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Buenas tardes a todos, tengo 2 grandes problemas:
núm. 1, soy hincha de Racing; núm. 2, me lo encontré acá al problema
cuando llegué ayer a Rosario, hacía mucho tiempo que no venía, me dijeron,
"Juan, mirá acá, esto es un evento en donde la gente viene a hablar
de buenas ideas, ideas que conducen al éxito, o sea, nada que ver con lo tuyo;
vas a tener que hablar del fracaso". Y bueno, acá estoy.
Debe ser, creo yo, porque desde hace unos 10 años, casi 10 años, llevo adelante el blog
"En Una Baldosa", que se ocupa precisamente de hablar de los jugadores
que no triunfaron en el mundo del fútbol argentino,
aquellos que jugaron poco, o que jugaron mal, aquellos que jugaron poco y mal
que también los hay y hay muchos;
o aquellos que directamente no tuvieron la suerte de jugar en primera división.
Bueno, la pregunta que yo me hice o que me hago constantemente es,
¿un tipo que no triunfó en primera, o si quieren,
lo podemos trasladar a cualquier otra actividad
de la vida cotidiana, o en otro laburo,
un tipo que no triunfa, es precisamente un fracaso?
¿Es precisamente un fracasado?
Bueno, para tratar de responder esta pregunta, traje un par de casos
que están en el sitio enunabaldosa.com
Que los vamos a repasar.
Este es el Dr. Khumalo, un sudafricano, que en el año 95
vino a jugar a la Argentina, más precisamente a Ferrocarril Oeste.
Le decían doctor, porque el padre quería que fuera médico.
Y desde muy chico le decía, doctor, doctor, doctor y terminó siendo futbolista.
Imagínense la frustración de su propio padre, el pibe terminó siendo futbolista y en Ferro.
O sea, lo que es una categoría así... demasiado baja.
Bueno, como Khumalo era el 10 de Sudáfrica,
vino a la Argentina, hizo un gol en su primer partido
frente a Independiente, un golazo.
Después se agrandó un poco, terminó el partido y dijo:
"Definí como Maradona y como Pelé juntos".
Humildad 0, la del tipo.
Yo me ilusioné, era bastante pendejo
pero me ilusioné y lo puse en mi equipo del Gran DT.
Estamos hablando del Gran DT cuando era por carta.
Había que armar un equipo en una planilla.
Tardabas un día armándolo, lo mandabas, yo soy de Mar del Plata
Clarín en Capital Federal, para cuando llegó la carta Khumalo ya se había vuelto a Sudáfrica.
No me sumó ni un punto, una cosa lamentable.
El Dr. Khumalo fue el primer homenajeado en el sitio En Una Baldosa
Y de alguna manera resume las características de un jugador 'baldosero'
Se le dice así baldosero al jugador que integra la página En Una Baldosa
Lo interesante es que nosotros no propusimos el nombre
fueron los mismos lectores del sitio que se dieron cuenta que necesitaban
llamarlos de alguna manera y bueno, ese fue el nombre BALDOSERO.
Un jugador baldosero, ¿es precisamente un fracasado?
No bueno, hay diferentes razones por las cuales un jugador
es un baldosero. Y hay muchos requisitos que deben cumplir
para integrar la página. No es necesario, por supuesto, que los tengan todos
pero con tener un requisito ya es suficiente.
Por ejemplo, y vamos a ver una placa. Lugar exótico, siempre vienen a Argentina
jugadores de Paraguay, de Uruguay de países limítrofes,
pero hay otros que vienen desde lugares
muy extraños, como por ejemplo, Khumalo que vino desde Sudáfrica.
Y acá los hinchas de Newell's.
Calculo que debe haber hinchas de Newell's, se van a acordar de un jugador muy particular
que jugó en La Lepra allá por el año 95, su nombre era Ernest Mtawalli.
Sí, este jugador que vino de Malawi y terminó usando la camiseta número 10 de Newell´s.
Así como los de La Lepra dicen, "la 10 la usó Maradona",
sí pero también la usó Mtawalli.
(Risas) Claro. (Apalusos)
Mtawalli vino desde África y la verdad que no anduvo muy bien. Nadie supo
cómo llegó en realidad. Nadie supo cómo se fue.
