor.
¡Vámonos!
¿Qué pasa?
Tío, este chaval... Un amigo de Jo.
Es una puta pesadilla.
¿Qué está haciendo aquí?
Creo que la está acosando.
Le ha escrito una canción.
¡Soy el rey del mundo!
¿Qué coño?
Eric, bájate.
-¡Soy el rey del mundo! -¡Eric!
¡Bájate! Eric, venga.
¡Eric!
Venga, baja.
-¿Por qué no nos tocas algo? -No, no puedo.
Pensaba que eras el rey del mundo.
¡Gente!
-Este es Eric. -Eric.
Nos va a tocar algo.
Qué chico más guapo.
Hola.
Venga, Eric, cántanos una canción.
¡Eric!
¿Qué?
Debería haber comido algo.
Te juro que ayer parecía una muy buena idea.
¿Qué estás haciendo aquí?
No sabía lo que estaba pasando y...
Si había alguien más,
deberías habérmelo dicho.
¿Para eso has venido?
No quiero estos dramas.
No puedo estar aquí.
Siento que hayas venido hasta aquí para nada.
¡Buenos días, Frenchie!
¿Qué le pasa?
¿Qué coño está haciendo él aquí?
Vino a por ella.
Ya, puedo ver eso.
-¿Cómo ha llegado hasta aquí? -Yo lo traje.
¿En qué estabas pensando?
¡Va a joderlo todo! Está claro que ella tampoco lo quiere aquí.
¿Qué quieres que haga?
No vamos a por hielo.
Tío, no te puedes quedar con nosotros.
No le jodas esta experiencia a nadie.
Todo iba bien hasta que apareciste tú.
No tienes ni idea de por qué se fue, ¿verdad?
¿Crees que fue culpa mía?
Conozco a Jo.
Cuando algo le gusta, sale corriendo.
Ven.
-Ven conmigo. -¿Qué haces?
-Eric, ¡déjame! -Ven conmigo.
-Eric. -Te acojonaste.
-¿Qué? -Ahora lo pillo. Te acojonaste.
-¿De qué coño estás hablando? -¡Espera!
He volado hasta este *** agujero para esto, he vendido mi guitarra.
Dame dos minutos.
Vale, muy bien, dos minutos. Dale.
A veces la vida... La vida es realmente...
Cállate, Eric.
Deja de huir. Ya estás otra vez.
-¡Cállate! -¡Deja de huir!
Creo que hay algo muy real entre nosotros,
pero te fuiste.
Te fuiste sin decir nada.
Solo estás asustada.
Puedo verlo, yo también lo estoy, pero yo aún estoy aquí, no me escapo.
¡No me digas que estoy equivocado! No me digas...
Vamos a dar una vuelta por la explanada.
¿Te quieres venir?
-Sí. -¿Sí?
-¡Sí! -Pues vamos.
¡Mira al pulpo que escupe fuego!
Mira aquel árbol.
Después de la Quema unos cuantos iremos a Tijuana.
-Sería increíble que vinieras. -¡Sí!
-Deberías venir con nosotros. -Me encantaría.
-Entonces te vienes. -Sí.
-Ya verás que lo pasaremos genial. -¡Sí!
¿Verdad, Frenchie?
-¿Qué? -¡Tijuana!
¡Tijuana, tía!
-¿Te vas a Tijuana? -Sí.
¡Sí! ¡Fiesta!
¡Sí!
¡Mira eso!
¡Madera otra vez!
¡Más y más madera!
-¿Verdad o reto? -Venga,
-este juego es para niños. -Pues dejemos a los niños jugar.
-¿De verdad tenemos que jugar a esto? -Venga,
-¡será divertido! -Eric, ¿verdad o reto?
-Verdad. -¿Con cuánta gente quieres acostarte,
o te gustaría acostarte, o te has acostado?
-Cinco. -Bueno, ahí te gana, Jo.
¡Oye, puta! ¿Con cuántas personas te has acostado tú?
Con más de las que habría pensado.
Esa respuesta es un poco vaga, ¿no crees?
Bueno, vale,
dejémoslo en "con todas las que he querido".
Muy bien, listilla, vamos a seguir jugando.
-¿Verdad o reto? -Verdad.
¿Cuál es el sitio más raro en el que lo has hecho?
Aquí en el Burning ayer.
Y digo raro porque estaba en el Barco Pirata de Lego.
Conmigo no era.
-A ver. Frenchie, ¿verdad o reto? -Verdad.
¿Te acostarías con nosotros?
Joder.
Déjame reformular.
