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Fue en esta misma playa, hace ya varios inviernos,
que mi legendario amigo, Kurk Catrell, padre de tres chicos
tuvo su última sesión.
Revolcándose después de una caída, bajo el agua, chocó su cabeza contra una roca,
Y nunca respiró de nuevo.
De la misma forma, cada uno de nosotros tendremos nuestra última sesión,
y hasta ese último respiro, ya sea que muramos surfeando,
o en algo afuera del surf, nuestros días están contados.
La pregunta es, ¿qué pasa cuando morimos?
Hay cinco posibilidades:
Uno: Simplemente paramos de existir, porque somos solamente seres físicos...
Dos: Nos convertimos en espíritus sin cuerpos...
Tres: Reencarnamos...
Cuatro: Da igual cómo hemos vivido nuestras vidas,
todos vamos a cierta clase de paraíso...
O cinco: Conocemos a nuestro Creador cara a cara en un día de juicio,
y dependiendo de cómo le respondimos en esta vida...
El nos responderá entonces.
¿Qué tal si esta última posibilidad es una realidad?
¿Qué tal si la vida en la tierra fuera solamente una muestra de las maravillas de la vida, después de la muerte?
¿Qué tal si en lugar de negar la muerte y tratar de no pensar en ella,
debemos pensar el asunto?
¿Tal vez hasta prepararnos para ello?
No solamente preguntarme que estaré haciendo dentro de cinco años,
sino qué estaré haciendo en un millón de años.
La verdad es que no sé lo que ustedes creen,
pero estoy convencido de que en Cristo,
hay vida después de la vida.
Y algo muy grande pasó que puso esa convicción muy profundamente dentro de mí.
Déjame contarte mi experiencia...
Hace algún tiempo, fui a la costa para surfear y orar...
Después de un gran día de surf,
Estaba orando y Dios me habló muy claramente, escribí lo que Él me dijo.
Pero antes un poco de información: mi hermano era cristiano...
pero ni madre no.
Dios me dijo, "Terryn, tu hermano está a punto de acercarse a mí con mucha fuerza"
Palabras interesantes, no tenía ni idea de qué querían decir...
"y a través de esto tu madre se convertirá a Cristo,
y muchas otras personas también".
Wow, pensé dentro de mí- me iré a dormir...
a las 05:47 de la mañana siguiente el teléfono suena, era el novio de mi madre,
Malas noticias...
Mi hermano había muerto en un accidente de auto la noche anterior...
Llamé a algunos amigos y pasaron a recogerme de casa...
Estábamos en camino hacia Cape Town bajo una espesa neblina...
Y luego me acordé de las palabras...
"acercarse a mí con mucha fuerza" y pensé:
"¿Hay algún camino más directo para encontrar a Dios
que morir instantáneamente por una golpe en la cabeza como le pasó a mi hermano?"
Entonces leí esto a mis amigos...
pero no me estaban escuchando. Estaban señalando a un auto que venía
desde un destello de luz que apareció entre la niebla...
Al principio, pensaba que era el sol brillando,
pero no podía ser porque el sol está en el horizonte...
Y sin ninguna explicación científica
este destello de luz se queda a la par de nuestro auto durante cinco minutos.
Pero el momento más memorable,
fue el destello de luz que brillaba en mi corazón en ese momento.
La presencia de Dios se hizo tan fuerte...
Y sentí como si Dios me estuviese diciendo "todo va estar bien,
y que Ryan estaba más vivo que nunca."
Llegamos a Cape Town, vi a mi madre, nos abrazamos y entre lágrimas nos mantuvimos así por cinco minutos,
pero después se separa y me dice estas palabras, que no pude creer.
Ella me dijo, "Terryn...
Dios me ha hecho un milagro."
Y le digo, "¡¿Qué ha pasado?!"
Resulta que la noche anterior mi madre se fue a dormir temprano (su novio trabajaba hasta tarde esa noche),
Y encuentra una Biblia y dentro de su cabeza este simple pensamiento de dársela a Toray.
Mi madre pone la biblia al coistado de su cama...
La mañana siguiente al despertar se encuentra con la trágica noticia de la muerte de Ryan,
y le dice a su hermana que viene:
"Por favor lee este libro, creo que es una señal, ¡lee lo que sea!"
Su hermana abre una página de la biblia al azar,
y empieza a leer Juan 14 en donde Jesús habla...
Jesús dice:
"Confíen en Dios, también confíen en mí...
no dejen que ninguna tribulación les ponga triste el corazón, voy a la casa del padre,
Prepararé un lugar maravilloso,
donde podrán estar conmigo para siempre. Yo soy el camino,
la verdad y la vida, nadie va al Padre si no es a través de mí."
En ese momento...
Mi madre se da cuenta que Dios es real,
y que Jesús es el hijo de Dios,
y que Ryan está vivo y bien.
Entonces ella decide convertirse en cristiana...
y en los siguientes días mucha gente lo hizo también.
Lo sorprendente es que Dios me hablara,
pero lo verdaderamente asombroso de esta historia...
es que mi hermano conoció a Cristo.
Si mi hermano no hubiera conocido a Cristo...
hubiera sido otra historia.
Sin Cristo, deberíamos asustarnos de la muerte,
porque el juicio y el infierno son reales,
pero con Cristo, el juicio es reemplazado por perdón...
y el infierno por el cielo.
La muerte es algo a lo que no hay que temer nunca más.
Escucha cómo lo expone la Biblia:
"Como que somos de carne y hueso,
también Cristo, compartía nuestra humanidad,
para que por su muerte,
destruyera los poderes de la muerte,
es decir, al demonio,
y liberó a todos
los que estaban esclavizados por el miedo a la muerte (Hebreos 2:14-15).
En otro lado dice:
"Escribo estas cosas para que los que crean en el nombre del Hijo de Dios
tenga vida eterna" (1 Juan 5:13).
Si alguna vez estás a punto de ahogarte,
y alguien extiende su mano para salvarte...
¿te aferrarías a esa mano?
Por lo mismo espero que te aferres a la mano de Jesús,
cuando Él te la extienda.