Hay una anécdota que incluso Newell´s
fue a jugar a Capital Federal terminó el partido,
los jugadores se metieron al vestuario, se ducharon
se subieron al micro, se volvieron y cuando estaban llegando a Rosario,
a alguien se le ocurrió preguntar,
"Che, ¿y Mtawalli?" Se miraron así y no estaba en el micro, se lo olvidaron.
"¡Uh! nos olvidamos a Mtawalli".
¿Cómo te podés olvidar a un *** de rastas?
Date cuenta.
La cosa es que Mtawalli tuvo un paso fugaz por el fútbol Argentino en el año 95.
Vamos a ver otro requisito: el nombre.
El nombre es fundamental y de esto hablaba mucho el *** Fontanarrosa que decía
que no era lo mismo llamarse Fernández o Gonzá*** que tener un nombre como
Roque Marrapodi, es una cosa muy sonora,
esto lo decía el *** y la verdad que nosotros coincidimos.
En esto de que hay que tener un nombre,
un apodo, o un apellido así contundente.
Como por ejemplo, este caso, el de Mariano Chirumbolo.
Chirumbolo es un apellido, primera noticia;
segundo, que este pibe sufrió toda la primaria, toda la secundaria
las cargadas, y llegó a jugar en primera,
o sea gran valor, y bueno, debutó especialmente en un partido
que yo siendo hincha de Racing me acuerdo mucho,
el día que salimos campeones después de 35 años,
Chirumbolo entró en el segundo tiempo y nos hizo un gol. (Risas)
Habla mucho de la historia de tragedias
que tiene Racing, yo dije, "Vamos a perder el campeonato por Chirumbolo".
Era para matarse.
Al final empatamos y salimos campeones pero bueno,
la gente se acuerda mucho de Mariano Chirumbolo.
Otra característica que hay que tener, el parentesco suma.
Seguramente muchos de Uds. laburan en empresas,
se darán cuenta de que muchas veces
entra gente por ser hijo de, hermano de, primo de...
En el mundo del fútbol se da mucho esto,
hay mucho hijo de... puta ¿no?,
y ahí te das cuenta de por qué llegan a jugar en primera.
Hay casos, ahora por ejemplo
podemos ver al hijo de Ramón Díaz como ayudante
y llegó a jugar en primera división, los dos hijos.
El hijo del Beto Alonso llegó a jugar en primera.
Hay un caso muy particular
que es el hermano de Silvia Süller jugó al fútbol,
en el ascenso, no estoy mintiendo, no, no es ***
este también era morfón porque era delantero
y no la pasaba mucho, pero no es ***
y así hay infinidad de casos de parientes y personalidades, tanto del ambiente
del fútbol como del mundo artístico o de la política. Por ejemplo este caso,
el sobrino de Alfonsín jugó en primera, una cosa increíble.
¿Había necesidad de hacerle la foto con el saludo alfonsinista?
Qué necesidad. Jugó en la primera de platense, muy pocos partidos y dicen que no llegó a más
porque era parecido a su tío, o sea, a un muerto.
Vamos al siguiente caso, hay una especie de clan en Sudamérica que es el
Clan Asprilla, tipos que dicen que son parientes del Tino Asprilla.
Y andá a comprobarlo no, te llega un grandote, un moreno así, colombiano, y te dice,
"Yo soy primo del Tino, quiero jugar", y terminan jugando.
Acá pasó en Los Andes, Temperley, en otros equipos que terminaron jugando
y acá vemos al Tino Asprilla, no sé si se llega a ver bien la imagen.
Está con el hermano menor, el hermano más chico.
Bueno, hermano más chico es una manera de decir, no es más chico que nadie.
Pero bueno, cosas que pasan en el mundo del fútbol.
Siguiente requisito para ser un baldosero, tener una buena historia.
Algo interesante para contar, porque el tipo que jugó 3, 4 partidos en primera,
no tiene ningún dato interesante, se llama Fernández, bueno, es baldosero también
pero hay que tener una buena historia, algo interesante.
Por ejemplo vamos a ver esta:
Acá nadie lo va a conocer a este muchacho es Zinho,
un brasileño que salió campeón en el mundial 1994.
Jugaba en el Palmeiras, era volante o delantero, jugaba bastante bien, muy bien.
