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¡Hermanos!
Tenemos que estar atentos a Belcebú.
Cabeza de murciélago.
La mochila de los niños.
El siete pieles.
El barniz helado.
Cuidado con él porque puede apoderarse de tu cuerpo...
¡Y vivir en tu corazón en tu casa!
He traído aquí para dar ejemplo a Washington.
Trae a Washington aquí.
¡Mirad la carita de demonio!
¡Mirad qué semblante de Belcebú poseído!
¡Este ya se fue!
¡Sal! ¡Sal de este cuerpo! ¡Sal!
¡Qué haces! ¡Para! ¡No grites!
Estoy a tu lado.
Y no me toques que no te he dado esa libertad.
¿Eres el demonio?
Sí.
¡Os dije que era el demonio que estaba hablando con nosotros!
¡Sal de este cuerpo! ¡Sal!
¿Por qué?
¡Porque es el cuerpo de Washington!
Vale, pero ¿Dios no está en todo el mundo?
Exactamente.
Y todo el mundo son 7 billones de personas donde Dios está dentro.
Y... ¿Por qué no puedo quedarme sólo con Washington?
¡El demonio es retorcido!
¡Intenta que caigamos en sus trampas!
¡Pero no entro en el juego del demonio!
¡Habla bajo!
¡Me estas escupiendo!
¡Qué desagradable!
Mira. Washington está perfecto.
Washington está haciendo ejercicio, durmiendo, comiendo verduras...
Pero no tiene dinero.
Pero eso no se puede decir porque toda esta gente es rica.
La diferencia es que Washington gasta su dinero con él.
El demonio hace a Washington beber, fumar, prevaricar...
No. El demonio hace a Washington feliz.
Ayer Washington estuvo toda la noche follándose a Shirley.
Shirley es fiel.
Es fiel a esta iglesia y está casada.
Ella...
No. Shirley no es fiel.
¡El demonio es retorcido!
¡Sal! ¡Sal demonio! ¡Sal!
¡Sal de este cuerpo!
¡Para de tocarme!
¡Y tu también!
¡Qué insoportable!
Y otra cosa. ¿Alguien echa de menos a Washington?
Nadie le echa de menos.
Vamos a hacer una cosa.
Ya que insistes tanto con Washington.
¿Por qué no hacemos una custodia compartida de Washington?
Lo cojo después del culto y lo devuelvo al día siguiente temprano.
¡No negocies con el demonio!
¿Ahora dices eso?
Oh... Está intentando robar mi rebaño.
¡Os va a hacer mal a todos vosotros!
¡No le vas a hacer mal a mi rebaño!
No. Tú lo haces mucho mejor que yo.
Vamos a hacer esto.
Cálmate, respira, piensa en lo que te he dicho...
Voy a dar una vuelta con Washington para ver si Shirley está por aquí, ¿vale?
Piensa en lo que te he dicho.
Quédate con todo eso en la cabeza.
Tradução e legendas: Jaime Hernández Lescún
¡Cuidado con el Diablo! ¡Con el malo! ¡Con el siete pieles!
Que puede asumir las formas más diversas.
Que en las Spice Girls era Mel C, la deportista.
Que en los Back Street Boys era Kevin, ¡ese que nadie recuerda!
Que en Sexo en Nueva York era Mr. Big, que no quiso casarse con Cairre. ¿Por qué?
¡Porque es el Diablo!
¡Es el gobernador de Walking Dead!
¡Es Mun-Ra de ThunderCats!
¿Quién no se acuerda de Mun-Ra?
¡Es el esqueleto de He-Man!
Es Don Román, primo de Don Ramón.
No es Don Ramón, que es un buen hombre.
Es Don Román, su primo que fue quien... ¡Fue quien robó la plancha del Chavo del ocho!