¿Te acostarías con nosotros otra vez?
-Paso de contestar. -Aguafiestas. Entonces reto.
¡Venga! ¡A ver qué tienes!
-Te reto a que me beses. -¡Dios!
¿Qué mosca te ha picado hoy?
Bueno, esto empieza a animarse.
Eric,
¿verdad o reto?
¿Por qué haces tú todas las preguntas?
¿Es eso un reto?
Verdad.
¿Alguna vez has escrito una canción para Jo?
Oye, las reglas son las reglas, o sea que o contestas o haces el reto.
Lo siento, pero no lo haré.
Tengo una idea.
Dos entran, solo uno sale.
No.
-Él es demasiado dulce para eso. -No demasiado dulce para hacer un reto.
Ni siquiera sabes lo que es.
¡No os oigo!
¡Vamos, Eric! ¡Tú puedes!
¡Vamos, Alex!
¡Adelante!
¡Sí!
Muere.
¡Dale!
¡Sí!
¡Es genial!
-¿Tenías que darle tan fuerte? -¿Qué? Si casi ni le he tocado.
Estoy bien, Jo, tranquila.
No ha estado mal, ¿verdad?
-No. -Me has pillado un par de veces.
Alguna, sí.
Eric, tío, bien jugado. Me voy a alegrar de que hayas venido.
-Creo que voy a vomitar. -¡Mírales! ¡Tan amigos!
Venga, Pe, ¡dale un respiro!
-No estoy haciendo nada. -Sí lo haces.
Mira, este chico me gusta de verdad, así que para, ¿vale?
-¡Chicos! -¿Ya no puedo ni divertirme?
¡Eric!
-¡Ven con nosotros! Es divertido. -Jo.
-¡Vigila! -Eric, ven.
-No. -¡Venga, es divertido!
¡Estoy cansado!
¡Queen B!
-¡Queen B! ¡Buenos días! -¡Hola!
¡Vente con nosotros!
-¡Cuidado! ¡Estás echando el agua fuera! -¡Sí!
Buenos días,
-o tardes, lo que sea. -Son las...
yo tampoco estoy seguro.
Oye, ¿estáis tú y Penélope,
ya sabes, juntos?
¡Eric, entra!
¿Por qué no te apuntas?
No. No.
Acabo de quitarme de encima como dos kilos de arena.
Ya, tío, es muy polvoriento, pero una vez te acostumbras,
vale mucho la pena.
Oye,
¿hace mucho que conoces a Jo?
Como un mes.
¿Un mes y te cruzas el mundo? ¡Joder, tío!
Un poco más.
Te ha dado fuerte, ¿eh?
Sí,
puede ser.
-¿Y tú y Penélope? -Cinco años.
-¿Cinco años? -Sí,
pero yo por mi curro viajo mucho y casi no nos vemos.
¿Y cómo llevas eso?
Hemos sabido confiar. Encontrar un equilibrio.
Eso es lo importante, ¿no? , encontrar el equilibrio.
Sí, tío, es lo que buscamos todos.
Toma.
-Voy a entrar. -¿Sí?
-¡Sí! -¿Sí?
Sí.
¡Sí!
¡Eric!
¿Has visto eso?
Lo llaman el Templo de las Promesas.
Es increíble que este sitio exista.
Tú podrías hacer eso.
Sí, claro.
En serio, sí que podrías.
La canción,
tócame la canción.
¿Qué canción?
"¿Qué canción?".
Venga, tócala.
No está terminada.
Me da igual. Tócala.
¿Estás segura?
Sí, estoy segura.
Vale.
No salgas corriendo.
Antes yo creía
que las chicas como tú no caían de los árboles,
pero sí lo hacen.
Como una piedra tirada a un lago.
Como dos piezas diferentes que forman un mosaico.
Yo encajo contigo.
Tú corres rápido, pero yo puedo correr aún más rápido.
Yo iré primero si tú me sigues.
Johanna, iría hasta el fin del mundo por ti.
Me gustaría que construyeras una casa para mí
y la tallaras directamente de los arces,
si quieres.
Y tendríamos una gran pista de baile
y una habitación con las paredes insonorizadas.
¿Eso te suena bien?
Debo subir al escenario,
pero no tengo miedo.
Algo de ti me hace valiente.
Johanna, iría hasta el fin del mundo por ti.
Así que, por favor, intenta si puedes
calmar a este hombre en llamas.
Por favor, intenta si puedes
calmar a este hombre en llamas.
Está bien.
Está bien.
Te ha gustado.
¡Te ha gustado!