Y un par de años después de aquel mundial del 94, en el 96 surge un contacto, así no sé como
para que llegue a jugar a Rosario Central, si, lo tenemos a Zinho.
Bueno, hablan con el representante.
Arreglan de palabra el contrato, solo faltaba que Zinho viniera a la Argentina para jugar en Central.
Lo van a buscar a el aeropuerto y cuando lo van a buscar llega este.
Miremos el anterior Zinho, ahora miremos el otro, el que llegó, nada que ver.
El técnico de Central, Ángel Tulio Soft, si alguno se quiere poner de pie,
un grande de Central, dijo que le habían encajado al Zinho trucho.
Evidentemente. Estaba grande Don Ángel
pero se daba cuenta de que era el trucho.
Y después terminó jugando bien, eso es lo extraño, porque a pesar de ser el Zinho trucho
este también era brasilero, también se llamaba Zinho también era volante o podía jugar de delantero.
Le gustaba mucho tirar, caño, tacos y de más, hizo 2 goles en Central. Jugó algo así como 14 partidos
pero bueno, era el Zinho trucho pero después se fue a Gimnasia y Esgrima de Jujuy.
Como se habrán dado cuenta, todas estas historias nos hablan de jugadores que no triunfaron
por diferentes características, no son necesariamente, me parece jugadores fracasados
muchos son buenos jugadores.
Muchas de estas historias que yo les fui contando, las conocimos a través de los lectores
que nos fueron dejando comentarios en la página o te dicen, yo lo vi a tal robando acá en la liga de Casilda.
O yo lo vi acá en San Nicolás a este jugando por el Pancho y por la Coca,
entonces ahí vas armando historias, vas pidiendo imágenes o nos envían videos
todo tipo de información para armar las historias en la página. Pero, los seguidores
de En Una Baldosa, también son bastante malos, son crueles y ellos para definir a los jugadores
suelen utilizar una palabra que es esta. Fracasado.
O sea, son bastante crueles, no necesariamente los jugadores lo son, pero ellos insisten
además yo me los imagino a los lectores de En Una Baldosa, oficinistas que están comiendo
al lado del teclado y viene el jefe y le dice, "Hoy te tenés que quedar 2 horas más"
y dicen "Bueno, bueno", y siguen y después le dicen, fracasado a un jugador.
El tipo que labura 12 horas le dice fracasado al que entrena 2 horas por día
eso es el fútbol y eso se ve En Una Baldosa, y es extraño también porque nosotros esa palabra
no la solemos utilizar quienes hacemos En una baldosa. Si utilizamos otras un tanto más leves
como las siguientes
Muerto, horrible, ladrón, pechofrío que acá en rosario tiene otra connotación la palabra pechofrío.
Es el antónimo del 'sinaliento' acá en Rosario.
Sinaliento y el pechofrío
nosotros preferimos quedarnos con baldosero, que de alguna manera termina englobando
todas las características de estos jugadores. Con el tiempo nos fuimos dando cuenta de que
le podíamos agregar más cosas a la página entonces dejamos de ocuparnos solamente de los jugadores
y empezamos a hablar de las camisetas o de los partidos insólitos, o de las transferencias que nunca
se habían hecho, Balderrama cuando vino a jugar en Newell´s y no terminó jugando
y a eso le agregamos un foro y también una cuenta de twitter que incluso se hizo más popular que el blog
y a eso le sumamos un programa de radio, una campaña para ir al mundial de Brasil
y próximamente va a haber un libro de En Una Baldosa para que el robo sea general
y bueno y no quede nadie sin billetes en el bolsillo.
Esto terminó generando, la comunicad de En Una Baldosa, o sea, gente que se reúne una vez al año
nosotros hacemos los denominados encuentros Baldoseros se juntan a comer a tomar algo
nuestros lectores, nuestros seguidores y oyentes e intentan jugar al fútbol.
Y dije intentan porque el nivel es lamentable,
gente, no que no sabe jugar a la pelota, sino que no sabe correr, intenta de alguna manera
les pica como la pelota de rugby, una cosa increíble,
y ahí te das cuenta de por qué son tan malos con los futbolistas.
Hay mucho de envidia, les dicen fracasados porque es lo que ellos no pudieron ser.
