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Aunque la formación de bancos puede ofrecer un cierto grado de protección a algunos peces,
otros optan por mecanismos más eficaces para mantenerse con vida.
En las profundidades del archipiélago de Mergui,
el pez teja pastel utiliza su boca para construir grandes montículos con restos de coral muerto.
Cuando se siente amenazado, el pez se mete literalmente de cabeza en ellos.
Esta raya enano raro y muy cerca del casco del Boonsong,
está bien dotada para ocultarse en la arena.
Cuando la raya presiente el peligro,
con unos rápidos movimientos desaparece bajo el fondo.
En ocasiones, las pastinacas de Kuhl se ocultan de un modo similar.
Junto con el aguijón de su cola y su considerable velocidad,
poseen las herramientas necesarias para evitar cualquier ataque.
Si falla el camuflaje natural del pulpo azulado,
cuenta con otra arma bajo la manga.
La imitación es otra estrategia defensiva habitual.
El pez aguja de hocico largo, pariente del caballito de mar,
parece un látigo de mar meciéndose con la corriente,
y por tanto pasa inadvertido a los depredadores.
Esto se conoce como "camuflaje pasiva".
El pez aguja fantasma ornado cuelga cabeza abajo,
imitando el abanico de mar detrás de ella.
El pez aguja fantasma ornado es capaz incluso de cambiar la coloración de su cuerpo
para confundirse perfectamente con el entorno.
Este lábrido esplendor mejilla alineada juvenil
se amalgama perfectamente con el abanico de mar detrás de ella.
A primera vista, el ranisapo de Commerson parece una esponja.
Se desplaza por el arrecife empleando sus aletas,
que han evolucionado transformándose en patas.
Cambia la coloración de la piel para adaptarse al entorno.
Ranisapos son un tipo de ***,
y tienen una estrategia muy ingeniosa para atraer a sus presas.
Posee una espina dorsal delgadísima, el illicium,
que mece como si fuese una minúscula caña de pescar.
Los deliciosos transeúntes, atraídos por el cebo situado en el extremo de la illicium,
son engullidos por una enorme boca en un fracción de segundo.
A veces, el ranisapo recurre al mismo movimiento
para advertir a los buceadores que se percata de su presencia.
El escorpión barbudo también abre la boca en una clara demostración de agresividad,
cuando algún buceador lo descubre o cuando entra en disputas por el territorio.
El pez escorpión barbudo es un maestro del camuflaje.
Se trata de un depredador de emboscada,
y cambia de color para confundirse con el entorno,
haciéndose casi invisible a sus enemigos.
Además del camuflaje, peces escorpión posee un peligroso arsenal
de espinas urticantes a lo largo de sus aletas, como estrategia de repliegue.
El pez escorpión diablo, también conocido como "falso pez piedra",
se camufla del mismo modo.
Su piel es increíblemente adaptable en textura y color.
Pero si algo le irrita, los brillantes colores de la parte inferior
de sus aletas pueden ayudar a disuadir a los atacantes.
El pez piedra posee una combinación incomparable de camuflaje y toxicidad.
Sus espinas contienen uno de los venenos más mortales del mundo marino,
y se encuentra inmóvil, semejante a una roca, esperando para atacar.
Aquí, en el casco de un panal de abejas Boonsung morena parece no darse
cuenta que lo empuja más allá de un pez piedra.
La estrategia habitual del pez piedra, salvo cuando se abalanza sobre una presa,
es sencillamente hacerse el muerto.
Morenas grandes se han sabido para cazar en el pez piedra.
En 1997, el barco de pasajeros, King Cruiser,
se hundió entre Phuket y la isla Phi Phi...