Es muy buena, Eric.
¿Sí?
Sí,
tienes mucho talento.
Oye, van a quemar al Man pronto,
¿vamos a buscar a los demás?
¡Vamos, es nuestra última noche!
-Vale. -Burning Man.
Ya no me voy a Tijuana.
Me vuelvo a Londres contigo.
¿Para el curso?
Entre otras cosas.
Oye, sé que a veces soy un poco perra.
-A veces. -Pero solo es porque te quiero y eso.
Yo también te quiero, Pe.
Esto ha sido increíble.
Este sitio.
Y ahora Tijuana.
-¡Tijuana! -¡Tijuana!
Sí, venga, esta es nuestra última noche. ¡Vamos a disfrutarla!
¡Inmediatez!
¡Hola!
-Estoy hecho polvo. -Yo también, la verdad.
¿Y ahora qué?
Tú, yo,
Jo,
Tijuana.
Ella no viene.
¿Qué?
Pensaba que lo sabías.
¡Chicos!
La noche es joven, ¿no? ¡Tú lo has dicho, Frenchie!
Es la última noche. ¡Venga, Frenchie, tú lo has dicho!
¡Vamos a tomar la última!
¡Venga, chicos!
¡La última, Frenchie! ¡Venga!
¡Ahora! ¡Venga!
¡Está bien! ¡Me apunto!
-Vuelve al campamento, yo voy enseguida. -Tranquila, voy.
Has dicho que estabas cansado.
No me importa, estoy bien.
Mira, tú vuelve, relájate y yo iré pronto.
¿Tienes miedo de que me escape o algo?
-No. -¡Venga! ¡A darlo todo!
Nos vemos luego.
¡Vamos!
¿Qué pasa, tío? ¡Baila con nosotros!
¿A quién buscas, cervatillo?
¿Dónde está Jo?
¿Dónde está Jo?
Vamos a jugar un poco.
Tú sigues buscándola y yo te digo si frío o caliente.
No estoy de humor para juegos.
Frío.
Frío, frío, frío.
¡Dime dónde está!
Caliente, caliente, caliente.
Te quemas.
¿Por qué no vienes a Tijuana con nosotros?
No puedo.
-¿También vas a seguirla hasta Tijuana? -¡Deja de jugar conmigo!
¿Qué coño estás haciendo?
¡Eric, cálmate!
Jo.
¿Qué coño está pasando? ¡Para! Eric, ¿qué pasa contigo?
¡Cálmate!
Pensaba que estabas con él.
No.
¿Por qué has venido?
-¡Necesita ponerte una correa! -¡Cállate!
¿De verdad pensabas que iba a irme?
Dímelo.
-¡Dímelo! -Sí, lo pensé.
Claro que lo pensé.
Siempre lo haces.
Eres un idiota.
Iba a volver contigo, Eric.
Lo siento.
-Eric. -Lo siento.
Te quiero, te quiero.
-Pero esto no va a funcionar. -No te vayas.
Esto no va a funcionar.
Vete a casa.
Frenchie.
¡Frenchie!
¡Venga!
Frenchie, venga.
¡Que te den!
¡Chico!
¿Qué te pasa?
¿Cómo ha ido?
¿Dónde está la chica?
No ha ido bien.
Has hecho todo lo que podías hacer.
Joder, ¡te viniste hasta la puta Nevada!
Y no ha servido para nada.
¡No digas eso!
El amor nunca es inútil.
A veces hace falta remover algunas cosas dentro.
Sí. Ya.
¡Mira adónde te ha llevado!
No eres el mismo hombre.
Quizá simplemente tenía que ser la chica que te hizo escribir esa canción.
Voy a por mis cosas. Tengo que volver a casa.
Ven aquí.
Tranquilo.
Venga.
Tranquilo.
No pasa nada.
Te veo en la estación, ¿vale?
No me jodas, ¿eh?
No me jodas, ¿eh? No me jodas.
¿Vale? Te veo en la estación.
Ahora entiendo por qué te volviste tan loco.
¿Ahora qué?
¿De vuelta a Londres?
De hecho,
creo que hay un bar en Nashville en el que tengo que tocar.
Ya lo creo que tienes que tocar allí.
¿Dónde está el taxi?
-Lo cambié por las entradas. -¿Qué?
Chaval, relájate. Ni siquiera era mío.
Ya se me ocurrirá algo,
siempre se me ocurre algo.
¿Cuántos kilómetros quedan?
¿Unos tres mil?
Estoy bastaste cansado.
LA CHICA DE LA CANCIÓN