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Genes de competición: KTM marca nuevos límites
Me he pasado toda la vida en KTM y con motos.
Lo llevo en los genes porque mi padre fue piloto de moto y mi tío también, y además fundador de KTM.
Con los años tuve la oportunidad de cambiarme a las carreras de coches,
una experiencia igual de emocionante y divertida.
En 2010 fundamos la KTM X-Bow Battle, una competición muy popular para pilotos aficionados.
Hemos creado una comunidad muy sólida, somos más que una familia…
Si echamos un vistazo al paddock, vemos que los pilotos se traen a sus mujeres, a sus hijos...
y no se trata de ser el primero, sino de participar.
Ya nos dimos cuenta de que el tiempo de vuelta en la X-Bow Battle,
con los neumáticos MICHELIN que utilizaremos este año,
se reducirá en 3 ó 4 segundos dependiendo de la pista, y todos los pilotos saben que eso es muchísimo.
El X-Bow combina lo mejor de los dos mundos, el mundo del motociclismo por un lado y el de los superdeportivos por otro.
Hicimos realidad este sueño con la colaboración de nuestro diseñador Gerald Kiska y de Dellara
Y el resultado fue un coche de carreras apto para circular por la calle, el X-Bow.
Una de las principales razones por las que estamos aquí en Barcelona es la presentación del nuevo X-Bow GT.
Es la primera evolución del X-Bow desde que lo lanzamos en 2007.
Tiene una relación peso/potencia casi insuperable, consume poco combustible
y además es un coche seguro gracias a su chasis monocasco de fibra de carbono,
y por supuesto es atractivo. Creo que va a ser un producto estrella para KTM.
La mejor experiencia en las carreras de coches es cuando te encuentras con los demás pilotos
y llega el momeno de frenar en una curva… y sientes la emoción
de quién frenará el primero y quién frenará el último, y después tomas la curva a máxima velocidad.
Es un subidón de adrenalina en estado puro. Es una experiencia increíble…