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Me llamo Javier Soto Fajardo y soy de Perú
y quisiera contarles un poco de mi vida
Es un poco duro y muy luchado.
Nací a los seis meses, muy pequeñito, con 33 centímetros,
con un kilo, 275 gramos.Y bueno, parece que fue algo grandioso
que yo viviera de una cosa tan pequeñita
tan, tan pequeñita. En ese tiempo
no había la ley de inclusión social, y dando vueltas por todo Lima
para ir a ver a qué colegio estudiar y no sabía en qué colegio estudiar
porque en cada colegio me rechazaban, me cerraban las puertas,
era muy triste.
Nos mandaban a un colegio especial, el colegio especial nos mandaba a uno normal
porque él hablaba normal, su inteligencia era normal
sólamente lo que estaba dañado era lo físico y ¿qué hicimos?
seguir luchando, buscando a dónde le cogían, a dónde nos mandaban.
y siempre, yo tuve esa decisión, ese objetivo de que él se supere,
que él no quede ahí, como está
Conocí al hospital Yancana Huasy, que me ayudó mucho a ser líder,
a desenvolverme más de lo que ahora soy, poco a poco,
se van conociendo personas, ayudándose mutuamente,
dándole apoyo psicológico, dándole apoyo moral,
dándole apoyo de... un poco de todo.
Y eso fue lo que me ayudó bastante a motivar mi vida
para que siga estudiando en el colegio y
acabé mi primaria, me fui a la secundaria, postulé a al universidad,
y la agarré a la primera, no más
en administración de negocios internacionales, sí, para negociar,
ser un gerente de mucho éxito, un gerente que sea muy democrático,
ayudante, que no sólamente mande. Con liderazgo fuerte y
ayudar a las personas en mi condición, como yo.
Yo tengo mi computadora y, bueno, agarro con un palito,
bueno, acá no está mi palito, y empiezo a teclear, tecleo muy rápido.
Mi madre es lo más grande que me ha pasado en mi vida,
es la mejor mamá que he conocido en toda mi vida,
es la mejor mujer, sí, la número uno.
Soy feliz con mi hijo por los logros que él está obteniendo
porque quiere estar en la universidad y no es fácil en un hijo así
y bueno, estar en un instituto, así como estamos ahorita acá,
Él quiere seguir preparándose, llevar otros cursos de otros idiomas,
y eso es lo que me alenta, me da fuerzas para poder yo darle y ayudarle.
Por ejemplo, una persona con discapacidad dice, no, yo quiero tal cosa,
y el papá dice, "no hijito, te vas a lastimar"; no, eso no es así.
inténtelo, no lo menosprecien, no lo sobreprotejan, que lo dejen ser libre,
que tome sus decisiones, con lo que él quiera que haga. Por ejemplo,
si él quiere estudiar, que estudie; si él quiere... no sé, estudiar carrera técnica
que estudie, que yo nunca me retracté, yo nunca dije no puedo,
yo siempre dije que sí podía, y bueno, por ese pensamiento, es hasta donde he llegado.