Hay mucho de eso en el universo En Una Baldosa y esos encuentros baldoseros nos dieron la
oportunidad de conocer a gente como la siguiente:
Darío Dubois, un tipo que se pintaba la cara de blanco y se maquillaba para jugar al fútbol
una especie de justiciero. Lamentablemente lo asesinaron hace un par de años
pero nosotros tuvimos la suerte de conocerlo y estuvo en un encuentro.
O por ejemplo conocimos en un encuentro baldosero al flaco Lamadrid
es aquel que está en un extremo junto a otros compañeros.
El flaco Lamadrid es el tipo peor vestido de la década del 80 y del 90. 2 décadas consecutivas
lo ganó el premio, así que lo ganó al premio, es todo un valor
vemos otra imagen del Flaco Lamadrid por ejemplo no parece tan mal a la distancia
pero si hacemos foco abajo tiene medias turquesas y alpargatas amarillas.
Y de hecho él me regaló su camisa después hace algunos años, así que acá la tengo a esa camisa
que figura en la foto.
Por ejemplo conocimos en un encuentro baldosero al siguiente personaje
que es Orestes Catoroso un tipo muy particular del mundo del ascenso.
En realidad dirigió un solo equipo que es All Boys, una especie de dandy, de playboy que es Argentino
y que él dice haber conquistado alguna vez a Cindy Crawford.
De ahí para arriba imagínense lo que quieran. Él estuvo en un encuentro, es nuestro padrino.
Y además conocimos por ejemplo a Sandro Guzmán, un exarquero de Boca que no
soportó la presión de ocupar ese lugar, el arco de Boca, y después terminó siendo un kiosquero
que además se dedica a la música es un artista rastafari y estuvo animando uno de los
encuentros baldoseros. Obviamente no siempre nos fue bien en los encuentros.
Alguna vez invitamos a Juan Manuel Suligoi,
un jugador que era un crack virtual, por un error de una empresa
que hacía jueguitos terminó siendo figura junto a Ronaldo, Batistuta y de más pero en la vida
real era suplente en Atlético Rafaela. Nosotros lo invitamos a un encuentro y nunca vino
confirmando quizás que era un jugador virtual. Y también en la edición del año pasado
invitamos a Claudio Benetti, aquel que le hizo un gol a San Martín de Tucumán y que le dio un título
a Boca después de muchos años, de hecho tenemos la imagen. Fue al programa de Mirtha Legrand,
Miren lo que es eso, está la torta de Mirtha y el paquete al lado.
Vino con regalo.
Claudio Benetti, lo invitamos a un encuentro baldosero y nunca llegó por un detalle menor
que fue que ese día quedó detenido, quedó preso, pero son cosas que pasan.
Todo este acercamiento que tuvimos con los protagonistas del mundo del fútbol
lo logramos con el tiempo, porque al principio los jugadores no querían saber nada con
aparecer En Una Baldosa, no querían saber absolutamente nada, entonces después
con el tiempo fueron entendiendo que esto lo hacíamos con humor y se lo empezaron
a tomar bien, entonces ahí, nosotros nos dimos cuenta de que ya no incomodábamos
a los futbolistas, entonces empezamos a tratar de incomodar, a tomarlos con humor
a los clubes a las instituciones, a los árbitros, a los dirigentes, a los periodistas, a los hinchas
a nuestros propios seguidores y también a nosotros mismos y de esa manera
poniendo palabras e imágenes en el lugar equivocado descubrimos que el miedo a ser
señalado como fracasado es general, no es solamente del futbolista nadie quiere
que le digan que es un pésimo periodista, nadie quiere que le digan que es un pésimo bloggero
o nadie quiere que le digan que es un pésimo hincha y que no llena la cancha
nadie quiere que lo inviten a una charla a hablar de fracaso y no de éxito, pero bueno
son cosas que pasan, en realidad, las cosas hay que tomárselas con humor
creo que la clave, la idea de todo esto es esa, tomarse las cosas con humor
empezar a sacarle el peso específico que tiene la palabra fracaso, que es solamente eso, una palabra
no significa nada más que eso, porque después de todo, todos, absolutamente todos en la vida
en algún momento fracasamos, porque todos somos en algún momento
muertos, todos somos horribles, todos somos ladrones, todos somos pechofríos o sin alientos
o simplemente, baldoseros.
Muchas gracias.