Tip:
Highlight text to annotate it
X
Me llamo TJ Leyden
y soy un ex miembro de los cabeza rapadas neonazis
y un supremacista blanco.
Quisiera poder recuperar esos quince años.
Estaba con un grupo llamado Hammerskin Nation.
Trabajaba reclutando jóvenes para el movimiento.
Daba vueltas en mi coche y repartía discos compactos
y tres o cuatro días después,
pasaba de nuevo conduciendo por esa secundaria.
Los chicos me hacían señas para que parara.
“¿Tienes más de esa música?”
“Sí, pero tienes que venir y compartir con nosotros”.
Una vez que se cimienta la camaradería,
entonces dices:
“¡A Steve lo iniciaron anoche!
¿Qué vas a hacer?
¿Te vas a quedar sentado como un cobarde?"
Y si dicen,
“No, no voy a hacer nada”
entonces le muestras al resto
lo que le pasa a un cobarde.
Le das una golpiza frente a todos.
La parte violenta del movimiento
no me preocupaba.
No me importaba si me mataban.
No me importaba si me enterraban.
No.
Eso era solo el precio
que estaba dispuesto a pagar.
Pero cuando pensé en el
entierro de mi hijo...
Si no quería que mis hijos fueran como yo,
¿qué andaba mal con mi premisa de la vida?
¿Qué no funcionaba con mi forma de ser?
Estaba casado con una mujer
que tuvo dos de mis hijos
y tenía miedo de que, si le decía eso,
ella se lo contara a alguien
y me asesinaran.
Así que dejé el movimiento racista,
secuestré a mis dos hijos,
y tramité el divorcio
y la custodia legal de los niños.
Lo único que tenía era mi familia.
Mi madre había visto
el Museo de la Tolerancia
y al rabino Hier en televisión.
Y me dijo la mañana siguiente
que debería ir a ese lugar.
Le dije: “Mamá.
Él es un rabino.
Yo soy un ex nazi.
No va a funcionar. Créeme”.
Lo cierto es que ellos me pidieron que fuera.
Me preguntaron si había considerado
hablar en contra de mis antiguos amigos.
Les dije que tenía que pensarlo.
Porque sé lo que pasa.
Sé cuáles son las ramificaciones
de hablar en contra ese grupo.
Mi hermano el policía me dijo
“Derramaste la leche”.
En otras palabras,
Lo ensuciaste. Ve a limpiarlo.
Fui a mi primera secundaria
y di mi primera charla.
Veinticuatro horas después,
el movimiento supremacista blanco
tenía seis sitios de internet sobre mí.
Uno de esos sitios decía
“Elimínelo en cuanto lo vea”
Hay dos casetes
de noventa minutos con
“Sabemos dónde vives”.
“Vamos a matarte”.
“Tenemos tu número”.
“Mejor te cuidas las espaldas”.
BASURA TRAIDORA
Cuando estaba en el movimiento,
Me pudieron haber matado
las pandillas rivales...
Me pudieron haber matado
miembros de mi propio grupo.
Ahora no es diferente.
Ahora solo estoy haciendo lo correcto.
Estoy haciendo algo bueno.
Los que debieran odiarme más
y estar más furiosos conmigo
por lo que hice en mi pasado...
...son los que más me aceptan.
Ellos creen que todavía falta por hacer...
He sacado a casi cien jóvenes
de mi antigua vida de la supremacía blanca
y también los he sacado de las pandillas
Usted puede ayudar a la gente de cualquier forma.
Todo el mundo puede.
¡Solo tiene que estar dispuesto a hacerlo!
Yo soy TJ, y soy valentía moral.